—¡Maldito transito!— Me quejo cuando finalmente consigo estacionar en el garage del hospital donde está internada la mujer que amo.
Ya es más de media noche, estoy abatido por el dolor, y no haber podido comunicarme con Guillermo no ha hecho las cosas mucho más fáciles. Bajo del auto a toda prisa, y camino hasta entrar al hospital. Camino por los pasillos hasta llegar al área donde estaba hace algunas horas con Guillermo, y para mi sorpresa no está solo él. —Buenas noches.— Digo algo confundido y cruzo mi mirada con la de Guillermo —¿Cómo esta Sofía?— Pregunto sin poder prestar atención a nada más.
—¿Tú eres el jefe de mi hija?— Me interrumpe una voz masculina y al darme la vuelta me encuentro con un señor bastante alto de cabello gris y ojos azules. Se le ve triste y no es para menos.
—Soy un poco m
Me tiemblan las manos con tan solo abrir la puerta de la habitación donde ella está internada, me pesan los ojos de tanto llorar, mis piernas se sienten débiles y mi corazón aún mucho más. Respiro profundo intentando tranquilizarme tan solo un poco y termino de entrar a la habitación.Es verla sobre esa cama conectada a varias máquinas que controlan su pulso, su corazón y su respiración lo que me hace tener un golpe con la realidad de manera inmediata. Pude haberla perdido a ella también, no es que esto me consuele por la pérdida de nuestro hijo, pero de alguna manera me genera una pequeña luz de esperanza en medio de todo este desastre.— Muñeca.— Digo en un susurro mientras me voy acercando a ella.Ella me mira con la poca fuerza que tiene a causa del efecto de la anestesia y lo agotada que está –—Kilian.— Dice tan bajito
4 de noviembreHa sido la noche más larga de toda mi existencia, los doctores no nos han permitido verla y yo no me he movido de está sala de espera. El cansancio físico me exige irme a dormir, pero mi cabeza se rehúsa a hacer que mi cuerpo se mueva para irme de aquí.Las horas siguen pasando y sus padres junto a su hermano están en las mismas circunstancias que yo. —Le han dado de alta a Mia.— Irrumpe el imbécil de Guillermo y de inmediato le miro con mala cara.—Me alegro, pero ¿no pensaras llevarla con tu esposa? ¿no?— Cuestiono y se me queda mirando de manera desafiante.—¿Quieres que la deje aquí en el hospital?— Refuta a modo de reto.No dudo un instante en ponerme de pie frente a él —Por culpa de tu mujercita y tú, Sofí está allí dentro luchando por su vida y perdió
3 días después: 7 de noviembreDespués de más de tres largos días en el hospital, finalmente estamos llegando al que ahora es temporalmente nuestro hogar, pero no estamos solos. Sus padres y Maximiliano han venido con nosotros y Mia para asegurarse que todo esté bien.—Ma, que ya me siento bien. — Insiste Sofí cuando su madre le ayuda a sentarse en el sofá y acomoda los almohadones detrás de su espalda.—Hija, el accidente que has tenido no ha sido tan simple, déjate cuidar. — Explica su madre e intento no reírme de la situación.Al mirar hacia abajo, Mia esta parada frente a mí y me sonríe, haciendo que yo me agache para quedar a su altura —¿Tienes hambre pequeña?— Le pregunto perdido en sus ojos azules.Ella asiente de inmediato —Sí. — Me responde y sin pensá
5 días después: 12 de noviembreLos últimos días han sido un sube y baja de emociones, hemos estado tristes por la pérdida de nuestro bebé, hemos estado entusiasmados por la boda, y hemos estado felices porque la vida nos ha permitido seguir juntos a pesar de todo —¿Nerviosa?— Pregunto al verle inquieta en su asiento en este cómodo avión que nos está llevando a Las Vegas.Ella me mira, niega y se sonríe —El nervioso deberías ser tú, esta convención es muy importante, eso sin contar que estás nominado a empresario del año.— Rebate y como siempre tiene una respuesta para todo. No cabe duda alguna que su recuperación ha sido bastante rápida, por supuesto aún quedan rastros de esos morados que han dejado los golpes, pero ella los esconde bien con ayuda de maquillaje.Le miro quedándome lo
