Belinda Siento el dolor más inmenso que he sentido en mi vida. Mi respiración está agitada y mi abdomen me duele.Me aferré a la mano de Fernando la cual está entrelazada con la mía.—Mi amor tú puedes hacerlo.Cuándo voltee la vista me percaté de que también Emiliano se encuentra aquí acompañado de mi partera y algunas enfermeras quienes la asisten.—Vamos Bell —Me anima EmilianoEjerzo presión en la mano de Fer y comienzo a pujar con todas mis fuerzas, llevo más de media hora intentándolo sin obtener resultados.Mi presión se subió a las nubes cuando escuche ese disparo, pero gracias a Diosito mi esposo no resultó herido sino Tamara quien recibió un disparo en el pecho el cual fue mortal.De hecho dos policías están esperando a Fer para que de su declaración de los hechos, pero él les aclaro que no se perdería el nacimiento de sus hijos.Salí de mis pensamientos cuando escuche un llanto. En ese instante observe que la partera tomó entre sus brazos a un bebé pequeño y se lo entrego a
Cuando reaccione me percaté de que me encuentro en una habitación pequeña con las paredes de un color gris. Todo el lugar me resulta extraño.Intente moverme, pero no pude hacerlo porque mis muñecas están esposadas en la cama al igual que mis tobillos —¡Ayuda! ¡Por favor! —Grite con todas mis fuerzas—Nadie te escuchará — Ríe un hombre quien sale rumbo del cuarto de baño.Cuando escuche su voz tenía sospechas, pero al mirar su rostro confirmó su identidad.Solloce con fuerza al mirarlo y él simplemente ríe a carcajadas.—¡No! ¡Esto no puede estar pasando!.—Tranquila, chiquita —Diego se acerca a mí llevando sus manos a mis mejillas—Te aseguré que muy pronto volvería por ti—¿Cómo?.—Eres muy ingenua, Belinda. En este país el dinero compra todo. No tienes una idea cuanto disfrute matar al perro de Mario porque el asesino a nuestra beba y comprar a los forenses que lo identificaron fue pan comido. —Él lleva su mano a mi cuello —Durante estos meses te he observado todo el tiempo.—Algo e
Me encuentro en los brazos de Fernando. Él no deja de besar mi frente mientras me estrecha entre sus brazos.—No tienes que ir, princesita.Asentí—Yo quiero ir.Nos acaban de informar que darán la sentencia del caso de Diego. Luego de esperar varios meses a que evaluarán el caso por fin llegó el anhelado momento.Luchamos incansablemente para que no lo declaren inimputable debido a que por el ataque de los Pitbulls perdió parte de la pierna izquierda y la derecha además de sus extremidades. Esos animales me hicieron justicia porque no podrá volver a violar y mucho menos caminar.Su abogado luchó para que le dén prisión domiciliaria y también alego que él no es una persona estable debido a los traumas que sufrió por la pérdida de su madre.***Me encuentro en el juicio junto con las demás personas a las cuales él lastimó y deseamos que pague.Fernando rodea mi cintura y deja un beso en mi mejilla.A medida que transcurrieron los minutos no logré quitar la mirada del hombre que arruinó m
Antes del día de hoy sentía que mi vida no tenia sentido, creía que si desapareciera de este mundo nadie lo notaría porque nadie me quería y a nadie le importaba, pero mi mundo entero acaba de cobrar sentido.Ahora tengo una razón muy poderosa para continuar luchando y salir adelante. Ahora un ser ha llegado a mi vida como si se tratara de una luz en la más profunda de las oscuridades. Ya no estoy sola ni nunca lo estaré porque yo lo tengo a él y él me tiene a mí.Lo arrolle entre mis brazos cuidadosamente. Es tan pequeño y frágil que temo romperlo, es demasiado perfecto para este mundo. Crecí con una enorme ausencia y un profundo dolor en mi corazón, mis padres fueron arrebatados de mi lado antes de mi séptimo cumpleaños, uno de ellos por la muerte y otro por decisión propia, él decidió no formar parte de mi vida.Sufrí demasiado para una vida, el abandono de tus padres y preguntarte todos los días que hiciste mal, porque motivo te negaron su protección y cobijo, el amor que te co
