30 AMARGO ENGAÑODespués de haber dejado a Serem en frente aquella mansión, Yagiz condujo directo al hospital donde se encontraba su abuela hospitalizada.Allí le contaría a su abuela, que era como una madre para él, que había conocido a una chica excepcional. Una muchacha sin modales afectados, y sin ninguna pretensión real de ser millonaria, o tener un estatus social superior al que ya tenía.Serem era una mujer de pies a cabezas, q pesar de su juventud, y ese beso casi túmido y casto que se habían dado, hizo que todo el cuerpo masculino de Yagiz se activara de un modo delicioso. Asya no era capaz de hacer eso con él, ni lo había logrado en todo ese tiempo que habían pasado teniendo encuentros furtivos.Condujo en coche por la movida y atestada ciudad de Estambul hasta llegar a la entrada de la exclusiva clínica privada de última generación en donde su abuela estaba hospitalizada.Enseñó su pase especial y subió sin perder era tiempo. Era tarde y era bastante probable que la noble a
31 AÑORANZA DE VERTE A Serem le costó conciliar el sueño, pues continuaba pensando todo el tiempo en aquellas facciones masculinas que le habían robado el alma. Así que aún contra su voluntad se trasnochó bastante. No podía dejar de fantasear e idealizarlo.Al día siguiente tenía que ir a matricularse en la universidad, así que si era preciso que madrugara.Más, cuando el desayuno sería intenso. Sobre todo, por el feroz interrogatorio que enfrentaría en las primeras horas de la mañana. Estaba segura que tenía que brindarle a Alison, Margaret y a las otras chicas detalles exactos de cómo había resultado ser aquella maravillosa Cita.Se despertó tan pronto la estridente alarma del celular sonó, no tenía tiempo que perder. Se metió a bañar, feliz de la vida, sin pensar en ninguna preocupación. Se vistió a prisa, ya era una experta combinando outfit y combinando colores. Alison había resultado ser una excelente mentora. Optó por un look monocromático, resaltando el color beige claro, q
Las muchachas estaban encantadas con que Serem por fin hubiera encontrado un caballero andante, que le hiciera sentir cosas hermosas y que por fin pudiera punto final al largo verano eterno en que la muchacha había vivido desde que nació. Había pasado por mucho, y su virginidad había salido ilesa, pero ya era hora de remediar ese hecho, así que apoyarían a Serem y la animarían a que esa relación funcionara, por el bien de la muchacha.Pues para ellas era inaceptable, de que tanto tiempo después de que Serem hubiera conservado su pureza, la perdiera en manos de un hombre que no la apasionara, o tan siquiera le gustara.Serem era en extremo reservada, pero a Alison al menos, no le pasaba por alto, la cara de la chica cuando veía al magnate. Esos ojitos violetas le brillaban con un especial destello, y la sonrisa de tonta que se le dibujaba en la cara, pues no tenía precio.—¿Entonces saldrán otra vez? — preguntó Margaret emocionada—Si, creo que si—admitió Serem— Aunque no pidió s
33 ES PEOR DE LO QUE PIENSA Tan pronto entraron, se detuvieron frente a la enorme escalera listos para descender y codearse con el resto de los invitados. El enorme salón que ocupaba la fiesta los recibió, y allí los reflectores la iluminaron de pies y cabezas con una luz roja en la cima de la escalera mientras descendía con la clase de una reina.Ni uno solo de los presentes en esa fiesta ahora podía ignorar su presencia, y eso hinchó el pecho de Adriano.Ella se sentía tímida, y comenzó a sentir temor también por otro tema.Yagiz era un millonario, y era bastante probable que también estuviera allí, eso fue suficiente para que sintiera un repelús terrible.Se sentía observada de todas partes, y es que en realidad así era, los hombres se babeaban por ella y las mujeres la reparaban de pies a cabeza, algunas admirando, pero otras tratando de encontrarle un defecto.Adriano, que en otras ocasiones la soltaba tan pronto entraba en calor, o encontraba una dama que, si aceptara sus
