19. Primera cita.Mientras conducía a la empresa para recoger a Dylan, me llamó Kit y puse el teléfono en altavoz.-Amigo de mi alma, mi hermoso Frank.-¿Tan temprano estás ebrio?-No, muero del aburrimiento. Maya y yo estamos jugando Contra, pero ya llevamos toda la mañana jugándolo. Ven y sácanos de nuestra miseria.-No sé si pueda…-¿Ya tenías planes?-En rato te llamo, espera.Llegué y me bajé, busqué a Dylan, le hice señas con mis manos. Sonrió y corrió hacia mí.-Pasemos primero por tu casa, para que te pongas algo más cómodo. –Comenté.-Sí, eso te iba a decir, también hay que pasar por tu apartamento.-Tú conoces a maya, una amiga que vive conmigo, ¿verdad? –Pregunté y asintió.-Sí, ella me agregó hace un tiempo y me dijo que era tu mejor amiga. Es súper divertida.-Bueno, me llamó mi otro amigo con el que vivo y me dijo que están aburridos,¿te molesta si salen con nosotros? Porque si no quieres, les digo que no.-No, está bien, ¡genial! Quería conocerla igual.-Oye niño tonto
20. Una buena noche.Entramos a un hotel que estaba cerca, nos dieron una habitación en el tercer piso y a la fuerza, arrastré a Dylan hasta la habitación, porque quería quedarse a dormir en el lobby y no lo iba a dejar. La habitación era muy grande. Era blanca y tenía una gran ventana en el fondo con cortinas verdes. Había una televisión, una pequeña nevera, una cama doble, muebles y un baño. Hacía un frío del demonio.Lo ayudé a sentarse en la cama y le di una botella de agua que pedí abajo. La bebió toda y me miró.-¿No vas a aprovecharte de mí?-Nunca lo haría Dylan.-Pero quiero que lo hagas… -Reí, Dylan es peor de lo que pensaba.-Iré al baño un momento, no tardo. No hagas ninguna locura.-Como digas jefecito.Tardé unos cinco minutos y al salir, lo vi dormido bocarriba en la cama, su cabello despeinado caía sobre su frente. Me acerqué a él, le quité los zapatos y apagué las luces. Le escribí a maya y a Kit el mismo mensaje, les avisé que me quedaba aquí y que los veía en la mañ
21. Resacas amargasTenía a un castaño adolorido y dormido en mi hombro, Kit estaba del otro lado y me enseñaba fotos obscenas en su teléfono y maya estaba adelante, nos miraba sonriente a Dylan y a mí. Íbamos de regreso en el taxi, me reuní con ellos afuera del hotel después de llamarlos. Maya pasó la noche con la desconocida y Kit no sé qué clase de porquerías hizo, porque me ha hablado de muchas personas y no logro, ni quiero entender.-Te va a dar sífilis. –Sentencié y el me fulminó con la mirada.-¿Sífilis? Le saldría barato un sífilis, a él le dará sida y luego le dará gangrena en la poronga y se le caerá antes de los cuarenta. –Dijo maya, reí con ganas al escucharla y Kit estaba ofendido.-¡No me dará nada! Ustedes los mojigatos solo piensan en enfermedades, riesgos y estupideces así, por eso no disfrutan la vida. Tú, niñata, como acontecimiento extraño tuviste acción por una noche, después de mucho tiempo y el imbécil que tengo al lado, durmió con su novio en un jodido hotel y
22. Un buen día.Transcurrieron poco más de tres semanas. Esta mañana de lunes me sentía de buen ánimo, no sé hace cuánto no me sentía así de bien así que pensé, hoy es un buen día para fastidiar, para hacer enojar a la gente, no sé cuánto me place irritar a alguien, es fascinante. No fui a la oficina porque quedé en acompañar temprano a Leo y a Mary a ver unos nuevos ejemplares que compró mi padre para el hipódromo de la familia. Me imagino que, habrá pedido unos caballos de la realeza, de esos que vomitan arcoíris y que tienen más modales que un ejército junto.Esperaba a Leo en su habitación quién llevaba un siglo vistiéndose en el baño. Me desplomé sobre su cama y recibí un mensaje del castaño.-¿Por qué no viniste hoy? Me hubieras avisado, te había preparado tu desayuno favorito. -09:15am.-Lo siento, estoy con Leo y mi hermana. Pasaré a buscarte a las cinco para llevarte a clases.Estas dos semanas han sido muy divertidas. Salir con el enano era extraño, es como estar con un beb
