"Doctora Leif, venga a echar un vistazo al Joven Amo. Ha vuelto a vomitar sangre", le dijo uno de los hombres de Dayton al verla. Yvonne se acercó a Dayton y vio la sangre que este había escupido en el suelo. Ya no se inmutó. "Deberían aprender a acostumbrarse a algo así. Después de todo, ocurrirá con frecuencia en el futuro". Los hombres de Dayton se quedaron atónitos. ¿Qué significaba eso? ¿El Joven Amo vomitaría sangre con frecuencia en el futuro? Dayton se apoyó en el sofá que tenía detrás y cerró los ojos. Ya no tenía energía para hablar. Yvonne no quería reprenderlo después de ver su estado actual. Ella sabía claramente que él se había rendido hacía mucho tiempo. Simplemente estaba esperando su propia muerte. Por lo tanto, ella no tenía prisa para llevar a cabo el tratamiento de acupuntura en él. Brum, brum, brum... Un fuerte sonido sonó desde el exterior. Dayton abrió los ojos inmediatamente. Sonaba como si un avión hubiera sobrevolado... Les dijo de inmedi
Quincy lanzó su fría mirada en esa dirección. Después de un rato, dijo: "Vamos". Terry no sabía lo que ella estaba mirando, solo notó la expresión desagradable que tenía en el rostro. La siguió y preguntó: "Señorita, ¿dónde está ese bastardo, Dayton Night? ¿Debo capturarlo personalmente?". Él no creía que ella dejara ir a Dayton. Quincy no dejó de caminar. "Está bien. Sé cómo lidiar con él". Había un toque de brutalidad en la fría voz de la mujer. Terry estaba ligeramente aturdido. Parecía haber entendido algo. Dejó de hablarle después de eso. El helicóptero los esperaba fuera. Quincy y Terry subieron al helicóptero.Debajo de ellos, la isla estaba hecha un desastre. Ya no había nadie que pudiera impedir que se fuera."Señorita, ¿volvemos ahora?", preguntó Terry.Quincy echó un vistazo a la situación de abajo y lo miró. Había una expresión excepcionalmente tranquila en su rostro. "Has traído muchos explosivos, ¿verdad?".Terry asintió y dijo: "Traje algunos, pero no hay
Dayton tenía una cara de pocos amigos en su rostro mientras observaba la isla con una mirada sombría. Apretó los labios. No tenía intención de decir nada.No quería abandonar la isla. Yvonne y sus hombres fueron los que lo sacaron a la fuerza."Hubiera preferido quedarme en la isla", dijo Dayton después de un rato.Yvonne lo miró sorprendida. Después de unos segundos, estalló en una risa burlona. "Te gustaría que ella te hubiera matado en ese bombardeo, ¿verdad? Sería mejor que morir después de pasar por todo el tormento de tu enfermedad, ¿verdad?".Tras un silencio momentáneo, él dijo: "Se lo debo a ella".De todos modos, no podría vivir mucho tiempo. Debería cumplir los deseos de Quincy y dejar que ella acabara con su vida personalmente.No tendría ningún remordimiento si moría por su mano.Yvonne no pudo evitar abofetearse a sí misma. Luego se reprendió a sí misma en voz alta: "¿Por qué soy tan entrometida? ¿Por qué me empeño en salvarte cuando tienes tantas ganas de morir? ¡
Quincy seguía sumida en sus pensamientos cuando su secretaria la llamó a través de la línea telefónica interna y le dijo que una mujer llamada Yvonne Leif estaba allí para verla. Ella frunció el ceño. ¿Yvonne Leif? Después de pensarlo un rato, finalmente recordó. ¿No era Yvonne Leif la mujer que estaba al lado de Dayton? ¿Por qué la buscaba en ese momento? Si ella no había muerto, entonces Dayton Night... El corazón de Quincy dio un vuelco. Le pidió a su secretaria que la llevara a su oficina de inmediato. Al cabo de un rato, su secretaria hizo entrar a Yvonne en el despacho. Desde el momento en que Yvonne apareció en su despacho, Quincy no dejó de mirarla. Tenía una sombra. No era un fantasma ni un espíritu... Yvonne estaba perfectamente bien de pies a cabeza. No parecía herida en absoluto. ¿Se las arregló para evitar el bombardeo en la isla? Yvonne llevaba unas gafas de sol y sostenía una caja. Llevaba su bolso en la muñeca. Al cabo de un rato, se situó fre
"He completado todas sus peticiones finales. Eso es todo". Yvonne le echó una última mirada a Quincy, quien estaba conmocionada, y salió de la oficina. Quincy no dijo nada para que se quedara. Solo se quedó mirando la caja de cenizas. Continuó haciendo esto en silencio durante un período de tiempo extremadamente largo. Terry le preguntó: "Señorita, ¿cree que éstas son las cenizas de Dayton Night?". Ella se volteó para mirar a Terry. Para ser sincera, no lo creía realmente. "¿Por qué no mira primero los activos que él le transfirió y ve si son reales?", sugirió Terry. "Ayúdame a resolver esto". Le entregó la gruesa pila de documentos para que los verificara. "Iré ahora". Terry salió del despacho de inmediato. Quincy se quedó mirando la caja de cenizas y murmuró en voz baja: "Dayton Night, ¿qué intentas hacer esta vez?". Se sorprendió cuando Terry le dijo que Dayton le había transferido realmente todos sus activos y su dinero después de verificar los documentos.
