Mia.
No pensé que Erior se libraría de mí con esas excusas baratas. Bueno en realidad nunca pensé que llegaríamos a algo y tampoco es que lo dejara hablar pero ya esa farsa y el teatro de "todo fue un error" no me cae en gracia.
Todos los amigos de papá dijeron lo mismo cuando la policía los agarro, alegaron que yo decía mentiras y que estaban cometiendo un grave error al inculparlos con un hombre que vendía pornografía infantil a pedófilos. Pero ya está, ya fue y no quería que los recuerdos volvieran de esta manera.
Tomo asiento a mitad del patio trasero, donde hay grama y flores de colores muy llamativas y bonitas.
La psic&oac
Erior."¡Has algo! ¡No te quedes parado viendo como se destruye Mia!"Fueron palabras fuertes para provenir de Mark quien siempre se toma las cosas como un juego, a excepción de su relación con Sully eso si lo toma serio si no quiere que le corte los huevos.Mia observa por la ventana el local repleto de personas y se enmudece, no quiere entrar y no la voy a obligar. Aunque, es mejor si no ganamos más atención de la que se debe siendo un profesor y ella, una alumna. Creo que la atraeríamos por completo.—Conozco un lugar menos concurrido y con pasteles muy sabroso, pero está un poco lejos ¿aceptas? —indago mientras espero que el auto frente a nosotros se apresure a quitarse.
Mia.—No puedo creerlo, ni siquiera eres bonita. —La chica pecosa que parece ser prima de Erior y desea que le rompa la nariz sigue hablando mientras arregla la mesa y coloca un jarrón con una rosa dentro.—Tú no te vez buena gente pero estas atendiendo al público, ya ves, que rara la vida.Me mira y sus ojos se tornan rojos, se está enojando mucho. Pero da igual, estuve callada el tiempo suficiente para que se diera cuenta que no es mi culpa estar aquí sino de su sexy primo.—Escucha mosca muerta, Erior tiene novia y se llama Aurora. Tu solo serás la de los tiempos libres para pasar el rato que te quede claro. —Respiro hondo. ¿Deberí
Erior.Subo tan rápido como puedo al auto, Mia lleva al menos unos diez minutos esperando y no quiero que cambie de opinión. Sé de antemano que lo que hago está mal,muy mal...Pero, ¿Cómo no probar un poco de su ser? ¿Cómo puedo negarme cuando lo propone de esa manera tan excitante? la quiero ahora, quiero sus gemidos, su voz gritando mi nombre. Deseo hacerla mía de todas las formas imaginables e inimaginables.— ¿Dónde vamos? —indago en lo que noto que está buscando algo en su teléfono.—No lo sé. —Arruga el entrecejo en clara expresión de enojo— pensé que el apa
Mia.Erior cae de cara a la almohada, está cansado y no es para menos. Hemos tenido unas largas horas de "juegos calientes" y él en definitiva da la talla para todas las travesuras que siempre he pensado sobre nosotros.Nosotros... Suena a algo sumamente ficticio.Suspiro.El teléfono de la casa suena pero no hace más que murmurar que apague la alarma. Rio por esa niñería y me pongo en marcha para responder, no puedo permitir que sea algo grave y él no lo sepa.— ¿Erior? Soy Aurora. Necesito que vengas a recogerme al centro comercial, mi auto se averió y se está haciendo un poco tarde. &mdash
Erior.Más, quiero más.Los gemidos de Mia se reproducen una y otra vez en mi mente. No puedo pararlos, es como si ella en este momento eclipsara todo mi ser. ¿Cómo puede ser capaz de eso? ah, sí, porque nunca antes nadie me había dejado tirado luego de usarme.Y por ello repito a cada instante entre mis pensamientos lo que hicimos, buscando algún error de mi parte. Pensé que lo había disfrutado tanto como yo pero me equivoque porque al despertar no vi más que una nota arrugada que decía que debía buscar a Aurora.Fue el rechazo más directo de toda mi vida. En realidad, es el primer rechazo que recibo en mi vida, resopl
Mia.No puede ser, no él.No quiero que se acerque, no quiero que me toque como antes lo hizo. ¿Por qué la profe Aurora tiene su foto en el teléfono?No quise mencionar que era un pedófilo, pero... No pude contener mis palabras.Me cuesta respirar, los brazos de Erior son cálidos pero de igual forma no apartan ese frío aterrador que sube por mis piernas y culmina en la parte trasera de mi nuca. Él está cerca. Él va a hacerme daño de nuevo.—Mia, necesito que vuelvas aquí. A la realidad, que dejes de vagar en tu mente por un momento para que digas que sucede —escucho la voz
Erior.Mia por fin se ha logrado quedar dormida sobre mi regazo.Sully sirve los platos sobre la pequeña mesa de madera y Mark, termina de acomodar algunos libros sobre un estante bajo el televisor.Mia se ve tan contenta dentro de sus sueños que me da pena despertarla. Ahí debe de estar pasándolo mucho mejor que en el mundo real y no quisiera que llegara a odiarme por algo así.Tocan a la puerta y por reflejo la chica a mi lado camina perezosa hasta ella.— ¡Voy! —dice bostezando. Rasca uno de sus senos seguido de una nalga.— ¿Deberíamo
Mia.Cubro mi cabeza con las mantas de seda color púrpura. Quiero que esta pesadilla acabe lo más pronto posible, pero creo que va a tardar mucho antes de que eso suceda.— "Debes ir al estrado y atestiguar, solo así podremos encerrarlo" —Quise esconderme bajo la cama cuando la detective dijo eso. Es más creo que eso hice y por ello, resoplo y me regalo un dulce de mango que tenía en su bolsillo.— "No puedes huir siempre, debes aceptar que habrán personas buenas y malas en la vida. Solo que tu, debes saber diferenciarlas, quizás en un principio costará pero con unos cuantos consejos podrás cambiar la manera en que miras" —Dijo, haciendo caso omiso a mis lágrimas.