Mi teléfono vibra, lo saco de mi bolsillo, pero no logro entender quién me está llamando, seguramente debe ser mi madre, por el resto del día decido apagar mi teléfono, no quiero hablar con nadie y muy seguramente el señor Baker no va a llamarme hoy, no después del chasco que se ha llevado.De tanto llorar me he quedado dormida, me duele el abdomen de tanto llorar y el estómago también, no he comido nada en todo el día, tampoco es que tenga mucha hambre. Mi respiración se va relajando poco a poco al punto que ya nada me preocupa... no de momento.Siento una mano cálida sobre mi cabeza que me acaricia con delicadeza, abro un poco los ojos y me encuentro con Marian, en su rostro se refleja dolor y tristeza, recordando lo que me acaba de pasar, me siento en la cama y la abrazo con todas mis fuerzas, volviendo a romper en llanto. Mi amiga me acaricia la espalda y trata de consolarme.—Ya cariño, ya.... — Susurra delicadamente cerca de mi oído. —No llores... estoy segura que sabrás como ma
Un pequeño jadeo de sorpresa se me escapa cuando veo el enorme lugar, todo es tal lujoso y bien decorado, las mesas tienen bellos manteles de color blanco y hermosos centros de mesa, un enorme candelabro cuelga del techo y la música clásica en vivo es el toque ideal para el lugar. Mateo me ofrece su brazo de forma caballerosa y empezamos a seguir al recepcionista, de momentos lo miro de reojo. Debo admitir que él se ve bastante atractivo de traje y que todavía conserve puestas sus perforaciones de las orejas, le da un toque rebelde y elegante, los Baker pueden crear estilos bastantes interesantes.Llegamos hasta nuestra mesa y tomamos asiento, luego nos dan el menú y me pongo a leerlo, pero... no entiendo nada de lo que dice, simplemente veo los precios y se me han quitado las ganas de comer; ¿Por qué estoy leyendo un menú en otro idioma? Ni siquiera logro distinguir que idioma es ¿italiano? ¿francés? A saber, parece ser que me voy a quedar con hambre. Cierro el menú suavemente y lo d
Llega el mesero y todos piden, cuando es mi turno, pido mi litro de agua, el hombre me mira un poco confundido, pero no dice nada y simplemente lo anota, antes de que se vaya, Derek pide algo más y luego despide al mesero. Parece ser que el señor Baker tiene mucha hambre esta noche.Mientras esperamos, Mateo nos platica sobre cómo le está yendo en la escuela, yo escucho atentamente, pero mi concentración se ve interrumpida por la insistente mano de Derek que no deja de posarse sobre mi pierna y levanta lentamente mi vestido, he puesto mi mano sobre la suya tratando de detenerlo, pero él insiste.Me acomodo varias veces en mi lugar, esperando a que mi amo me deje tranquila al menos durante estos momentos, pero él no desiste, al final, termina metiendo su mano por debajo de mi vestido y lo lleva hasta mi entrepierna, enseguida aprisiono su mano para impedir que siga avanzando.—Por cierto ¿Cuándo es tu cumpleaños?—Es el 19 del próximo mes.Tomo pequeñas bocanadas de aire, tratando de m
—Mateo, me tengo que ir.Posa sus ojos sobre el tipo de la moto y luego regresa su vista a mí, es obvio que está enojado y no le culpo, pero mantiene una expresión tranquila y me dedica una pequeña sonrisa, se acerca a mí y toma con delicadeza mi mano derecha, luego deposita un beso sobre el dorso.—Está bien, te veré mañana en la universidad... cuidate.Mis mejillas deben de estar rojas por este gesto tan caballeroso y amable, luego me giro hacia Derek y me despido de él, a diferencia de su hermano, él no está para nada feliz y no se molesta en disimularlo, pero en estos momentos necesito hablar con Connor. Regreso a él a paso apresurado, él se quita el casco y me lo entrega.—No traje otro, así que ponte este.—No hace falta, póntelo.Él insiste en darme el caso y termino aceptándolo, pero luego se lo vuelvo a poner, antes de que se lo vuelva a quitar, me subo a la parte de atrás de la moto y le pido mis cosas, luego me acerco a más a él y paso mis brazos alrededor de su pecho, vuel