"Esto es absolutamente vergonzoso y repugnante...".La boda que se suponía que iba a ser romántica resultó ser un desastre.Bajo los murmullos de todos, Sharon levantó la cabeza para mirar la pantalla gigante. Se mostraban algunas imágenes desnudas de ella.¡El personaje femenino en la pantalla era ella, pero el hombre en la cama con ella no era el novio, Howard Zachary!En ese momento, Sharon se quedó sorprendida. '¿Qué es esto? ¿Por qué están mostrando una imagen así?'.La forma de que se había tomado la foto justamente hizo que se revelara cada ángulo de la cara de la mujer mientras que solo se podía ver la espalda y el costado del hombre.¡Ella juraba que no sabía quién era ese hombre!Por instinto, Sharon miró a Howard. Howard la miró fijamente. Además, la cara de él se oscureció mientras sus ojos comenzaban a brillar de rabia."¡P*rra! ¡Cómo te atreves a engañarme!".Sin esperar a que ella respondiera, Howard le dio una fuerte bofetada.Sharon fue abofeteada y terminó c
Cinco años después.La terminal del aeropuerto acababa de anunciar la llegada del avión. En poco tiempo, un grupo de pasajeros salió del control de seguridad."Mamá, hace calor. Quiero comer helado". La voz tierna de un niño se escuchó cuando se veía a Sebastian Jeans tomaba la mano de su madre. Él estaba parpadeando con sus ojos grandes y bonitos.Sharon miró a su hijo con mucho cariño. Su expresión linda la hizo ceder a pesar de que sabía que no debería comer tanta comida fría."Solo puedes comprarte uno". Ella sacó un billete de su billetera y le dijo: "Vuelve ya después de comprarlo. Te esperaré aquí mismo". Sharon estaba arrastrando el equipaje."¡Entendido! ¡Mi querida madre!". Sebastian le dio a su madre un beso volador antes de comenzar a correr mientras sostenía el billete en su mano con fuerza.Sharon ni siquiera había podido decirle que se tomara su tiempo. En ese momento, sonó su teléfono."¿Hola? ¿Riley? Sí, ya he regresado... está bien, tomaré un taxi para allá aho
Simon Zachary tenía una expresión tranquila. "Bueno, déjalo. Pero como madre, siempre tienes que estar atenta de tu propio hijo"."Así es, la ropa que usa el Presidente Zachary está hecha a medida, ¿crees que serás capaz de comprarle uno igual?". El asistente del hombre, Franky Zimmer, estaba de pie detrás de su jefe mientras regañaba en voz baja. Hacía un rato, justamente fue él quien había gritado hacia el niño.Él miró a Sharon. '¡Ella es tan atrevida! ¡Ninguna mujer se había acercado tanto al Presidente Zachary!'."¡Sólo son unos pantalones normales! Tengo dinero para compensarte". Sebastian, quien estaba siendo abrazado por su madre, habló con orgullo. Él no podía permitir el hecho de que su madre soportara la humillación cuando fue él quien había causado el problema.Simon posó su mirada en el niño. Frunció el ceño cuando descubrió que el niño se parecía tanto a él.Franky se burló. "Oye mocoso, ¿cómo lo compensarás?".Sebastian sacó su hucha que estaba en su pequeña mochil