Elisa arrugó el ceño porque eso era sospechoso. —Si hubiera sido una buena mina, se la habría quedado para él —comprendió. —Así es. Pero cuando trató de venderla, el único que estaba disponible para comprar era un asiático, coreano —le contó Kainn—. Y como todo asiático supersticioso decidió confi
Elisa sintió el calor de Kainn cuando se despertó entre sus brazos. A pesar de que sólo hacía unas semanas que había llegado a aquella casa, no podía evitar sentirse inexplicablemente segura y contenta sabiendo que abría los ojos para verlo a él. Lo miró durante un largo momento. Era muy atractivo,
—Sé que no quieres ponerme en peligro, pero voy a acompañarte, eso es asunto decidido. Kainn la abrazó y durante dos días todavía estuvieron ultimando los detalles. Luego el secretario Moe les dio la noticia que esperaban. —Están arreglando un vuelo para irse. Lord Grafton y Lord Brickstow viajará
Tierras. Hablaban de nombres y lugares que solo ellos conocían perfectamente por ser locales. Durante un largo rato estuvieron los dos en aquella negociación, pero finalmente el señor Ba Kaung mandó a uno de sus sirvientes a traer té verde y la entrevista pasó del despacho del regente a la terraza d
—Su nombre es Kha. Estamos aquí por él —le dijo y tomando su mano, se acercó al pequeño que debía tener unos siete años. Estaba sentado junto a un par de rústicas muletas en el portal de una casita muy pobre; y una anciana salió apenas los vio acercarse. —Solo queremos ayudar —le dijo Elisa tendié
Podía sentir su boca. Sobre el calor que manaba de su espalda estaba su boca, delineando cada curva, rozando bajo las sábanas, mordiendo, besando, jugando. Elisa abrazaba la almohada y solo sintió cómo él separaba despacio una de sus piernas para tener acceso. Un segundo después aquella lengua la hi
Por fin, el placer explotó en el interior de Elisa como una tormenta que los recorrió a ambos, y Kainn ahogó cada uno de sus gritos con besos. Un clímax urgente, compartido y delicioso que los hizo caer en la cama como si salieran de una batalla. —Te equivocaste... no serán solo dos días... Kainn
Alton de Brickstow era un completo imbécil, Louis lo sabía. Le gustaba usarlo porque era tan arrogante que resultaba absurdamente fácil de manipular. Solo otro idiota que se creía de sangre azul por derecho, sin entender que la sangre azul se tenía que pagar, el poder se tenía que pagar y si el dine