23. Noches incómodas.Salimos muertos de risa del centro comercial. No sé si alguna vez viví un momento tan bochornoso como ese, jamás me habían descubierto en algo tan íntimo, esto solo me sucedió una vez antes y fue precisamente con el mismo individuo en mi oficina…Nos subimos en el auto, lo había dejado en el parqueadero de abajo. Lo encendí, pero no nos fuimos de inmediato.-¿Qué quieres hacer ahora?- Pregunté.-Podríamos haber regresado a la sala de cine…-Sería vergonzoso, no sé si alguien nos vio.-Nadie nos vio Frank.- Me dio la mano y sonrió.-No quisiera dejarte con ganas. –Solté su mano y la puse en su pierna, acariciándola. Sé que entendió mis intenciones porque me miró sonriendo, pero la alejó.-No hay afán, hay tiempo para eso. Quiero que nuestra primera vez sea especial.-¿Estás seguro de eso? –Pregunté.-Sí. Ahora podríamos ir a beber. –Agradecí mentalmente que no quisiera… continuar, al menos no hoy. No estoy seguro si estoy listo para avanzar, he tenido sexo mil vec
24. Sus celos llevan a cosas.El domingo me levanté temprano porque se escuchó un fuerte sonido de un rayo que casi hace que me haga encima, la habitación estaba fría y oscura porque llovía fuertísimo afuera. Me senté en la cama tratando de abrir los ojos y miré mi teléfono. Sí, como lo pensé. Tenía varias llamadas perdidas de anoche de Dylan y varios mensajes.-Pensé que regresarías, que no me dejarías solo. –Domingo 00:50 am.-Aún puedes volver. -01:32 am.-O puedo ir yo a verte si quieres, si estás molesto conmigo. -02:11am.-No puedo dormir y es tu culpa, te dije que no dormiría si estabas molesto conmigo. Me siento como la mierda. -04:46 am.-Omite la palabra fea que usé, intenté borrar el mensaje pero se había enviado. No debo hablarte mal, no quiero perderte. -04:48 am.-¿Pudiste dormir? Yo no. Debo verte o no podré estar bien, sabes cuánto te necesito Frank. Salgo en diez minutos. – 07:52am.Me puse de pie y miré la hora, aún no eran las ocho, me acababa de enviar ese mensaje.
25. Mi novio.Desperté a las diez que sonó mi teléfono, era lunes feriado y vi al castaño durmiendo bocabajo a mi lado. Observé su desnudez y suspiré, cómo me gustas Dylan. Acaricié su espalda y dejé besos en ella, vi que él se movió un poco y se erizó. Escuché su risa, entonces me acerqué, lo abracé y le di besos en su cuello, haciéndolo reír aún más.-Quisiera despertar siempre así. –Admitió.-¿Conmigo acosándote mientras duermes?-No Frank, quisiera despertar así de feliz.-Dylan, ¿tú siempre estás triste? –Le pregunté preocupado, a él siempre se le salen comentarios similares.-Algo. –Confesó. –Me siento muy solo desde lo de mis padres, he dejado un poco de sentirme así ahora que salgo contigo.-Pero estuviste con alguien antes, ¿no te sentías menos solo con él también?-Frank, yo salí con Julián cuando llevaba tres meses enamorado de ti. Duramos algunos meses andando, pero no funcionó, no pude olvidarte y creo que ese fue uno de los peores momentos de mi vida, recuerdo que llorab
26. Convivencia.-Dos años después. –Me desplomé sobre la cama totalmente agotado. Esta tarde estuve jugando fútbol con los empleados de la empresa. Llevaba mucho sin jugar, por eso apesté en el primer partido pero en los demás me ha ido mejor, aunque no hoy, pero no fui el peor, el más vergonzoso sin duda fue “el demonio”, juan José, de la parte administrativa. Le decíamos así porque era muy malo jugando, por eso siempre lo aventábamos como pelota, de equipo en equipo porque hacía perder hasta a los mejores. Dylan no jugaba, no le gustaban los deportes.Hace mucho empecé a hacerme cercano con los compañeros de la empresa, jugaba futbol con ellos los domingos y de vez en cuando hacíamos integraciones. Por supuesto, sabían de mi relación con Dylan y la sorpresa para mi es que no lo tomaron mal, ellos pensaban que andábamos desde mucho antes de que sucediera en realidad, todo por la tonta de Gina, quién ahora mismo está en licencia de maternidad. Mis padres aún no lo saben y espero que