34 DOS SEMANASSerem llegó a casa absolutamente consternada, pero sobre todo deprimida, a pesar de los esfuerzos de Alison y Margaret por consolarla nada parecía ayudarla a recuperar el buen ánimo.Encontrarse con ese hombre había destruido un poco sus ilusiones, pues él la había mirado como la peor de las alimañas, y era bastante probable que después de eso el propio Yagiz la mirara de esa misma forma. La había juzgado sin tener una idea de lo qué pasó, o porque se inició en una vida de la que desconocía todos los detalles, pero eso no la hacía impura ni indigna. Solo la juzgaba por lo que él creía que hacía cada noche, al terminar la parte pública de su trabajo de acompañar a magnates. Ella podía entender que nadie en su sano juicio creería que una Escort sería Virgen.Estaba aterrada, de que la despreciaran, y eso ponía sus pelos de puntas. Tenía tantas ilusiones románticas, y ahora se percataba que casi idiotas en ese hombre, olvidándose que los separaba un abismo.Él era un se
35 UNA VISITA ESPERADASerem salió esa noche un poco confundida, Alison le había llenado la cabeza de tanta información que no se creía capaz de procesar ni en mil años. Llevaba dos años trabajando como Escort, pero aun así era un poco inocente en algunas cuestiones. Era una de esas ironías que aparecen en la vida, y que resultan increíblemente ciertas.Y no es que no supiera de que se trataba el hecho de hacer el amor en sí, sino que no sabía cómo se podría sentir tan excitada como para llegar a intimar tanto con un hombre, y le gustaba Yagiz Ozdemir como no le había gustado nadie jamás, pero eso no le daba confianza para entregarse cien por ciento segura de que lo haría por las verdaderas razones, y no por una pasión pasajera.—¡No puedes ser virgen para siempre!— le habían insistido las chicas tantas veces que ya lo había asimilado y en parte tenían la razón. Era prácticamente una prostituta, y como tal era juzgada por la sociedad de Estambul.El taxi recorrió las calles atestadas
36 LA PRIMERA PASIÓN Serem se sorprendió al ver que Yagiz había hecho una cena completa para ella. Se quedó impactada mirando aquella mesa completamente montada y decorada como si se tratara de un prestigioso y exclusivo restaurante para gente con dinero.Ella miró todo, y pasó el dedo por la mesa admirando aquel hermoso comedor, y todo lo que él se había esforzado por complacerla y agasajarla.Ella suspiró conmovida y cautivada por ese gesto, además de las chicas que la acogieron cuando se quedó sin nada, nadie trataba de hacer cosas por ellas a cambio de nada, así que adoró ese sencillo gesto.—¿Lo hiciste todo tu? — preguntó con emoción presente en la voz.—Si… espero te guste. Habitualmente soy mejor cocinero, pero hoy tengo que confesar que mi invitada me ponía un poco nervioso— expresó Yagiz y ambos quedaron en profundo silencio, y sus ojos se encontraron como dos fuerzas de la naturaleza.Aquellos ojos violetas de Serem contrastando con los azules ojos del magnate, los dejaro
37 EL MAR CON EL CIELOSerem no podía creer todo lo que estaba pasando, su cuerpo vibraba con aquel candor de no saber cómo ser la mejor amante.Era inexperta, no sabía cómo ser capaz de darle a él, tanto placer como el que estaba recibiendo. «!Que ciertamente era mucho!»Quería adorarlo, expresar todo lo que estaba sintiendo en el cuerpo y en la mente, pero solo permanecía inmóvil allí, mientras que él era capaz de hacer su magia. Adoraba sentirse de aquel hombre hermoso y adorado.Con cuidado la levantó de aquel sofá, pues no se permitiría tomarla allí, y no en la comodidad e intimidad que ofrecía su dormitorio.La llevó con cuidado sin dejar de besarla, sin dejar de abrazarla contra su pecho.Empujó la puerta con el pie, y halló la manera de entrar con Serem aún en brazos.Ella contuvo la respiración, estaba emocionada hasta la médula. Pérdida en sus ojos, y él irremediablemente fascinado por aquel violeta profundo que despertaba con nuevas tonalidades por la pasión.—¡Creo que ten