—No había necesidad, Connor me trajo— Se me escapa un bostezo bastante ruidoso.Me levanto de mi lugar y empiezo a quitarme el vestido, pero el cierre se ha atorado. Me pongo nerviosa al sentir las manos de Baker, que, sin esfuerzo alguno logran bajar el cierre por completo, le miro de forma breve y agradezco la ayuda, antes de que pueda alejarme de él, mete las manos por la abertura y toma mis senos, apretándolos con fuerza.—Dejamos algo pendiente.Dejo caer el vestido al suelo, Derek empieza a besar mi cuello y mordiéndolo un poco, unos pequeños gemidos se me escapan y me dejo llevar por el momento. Ahora estoy entregándome a él por completo, notando claramente la diferencia ya que no para de gritarme lo mucho que me extrañaba y yo también le digo lo mismo.A la mañana siguiente me despierto temprano gracias a la alarma de Derek, levanto la mirada hacia él y una pequeña sonrisa se dibuja en mis labios. Con mucho cuidado me levanto de la cama y me dirijo al baño.Estando arreglada m
—Maldito cabron.... — Sisea mi hermano molesto, me toma de la mano con fuerza y me acerca a él. —Ten cuidado con él Trisi, no quiero que te veas involucrada con ese tipo de personas.—Tranquilo, el señor Villanueva es un hombre razonable y estoy segura de que podremos llegar a un acuerdo— Le susurro delicadamente.—Me alegra saber que mis sospechas eran ciertas, pero me siento sorprendido de que ustedes dos sean hermanos.—Brandon es un hombre bastante inteligente y razonable, pero cuando se enoja pierde el control.Sonríe de una forma extraña y como me mira es igual de rara, trago saliva con dificultad por el miedo que tengo. Armando me dice que le siga para que podamos hablar sobre la fianza de mi hermano y sobre la compensación que debe recibir por los daños causados, antes de irme con él, me giro hacia Connor y le entrego un pedazo de papel, en él tiene escrito el número, le digo que lo único que necesita decirle es que venga a la comisaria por parte de Williams.Mi hermano no me
Sin dudarlo dos veces corro hacia él, tirándome a sus brazos, Brandon acaricia mi cabeza con mucho cuidado, de la emoción, me he puesto a llorar. Mi hermano se acerca a mi oído y susurra con mucho amor y cuidado que no debo llorar, que todo va a estar bien a partir de ahora, cuando habla, me abraza con más fuerza.—Ya Trisi, sabes que no me gusta escucharte llorar, además de que eso significa que me vas a vaciar la cartera.No puedo evitar reírme de sus palabras, ya que él tiene razón, hicimos un trato desde que éramos niños, siempre que me hiciera llorar, tendría que invitarme un helado, pero para su mala suerte, los helados que me gustan mucho son algo caros.Estando más tranquila, pasamos a la recepción a recoger las cosas de mi hermano para después salir del edificio. Él toma su teléfono que previamente guardo en su bolsillo y empieza a revisarlo, luego una media sonrisa se dibuja en sus labios.—Sabes, creo que me voy a volver gigolo.No puedo evitar poner una mueca de desagrado
Derek.Mientras estoy trabajando, no puedo dejar de pensar en la cena de anoche, de cómo Tris se retorcía de forma disimulada en su silla, como me suplicaba con la mirada que la dejara tranquila, pero no me pude resistir a tocarla, en especial por ese vestido que llevaba, se veía tan sensual.Después de que ella se fuera con aquel hombre, me despedí de mi hermano y fui a dejar a Rose a su casa, ella quería quedarse conmigo, pero yo no, estaba necesitado de Astrid y no pensaba dejarla ir.Apenas llegué a nuestro departamento, hablé con Rayan y le pedí información sobre todo el círculo social e íntimo del hermano de Astrid, él no parecía sorprendido de que le dijera que ella tenía un hermano, de hecho, hasta me dijo su nombre y yo no me impresione de que él lo conozca, teniendo en cuenta de que su fuerte es la información.Mientras me daba una ducha, me envío información sobre Brandon y una foto de él, me impresionó saber que él también era un pelirrojo, incluso Rayan quería incluirlo e