Aurora traga grueso y luego, tratando de retomar su compostura para decirle —¿Qué haces aquí?—¿Qué hago?— coloca sus manos en la puerta, dejándola sin salida —¿Cómo entraste?— Aurora está sorprendida y se pierde en esa mirada neutra de Oliver—¿Se te olvida quién soy?— acerca sus labios a los de Aurora, los cuales están entreabiertos deseando ser devorados —me has mentido...— murmuró y vuelve a pasar saliva, bajando su mirada a los labios de su mafioso—¿En qué sentido Aurora? Traje a mi hermana para que te aclarará la situación —¡Mentiste al decirme que desde que me viste en la fiesta eras solo para mí! Resulta que querías tener algo con Dulce María —lo que pasa es que estás muerta de celos— pega su pecho al de ella, haciendo que a la pobre chica le falte el aire —¡Para nada! No siento celos, solo que no me gusta que me vean la cara de estúpida —¿Pero tú si puedes verme la cara de estúpido?— frunce el ceño y luego esboza una sonrisa amarga —Dulce María es hermosa. Primero la c
—¡Oliver!— lo menciona, pero él se ha marchado, necesitaba alejarse de Aurora, ella es su más divino pecado y sentía que no iba a soportar más, literalmente quería hacerle el amor Aurora se resigna y cierra la puerta. Las lágrimas se le salen, le duele recordar todo lo que le dijo Oliver y sí, él tiene razón, no debía actuar de esa manera. Pero es como una forma de defender su corazón.Ni siquiera quiso almorzar, ha estado encerrada esperando que quizás él regrese, o capaz y sea su orgullo por irlo a buscar, pero siente que le arde el corazón y que ni fuerzas tiene más para llorar.La ansiedad la está atacando con preguntas seguidas y la mayor es el hecho de que Emilio sea un mafioso, no comprende como él se metió en su corazón tan rápido pero tampoco se quiere alejar, no quiere. Si estomago gruñe y es entonces cuando un pensamiento paraliza su corazón por segundos. —¡No puede ser posible! ¿Cómo lo olvidé?— recuerda que no tomo las pastillas de emergencia, así que saca cuenta y ya e
Los gemidos ahogados gracias al beso hambriento los hacen disfrutar más. Aquellas caricias posesivas hacen quemar la piel, incitando el placer. Ni siquiera les importa si los ven, solo existen ellos dos.Cuando Oliver se corre dentro de Aurora, le sonríe maliciosamente. —me saliste gata...— lo dice con dificultad, porque está agitado debido a la fuerza que tuvo que hacer —¿No te gusta?— pregunta mirando los labios rojos de aquel hombre que es su tentación —todo de tí me encanta y más si te vuelves, una fiera marcando territorio —¿Eres mío Spencer? —lo soy...—vamos al baño, quiero más de ti Oliver oculta el asombro por la propuesta indecente de Aurora. —¿Ahora entiendes por qué me vuelves un demente?— la besa con tal rudeza que le hace dolor los labios, pero le encanta —vamos a tu habitación, quiero que estemos solitos— la baja cuidadosamente —no tienes idea de todo lo que te voy a hacer Aurora sonríe satisfecha. —no sabía que bailabas a un nivel de perfección, quiero que baile
Aurora aún está procesando la información, literal, se esperaba cualquier cosa menos que Oliver Spencer, sea estéril.Lo peor de todo, es que Oliver al no escuchar palabras por parte de Aurora, lo hace sentir por primera vez en su vida, inseguridad. Después de todo, siempre hay una primera vez y más cuando alguien te importa tanto.—perfecto. Acepto la derrota— Oliver busca su camisa, la cual está en el suelo y se la coloca Momento en el que Aurora lo mira aterrorizada y corre sus brazos, dándole un fuerte abrazo mientras solloza. Siente que Oliver es muy sincero y que sus palabras le tocaron el corazón.—si tan solo me aceptas con mi condición, te juro, Aurora parrow, que te haré feliz, no llores por favor— seca las lágrimas que se deslizan por las mejillas de su mujer —aun así lo quiero todo contigo— confiesa Aurora —pero debes dejar esa vida por favor, no tardes en hacerlo, no quiero que luego te pase algo peor... Que mueras...— solloza aún más, por lo tanto, Oliver la abraza, no
