Mariam había estado acudiendo más seguido al hospital a ala de pediatría a veces lo hacía sola u otras con Diana que por su clase extra no podía acompañarla, aquella mañana estaba pintando con algunos de los niños, cuando una de las enfermeras debía sacarle sangre a un pequeñín de cinco años que no quería, Mariam se acercó a querer ayudarlo, cuando de pronto sintió un mareo que fue detectado por las enfermeras que corrieron a socorrerla, pero cuando se acercaron.
—Yo me siento solo es que — No pudo seguir hablando cuando de pronto lo vio todo negro cayendo al suelo inconsciente, actuaron de inmediato y la subieron a una camilla y la llevaron hasta el área de urgencias, e inmediatamente una enfermera fue a avisarle a Esteban, ya que era inevitable y difícil de dejar pasar por alto el amor que él le tenía y
—No tengo ganas de levantarme, el cuerpo me pesa tanto, no sé si ayer me desmaye o me arrojo un camión, que hora es—Sintiendo que las ganas de levantarse de la cama huían de ella. —Mami, ya es tarde te olvidaste de la escuela. —Princesa hermosa, disculpa ahorita te preparo un desayuno super rapido— Poniendo de su parte para poder levantarse y seguir su vida sin importar los malestares que tenían. —ya tome mami —como así]? Que tomaste? Que desayunaste? — leche y cereales y me hice un emparedado para el colegio —mi princesa es todo una Reyna, ya vamos que es tarde me cambio rapidito y salimos volando Diana y Mariam llegaron temprano en realidad, Mariam se agacho a su altura — como siempre buena niña verdad —si mami, yo siempre soy buena niña- la abrazo- te quiero mucho – y se despidió Mariam por algún motivo le entro
Mientras estaba sedada, Mariam estaba en algo así como un sueño se veía a ella cargando un bebe en brazos, pidiendo limosna cerca de un semáforo y cuando se puso en rojo, paso el auto de William quien solo la miraba de arriba abajo y le decía a Luis que siguiera de frente, dejándola con la mano estirada, luego era ella muy bien vestid, arreglándole el cuello de la camisa a un niño de aproximadamente 5 años que le decía “ estoy muy orgulloso de ti mami” y salían de la mano de un pequeño departamento y otra imagen en que estaba sola y se veía a ella misma de niña, recibiendo azotes en las manos “ no se coge el pan de la directora” “ pero” “ no me interesa que lleves dos días sin probar bocado tu o esos engendros que ni sus padres quisieron”” te dije que tenías
“Ya te perdoné, hace tiempo, pero no puedo olvidar, dañaste mi autoestima me denigraste como mujer hasta dejarme por los suelos, he llorado, sufrido como no tienes idea, pero ahora que quiero ser feliz, que alguien me acompaña en mis tristezas y alegrías vienes a pedir perdón…como si fuera fácil. Yo ya te perdoné, pero no puedes pedirme que olvide y vuelva aceptarte en mi vida, por más que exista algo que nos una para siempre. Amo a Diana como si fuera mi propia sangre, pero no puedo regresar contigo”Por fin está reconstruyendo su vida, uniendo esos pedazos que dejo atrás, pero no puede ser del todo libre si no enfrenta su pasado y le demuestra lo equivocado que estaba, no para regresar con él, sino para demostrar que era inocente y siempre lo fue.Él no puede creer, lo que se enteró en ese lugar, lo que escuchó,
MARIAMComo es la vida ¿Qué pasaría si nunca hubiera tomado la decisión de irme? ¿Qué hubiera pasado si William no me hubiera orillado a tomar la decisión que tomé? Aún seguiría allí. Quien sabe que más hubiera pasado. No todo ha sido miel sobre hojuelas, siempre quise tener un papá y hoy por fin puedo saber dónde estaba, Tenía tanto que contarte pero me imagino que ya todo lo sabes, me has cuidado de alguna u otra forma pero no lo haré por tu memoria no lloraré más al menos que sea de alegría El esposo de Mamá Jack es un encanto de hombre me está ayudando en todo este proceso ahora tengo tu apellido papá, soy toda una Oliveiros y tu nieto tendrá tu apellido o nieta aún no se. Hoy empieza un nuevo capítulo en mi vida, tengo
WILLIAM— Eres un imbécil ¿como le va a firmar esos papeles?—Habló Manuel.— Ya lo sé, no vez como estoy desesperado fui un imbécil, un tarado todo lo que me quieras decir me lo merezco—respondí ante el reclamo de mi amigo.— Ahora debe estar riéndose el desgraciado, en una playa paradisiaca con nuestro dinero yo también soy parte de eta compañía que estas hundiendo —me dijo molesto Manuel.— Es que el día que le firmé los papeles fue el día que también firme le divorcio, y no se me nuble solo firmé—respondí.— William, por tu imbecilidad, vaciaron las cuentas de la compañía y agradece que el inteligente de Marcos no te hizo firmar para vaciar tus cuentas personales, y ahora todos los trabadores no tendr&a
MARIAM— ¿Cómo amanecieron hoy?— se agacha Esteban y me da un beso en el vientre.— Bien— la verdad es que nada bien no había pegado casi un ojo en toda la noche pero no quería preocuparlo más— Aparte de ser tu novio soy médico, y esas ojeras dicen lo contrario— Lo admito me atrapaste— levanto mis manos en signo de inocencia— es que me sentí tan, no se incómoda— Después de ir a ese lugar iremos a que te chequeen al hospital ya guarde una cita para hoy— Está bien me rindo cuando tienes la razón la tienes— y le di un casto beso antes de comerme una tostada y jugo de frutas que él me preparó— ¿y hablaste con Mafer? —me interrogó
WILLIAM— No puedo creerlo enserio ese aboga ducho es un inepto Debí poner uno yo y no dejar uno del ministerio público, creo que estoy llegando tarde está llenoTodo está lleno que tanto escándalo por un delicuentucho de cuarta, me tendré que sentar por aquí aunque no podré ver bien al malnacido ese pero a estar parado como idiota llego el juez— Llamen a la testigo Mariam Oliveiros— ¿ Y esa quién es? no me abre equivocado de sala no creo y que tanto hablan— Qué bonita, enserio que linda señora&
—¿Se siente bien señorita desea un vaso de agua? — Indica el abogado defensor— Si por favor — Responde ella—La veo algo nerviosa, ¿Desea continuar? — L e pregunta el juez— Si su señoría quiero hacerlo, necesito hacerlo, sé que puedo hacerlo, vamos a estar bien – tocando su vientre—Ahora dígame, o díganos ¿Cómo llego a esa casa y porque? Hablo de la casa del que fue alguna vez su esposo el señor William Carson— Él se había averiguado por unos amigos que – apretó fuerte los labios y suspiro – William necesita con desesperación una niñera para su hija algo así como una dama de compañía por la niña sufría de trastornos de socializaci&