Sin soltarle de la mano, hago que vayamos hacia el baño y puedo notar lo sorprendida que esta apenas entramos y ve el increíble jacuzzi frente al ventanal con vistas a la ciudad que ofrece este sitio —¿Te gusta?— Pregunto perdido en su rostro.Asiente de inmediato y me mira a los ojos —Cuando mencionaste el ducharnos, imaginaba una típica ducha y los dos apenas cabiendo bajo la cascada de agua, pero esto...— Dice dejando la frase en el aire.Sonrió triunfal y me paro frente a ella —Esto es lo que tú y yo merecemos para comenzar a escribir esta nueva historia juntos. — Explico completando la frase que ella comenzó.—Sí que has pensado en todo, ¿eh? — Comenta divertida mientras lleva sus manos a mis hombros por debajo de mi cazadora.—Es imposible no querer planear los días más románticos junto a ti, estoy muy enamorado.&
Al día siguiente: 13 de noviembreLa luz del sol alumbra por completo toda esta habitación haciéndome sentir un calor tal que me hace dar vueltas en la cama y despertar. 《Joder, ¿Por qué he olvidado cerrar las cortinas?》 Me reclamo, pero todos mis reclamos desaparecen al verle a ella acostada boca abajo completamente desnuda a mi lado.Sonrió como un tonto al ver la manera tan tímida en que la sabana cubre sus caderas y me pierdo en las curvas de sus pechos rozando con el colchón, es bella por donde se le mire, incluso con su cabello revuelto a causa de haberse ido a dormir sin secárselo. Pienso por un momento en todo lo que hemos vivido juntos en estos meses, en la manera que nos hemos amado anoche en aquella bañera y en el futuro que nos espera a pesar de lo que hemos sufrido con la pérdida del bebé.Inevitablemente me acerco a ella y rozo su piel con mis dedos
Sesiones de fotos, entrevistas con diferentes medios de comunicación, y conversar con otros empresarios acerca de negocios, así podría resumirse mi día. Decir que estoy agotado es poco y mi prometida no se queda atrás, la observo mientras vamos abandonando el ultimo recinto donde me han entrevistado y no puedo dejar de pensar como es que ha aguantado todo el día con esos tacones tan altos, me acerco a ella lentamente y le sonrió mientras ella acomoda su Tablet en su bolso.—Es admirable que puedas caminar todo el día con esos zapatos. — Bromeo y me mira sonriente.A nuestro alrededor aun hay mucha gente y aunque no queramos, nos toca disimular, al fin de cuentas aun lo nuestro sigue siendo un secreto por ahora —No es tan difícil como crees. — Rebate con picardía ya después de haber terminado de arreglar su bolso y comenzando a caminar hacia la salida del lugar.&nb
Nuestra boda es inusual y por supuesto escoger el vestido de novia tampoco podía ser algo muy tradicional. Usualmente la novia va con su madre a una casa de vestido de novias muchísimos meses antes de la boda y se emocionan al pensar en el gran día y en lo hermosa que ser verá y todo eso, pero este no es el caso. En esta ocasión, soy yo quien está sentado en un pequeño sofá de la sala de espera de este local de vestidos de fiesta y novias esperando a que ella salga a enseñarme el primer modelo que escogió.No sé muy bien cuantos minutos han pasado, pero veo como la puerta del probador se abre dejándome ver su escultura figura envuelta en un vestido sin tirantes ajustado a su cuerpo con una leve cola de tela de encaje que deja entrever sus kilométricas piernas. —¡Guau!— Digo leva