Aurora parrow, jamás se había sentido tan feliz como al estar en los brazos de su mafioso. La noche llegó dándole paso a la hermosa media luna y aquellas estrellas que brillan como dos luceros en el cielo.—estoy feliz— sonríe sin dejar de mirar el Cielo. Ambos están acostados boca arriba mirando el cielo, sintiendo el frío recorrer sus cuerpos, sintiendo la plenitud del amor y paz en sus vidas —Me alegra escuchar eso. Pero... Tengo algo importante que decirte— Oliver tiene la atención de Aurora —¿Es algo malo?—No. Ven, de pie— le pide y ambos lo hacen para luego colocarse de pie —me estás asustando— Aurora pasa saliva Spencer sonríe con esa malicia que lo caracteriza y que a ella la seduce. Él saca su móvil y envía un texto dándole la orden a Ramos, una sorpresa que tiene para su traviesa mujer.—Oliver, me asustas, solo dime ¿Qué sucede?—por favor, mira hacia allá— señala y Aurora obedece, siente sus piernas temblar, el misterio para ella es una tortura, además por el frío qu
—¡Ya fue suficiente!— grita Aurora a todo pulmón —quieran o no, Oliver es mi hombre, lo amo y él me ama, ¡Al diablo lo que ustedes piensen!— Aurora se acerca a Oliver y lo abraza sin importar que sus hermanos lo tienen detenido —veremos qué dirán nuestros padres cuando se enteren de esto— dice Massimo y Aurora se preocupa, sus padres saben la verdad Israel le hace una seña a sus hombres para que ataquen, pero en eso llega Selene y Dulce María.—¡Alto ahí!— Selene ordena con voz de mando a los escoltas de su hermano —aquí nadie va a pelear. ¿Para eso dijieron que iban a tener un momento de hombres?— mira con desdén a su hermano —pequeña, no te metas— Israel sabe que todo se arruinó —¡Cállate Israel! Estoy embarazada y quiero tener paz. Mi embarazo ha sido difícil, necesito tener paz ¿Pueden? ¡Y tú Massimo Parrow!— lo señala muy furiosa —cariño debes calmarte, no le hace bien a nuestros bebés—¡Debías pensarlo antes de planear toda esta atrocidad! ¿Pensaron que no me iba a dar cue
Aurora tuvo una fuerte disputa con su hermano Miguel. Al cual dejó hablando solo y se fue a su habitación. Está ansiosa, sí, pero a su vez feliz por la propuesta matrimonial de Spencer, sin embargo, está al pendiente de que su amor toque la puerta para abrirle y lanzarse a sus brazos. ¿En qué momento surgió un amor tan fuerte? Las buenas atenciones, la inteligente y la guapura construyeron un amor que ambos sin darse cuenta, empezaron a sentir.Está sentada en el sillón, esperando impaciente el toque, pero nada y eso la preocupa. —¿Oliver... Te estoy esperando?— susurra sin dejar de mirar la puerta y allí espera unos minutos sintiendo sus ojos arder, además del cansancio que siente su pobre cuerpo. Cuando unas manos la tomaron desprevenida, al cubrir sus ojos cegando su visión Su corazón se paraliza del susto, pero ese olor varonil de Oliver está tan impregnado en sus fosas nasales que lo conoce perfectamente. —¡Amor...!— exclamó emocionada y él la suelta La chica se pone de pie co
—¡¡Oliver!!— lo menciona a gritos, corre a la sala pero él ya se ha marchado por la terraza —no por favor no— se desplomó en el suelo, quedando de rodillas con su corazón hecho añicos, no se esperaba una situación así, es tanto que lo ama que le arde el corazón por saber que se ha ido y no sabe cuándo volveráSpencer llega al auto. Dónde Ramos lo esperaba con gran preocupación. —lamento la insistencia señor, pero el jet está listo —perfecto— se sube mirando hacia la entrada del hotel, Ramos camina para subir al auto como acompañante del conductor —Ramos, te quedas aquí —Pero señor... Usted me necesita —necesito que cuides a mi mujer, no quiero que se de cuenta de que la vas a estar vigilando —entiendo señor. Por favor, cuídate—no es necesario que lo digas, pero presta atención Ramos, todo lo mío será de Aurora si algo me llega a pasar, quiero que cada vez que mi mujer vaya a la mansión, la atiendan como la reina que es. Hombre que se le acerque, lo sacas del camino. Ella es solo