Hacía un momento, Sharon le había pedido de manera informal a Simon que bailaran sólo por la cortesía. Ella no esperaba que él pudiera estar de acuerdo con esta invitación.

Quién iba a saber que ella, que había tomado la iniciativa de invitarlo, se volvería totalmente atraída por él; ella estaba siendo guiada a todo rato por los pasos de Simon en la pista de baile.

Sin que ella se diera cuenta, el hombre que tenía enfrente era todo lo que ella veía en sus ojos. Bajo las brillantes luces de cristal, los impresionantes rasgos faciales del hombre lo hacían lucir aún más guapo.

Era como si sus ojos hermosos tuvieran poderes mágicos que la estaban atrayendo hacia él.

Acompañados de la última nota musical, ellos completaron su último paso. Los brazos de él la rodearon y ella terminó estando en su abrazo. Ella levantó la cabeza y lo miró a los ojos. En esa fracción de segundo, la hicieron olvidar todo.

Solo cuando Sharon oyó los aplausos a su alrededor, despertó de su imaginación. Luego, ella escapó con nerviosismo de su abrazo.

Ella bajó la cabeza. "Voy a buscar algo para tomar". Ella salió de la pista de baile apresuradamente.

Simon miró a la mujer que parecía estar huyendo y sus delgados labios se curvaron hacia arriba. '¿Esa mujer... está tímida?'.

Finalmente, Sharon llegó al lugar donde se habían colocado las bebidas. Sin embargo, justo cuando estaba a punto de dejar escapar un suspiro de alivio, alguien la agarró de la mano.

De repente, esa persona la jaló con fuerza hacia fuera.

"¿Howard? ¿Qué estás haciendo?". Sharon estaba asombrada por su repentina aparición. '¿Qué planea hacerme con esa actitud tan agresiva?'.

Howard no dijo nada. La agarró por la muñeca y la arrastró fuera del salón de baile. Por fin, ellos llegaron a un pasillo exterior.

Sharon usó toda la fuerza que le quedaba para liberarse de él. Ella dijo de manera defensiva: "¿Adónde me llevas?".

Howard se dio la vuelta y la miró con frialdad. Él gritó: "¡Sharon, lárgate de inmediato! ¡No pienses en arruinar el banquete mío y de Sally!".

Sharon sonrió levemente cuando vio lo enfurecido que estaba. "¿Qué pasa? ¿Estás asustado?".

Ella lo miró con frialdad. Hacía cinco años, el mismo día, ella era la persona que más sufría. ¡Él se casó con Sally mientras ella tuvo que soportar la desesperación de la traición!

Ella incluso había pensado que Howard quizás la había amado alguna vez.

'¿Cómo pudo ser tan cruel conmigo?'.

Howard levantó las cejas y gritó. "¿Asustado? ¿Yo? Oh cierto, estoy asustado de que todos sepan que eres mi ex novia. ¡Me deshonrarás la vida!".

A pesar de que ella lo había olvidado, escuchar la acusación injusta todavía la haría más daños.

Ella se burló y dijo a propósito: "Sí, otros hombres no les dirían a otros que habían sido engañados por las mujeres".

Howard recordó las fotos durante su matrimonio. Sus ojos comenzaron a arder de rabia. De repente se acercó a ella y la agarró por los hombros. "Sharon, estás haciendo esto a propósito, ¿verdad?".

Sharon sintió dolor porque él estaba poniendo fuerza sobre sus hombros. Sin embargo, lo soportó e incluso levantó la barbilla para mirarlo. Ella dejó escapar una ironía fría. "Si quieres tomártelo de esa manera, que así sea. Después de todo, Simon es mucho más carismático y guapo que tú. Lo más importante es que él es el jefe de la familia Zachary mientras que tú no eres nada".

"¡Cállate!". Howard estaba tan enojado con ella que su rostro estaba lleno de rabia. Él levantó la mano e intentó abofetearla.

Sin embargo, Sharon rápidamente lo agarró por la muñeca y lo miró con frialdad. Ella se burló. “¿Estás pensando en pegarme de nuevo? Howard Zachary, tienes que meter esto en tu c*lo, ¡ya no soy la Sharon de hace cinco años que estaba loca de amor por ti!". Ella le apartó la mano después de decir eso.

Las pupilas de Howard se encogieron y dejó escapar una expresión extraña a pesar de que estaba exasperado. "¿Loca de amor? Jajaja, qué broma. Sharon, me engañaste hace cinco años. Si no, ¿cómo es posible que diste a luz a un niño bastardo?".

Él todavía recordaba haber visto a ese niño en el hospital. 'Su hijo ya es tan grande. ¡Es tan obvio que ella me engañó!'.

Sharon puso una expresión exasperada. "¿Qué dijiste? ¡Te mat*ré si te atreves a decirlo de nuevo!".

"¿Dije algo malo? ¿No fuiste tú quien sedujo a otro hombre y dio a luz a un niño bastardo?".

¡Pum!

Howard acababa de terminar de hablar cuando fue golpeado por la fuerte bofetada de Sharon.

Sharon estaba disgustada mientras lo miraba. "¡Puedes difamarme a mí, pero no puedes ofender a mi hijo!".

Su cuerpo tembló levemente. Nadie sabía cuánto sufrimiento ella había tenido que soportar durante los últimos años. Ella tuvo que criar a su hijo sola, y todo fue por la culpa de él y de Sally.

¿Cómo podía tolerar que Howard humillara a su hijo de esa manera?

La bofetada de Sharon dejó a Howard estupefacto y la miró con expresión sorprendida. A él le resultaba difícil de creer.

Sharon no quería discutir con él. Por lo tanto, se dio la vuelta y comenzó a dar grandes pasos mientras regresaba.

Howard gritó: "¡No te atrevas a poner ni un paso en el salón de baile!".

Los pasos de Sharon se detuvieron. Ella se dio la vuelta y reveló una sonrisa peligrosa. "Soy la pareja de tu tío. Si no aparezco, él comenzará a preocuparse". Después de decir eso, ella no volvió a mirar a Howard. En cambio, continuó caminando en línea recta sin una sola preocupación.

Sally había presenciado todo el incidente desde una esquina. Apretó el puño porque no esperaba que la Sharon de ahora fuera tan arrogante.

'¿Ella está pensando en conseguir el apoyo de Simon? ¡Ni en sus mejores sueños!'.

Sharon regresó al salón de baile, pero Simon no estaba a la vista. Ella lo buscó por todas partes, pero no pudo encontrarlo. '¿Quizás surgió algo y él tuvo que irse por el momento?'.

Ella tomó una copa de vino y lo bebió a seco.

De repente, Sally subió al escenario. Luego, con el micrófono, se dirigió a las personas presentes: "Todos, estoy muy feliz de ver que se han presentado para mostrarnos su apoyo. Me gustaría jugar un juego, pero necesito la cooperación de todos".

Sally buscó entre la multitud y finalmente posó su mirada en Sharon. Una sonrisa fría se vio en sus ojos: "Oye mujer, ¿podrías subir al escenario?".

En esa fracción de segundo, todos se giraron para mirar a Sharon.

Sharon se sorprendió y miró a Sally en el escenario. Por instinto ella sintió que Sally tenía malas intenciones.

'Tendré que bloquear cada ataque con todo lo que tengo. Veamos qué está tramando Sally'.

Con todos mirando a Sharon, ella subió al escenario con la cabeza en alto.

Simon, que salió a contestar una llamada, regresó y casualmente vio a Sharon subiendo al escenario. Él se detuvo y no continuó caminando hacia adelante.