Mi abuela trabaja para las empresas Valencia desde que tengo uso de razón. Crecí rodeada de telas y costuras. De hecho, mi principal sueño desde que soy una niña es convertirme en una prestigiosa diseñadora de modas, pero la vida tenía planes diferentes para mí. Desde muy joven aprendí a aprovechar cada oportunidad que me diera la vida. Por eso cuando mi abuela me informo que uno de sus jefes patrocinaría mis estudios no dude en tomar la oportunidad. El señor Aníbal Valencia, le tenía mucho cariño a mi abuela porque ella trabajo varios años en la empresa. Desde un inicio fui sometida a constantes humillaciones de parte de mis compañeros de colegio porque era evidente que no pertenecía a su mismo círculo social. Sin embargo, no me importó, yo estaba concentrada en estudiar y sacar a mi abuela de trabajar. Hubiera deseado nunca desviarme de mis objetivos, pero lo hice. Tuve la desdicha de cruzarme en el camino de los primos Valencia, los herederos de la empresa número uno en el secto
Hoy es mi primer día como asistente personal de Diego Valencia. Hoy es el inició de la pesada en la cual se convertirá mi vida. Durante varios años trabaje de costurera para costearme la universidad. Desde muy pequeña presencié el trabajo de mi abuela y mi madre por lo cual conozco cada parte del procedimiento de confesión y venta de las telas. Intente buscar un puesto que tenga relación con mi carrera en varias empresas, pero ellos buscaban a mujeres con experiencia. Por ello agradezco la oportunidad que me otorga el señor Aníbal sé que más que nada lo hace para darle una lección a su hijo, pero para mí significa mucho. Significa la oposición de recuperar a mi hijo y darle la vida que merece. Diego se ha acostado con varias de sus secretarias y ha causado muchos problemas; principalmente, con Mariana quién es su prometida y la hija de uno de los principales socios de la empresa. Supongo que con aquellas circunstancias tiene relación mi contratación porque no es un secreto para nadi
Recogí el pedido del suelo e intente salvarlo, pero ya no tiene sentido porque la comida se echó a perder y no tengo dinero ni tiempo para comprar otro almuerzo. Estoy segura de que Diego se enfadara muchísimo. —No te vi, Bell.. — Se disculpa él —Ya no diga nada, licenciado— Le suplico sin siquiera sin mirarlo, estoy haciendo un gran esfuerzo para no gritarle todo lo que merece. Nunca pensé volver a verlo después de lo ocurrido y que tuviera el cinismo de dirigirme la palabra como si no hubiera ocurrido nada. Es el rey de la falsedad. —Su primo se enojará conmigo por su culpa y me correrá. —Le recrimino enfadada —Diego no te despedirá por un almuerzo dile que es mi culpa y yo le ordenó a uno de los empleados que.... Negué con la cabeza sin permitirle continuar. No quiero escuchar ninguna de sus mentiras. Estoy haciendo un esfuerzo sobrehumano para contenerme y no escupir mi odio. —Yo lo arreglo. —Le respondo inexpresiva —No sabía que trabajabas en esta área. Será hermoso ver t
Han transcurrido dos semanas desde que soy la asistente de Diego. Cada día con él se ha convertido en un nuevo martirio. Solo finge cuando su padre está cerca, pero sé que me desprecia. No ha dejado de repetirme que únicamente le inspiró asco, son las palabras que utilizó mi padre antes de marcharse, me duele, me quema el escucharlas. Al parecer es mi destino tener el desprecio de los hombres, pero no me importa. El único hombre que me interesa es mi hijo, nadie más. Estoy reunida con Cielo y otra secretaria, una mujer mayor quien fue amiga de mi abuela cuando ella trabajo en la empresa. Estamos almorzando en la cafetería ubicada en frente de la empresa —Es una pena que María no pudo almorzar con nosotras. La señora Mariana la tiene harta con los preparativos de la boda. —María es la secretaria de Fernando —Les recordé —Si, pero ayuda a Mariana porque su secretaria es una inútil. Esa tipa únicamente se dedica a enseñarle las piernas a los licenciados, principalmente, a Diego. No