ALAN
No quiero sonar paranoico, pero no entiendo no me contesta el teléfono y no puedo llamar nadie de mi familia a preguntar porque ella no me contesta, parezco un gato enjaulado en este maldito avión, pensé que no era yo celoso, pero creo que me equivoque siempre fui muy ecuánime, pero es que ella es tan importante para mí que me da miedo lo admito.
─Tranquilo Garfield, que la gatita te va a contestar ya verás
─No te burles de mi Alejo, que agradece que soy civilizado y no te arrojo por esa ventanilla o cambio de asiento con esa viejita que se está quitando la dentadura,
─Que amargado era solo un chiste, pero ya tranquilo que esa chiquilla se nota que está loca por ti y tus huesitos.
─Es que la he llamado varias veces ya y no me contesta, quise calmarme un poco y no ll
DIANAYa casi dos meses sin saber de él, juro que siento una tristeza en el pecho y no de como ocultarlo ya, cuando recibo una llamada es mamá, casi se me cae el móvil espero que sean buenas noticias tengo que respirar profundo y no ser evidente.─Hola mami ¿Como estas?─Más tranquila hija, aunque no del todo─¿Porque mamá, todo bien? ─ Pego el móvil contra mi pecho y vuelvo a oírla─Estuvimos a punto de hacer un escándalo en señal nacional e internacional si era preciso.─Espera mamá ¿De qué hablas?─Toda la familia estaba preocupada por Alan mi amor y sé que tú también, tu padre tuvo que llamar a algunos amigos y pedir favores e imagina terminamos amenazando como si
DIANADicen que cuando uno se enamora hace verdaderas locuras, es como leí una vez en un libro que mamá me regalo, el amor te hace entrar en la locura o cordura, y mi de cordura no me queda nada.─Hay mi niña, juro que no me veía manejando hasta la casa, gracias a Dios que sé que vivías por aquí, pero te has demorado mucha hija en abrir ¿Todo bien cariño? ─ Mientras se termina el café que se ha servido.─Si abuela todo bien, pero ¿Qué haces por aquí? ─Le iba a decir tan temprano, pero al observar el reloj que estasobre el televisor de mi pequeña sala me doy cuenta que casi es once de la mañana, que cabeza la mía, pero es que el tiempo en los brazos de Alan pasan volando.─Mi niña te veo muy extra&ntil
DIANAHoy era un día muy importante, cumplo veinte años, no quise hacer fiesta así que solo es una cena en familia, mis papás, hermanos, tios y por cierto mi tía Tatiana está embarazada de mellizos mi tío Manuel esta como loco Y papá se burla de el por su puntería.─Princesa estas hermosa como siempre.─ Me dice mi papá mmuy contento.─Gracias papi y tu muy guapo así que tengo a quien salir, por cierto, papá te había pedido algo hace un tiempo, pero me dijiste que después verías.─¿Qué princesa? ─ Mientras nos sentamos a la mesa y mamá trata que Isabela se ponga la servilleta en el pecho lo cual odia ya que dice que no es una bebé para ponerse babero.─¿Encontraste foto de mi madre? si no es así
ALANLo conseguí, tengo la plaza fija en la NASA más de dos años entre ir y venir rindieron sus frutos, todo lo que soñé ahora se está volviendo realidad, me siento eufórico estoy de camino a casa, tengo ganas de ver a mis padres y abrazarlos y agradecerles por todo su apoyo en este tiempo, por impulsarme a no rendirme. y también quiero ver a mi hermosa novia solo faltan seis meses para su cumpleaños número veintiuno, a tan poco de poder gritarle a los cuatro vientos que nos amamos, recibo una llamada es mamá.─ Quiero solo Buena noticias mi vida─Son buenísimas mama, pero cuando llegue ahí te lo digo.─Como haces algo así con tu madre ─ Luego escucho la voz de papá─No le hagas caso hijo, tu madre es una exagerada que quiere el
MARIAMNo sé cómo acabará todo esto, si William no habla antes igual le romperá el corazón.─Tienes que decírselo William, ¿Cuánto tiempo más piensas callar? ─Me agacho y trato de verlo a los ojos, sé que tiene miedo y no es capaz de verme a los ojos tiene la mirada gacha, sabe lo que tiene que hacer, pero el temor a ver la decepción en cara de nuestra princesa es muy fuerte.─Sé que tienes razón, sé que debí hablar desde un principio, pero ver crecer a mi hija sabiendo que su madre nunca la quiso, es algo que mi corazón no soportaría, nunca fui capaz de decirle la verdad, era tan pequeña que con un brazo podía cargarla cuando esa maldita la dejo.─Por amor ocultamos cosas yo lo sé, pero ella ya casi tiene veintiún año
DIANAMe he levantado muy temprano, limpie un poco y decidí que era hora de ponerme en acción vi fotografías de desayunos perfectos, latinos, europeos hasta asiáticos y como no sé si es suficientes la verdad, los junte todos en uno o eso creo, para luego despertar a mi príncipe con un verdadero desayuno sé que tenemos que hablar asi que dejo el desayuno en la mesa de noche, cuando escucho que tocan el timbre me cercioro por el rabillo del pequeño orificio en la puerta y no logre ver a nadie, cuando abro la puerta veo a un niño corriendo, quiero gritarle, pero cuando avanzo un paso veo que he pisado lo que parece un sobre de papel amarillo, aunque me causa curiosidad porque dice mi nombre en letras muy grandes PARA DIANA me contengo de abrirlo, ya que tengo cosas mas importantes en que preocuparme, lo guardo dentro de un cajón y decido abrirlo despu&ea
ALAN─ ¿Te sientes bien amor? ─ Hace un rato la veo extraña estábamos en una cafetería bebiendo ella un capuchino y yo un café exprés.«Amor ¿Estás bien? Te estoy preguntando hace un rato ─ Mientras tomo su mano para ver si así logra reaccionar y finalmente lo consigo.─Lo siento amor, solo que antes de entrar para acá me topé con una señora muy extraña ─ Mientras veía hacia la ventana y logré ver un auto negro muy extraño, pero deben ser imaginaciones mías.─ ¿Cómo era la mujer? ─ La verdad que no lo sé, solo choco con mi hombro le pedí disculpas y cuando voltee ya no estaba, simplemente desapareció, pero me hizo sentir extraña y no sé por qué, Alan quisiera hacerte una pregunta y no sé cómo lo vaya
DIANAAcabo de tener una discusión muy fuerte con mi padre, han sido meses desde la primera vez que le pedí información sobre mi madre y se excusó en queya ni recuerdo que,es que son tantas veces que se ha negado , se lo he pedido en varias ocasiones y sigo dándome evasivas como hace unos minutos.─Solo quiero que me digas donde está enterada, das tantas vueltas papà que parece que te estoy pidiendo algo demasiado extraodinario ─ Mientras está dando vueltas en la sala de esta casa donde viví por tanto años, he llegado a mí límite y quiero que me diga donde está enterrada y eso que no le he dicho sobre las fotografías que me han estado enviando donde aparece una mujer cargando una bebé u otra que aparezco yo y mi abuelo de muy pequeña justamente en ese sillón donde esta mamá tom