Morgan
Corrí, corrí, corrí... no sé qué pasó, no sé lo que sentí, solo sé que algo me unía a ese gran lobo que estaba lastimado, pero no iba a perder mi libertad, que estaba a punto de conseguir por algo, una ilusión que tal vez sea peor de mi actual realidad.Cuando pude llegar al otro lado del lugar donde estabamos, pude descubrir con horror que capitán Roger estaba herido, tenía parte de su brazo muy lastimado, además tenía el hombro dislocado, no pude seguir corriendo y dejarlo atrás, él era un amigo, un miembro de la manada me acerqué y traté de ayudarlo, cuando él me vió no lo podía creer, me tomó del brazo llevándome al lugar donde, pude ver con alegría, que muchos de los guerreros estaban ahí, guerreros de mi manada que al verme suspiraron aliviados.
-¿estás bien? pensamos que te habíamos perdido, gracias a la diosa que estás bien Morgan-dijo uno de los guerreros. -¿muchacha qué haces saliendo con una mochila a estas horas? deberías de haberte quedado en la cabaña- dijo otro de los guerreros. -pensaba escapar-les confese-me alegro de que ustedes estén bien, pero por favor déjenme huír, no es vida lo que tengo y tampoco seguiré viviendo si madre logra aparearme con el alfa Magnus, él me matará-les decía a los guerreros entre lágrimas. -tranquila Morgan, en este momento lo que menos importa, ese bastardo debe estar pudriéndose... el alfa Magnus fue asesinado por los cazadores, junto a gran parte de su manada, también y lamento informarte, pero tu madre la luna Sara fue también muerta, fue una de las primeras que cayó junto con el alfa Magnus, tu padre por otra parte, él está en este momento junto al cuerpo de tu madre, nosotros empezamos a buscarte-decía Roger. -¿ella murió?- pregunté sin saber muy bien como sentirme. -sí, ella falleció, fue asesinada por los cazadores además de ella perdimos tres guerreros-dijo Roger-los demás estamos heridos pero sobreviviremos, tenemos que reparar nuestras defensas, porque despues de este ataque seguramente vendrán otros. -¿qué puedo hacer para ayudarles?- pregunté de inmediato. -por favor, ayuda a los que están heridos y quédate con nosotros, por nada del mundo te salgas de nuestro lado, ya no está tu madre, tu padre está imposibilitado de liderar, él jamás lideró nuestra manada siempre fue tu madre, en este momento te necesitamos como líder, tú serás nuestra nueva alfa-dijo Roger. -pero eso no es posible, yo puedo ayudarles pero yo no soy un alfa, ustedes lo tienen muy claro-dije entre lágrimas tratando de sacar sacarme la mochila y llendo a ver cómo poder ayudar con los heridos. -con todo respeto, pero tú eres más alfa que muchos de estos alfas juntos, nosotros te seguiremos Morgan, donde quiera que vayas, te seremos leales, como siempre lo hemos sido, cuidándote, aunque tú no lo creas hemos hecho lo posible para que siempre estuvieras bien, sé que ha sido duro pero ya habrá tiempo para contar más y hablar de lo que ha pasado en nuestra manada. Ahora quédate acá con los guerreros heridos mientras yo voy a organizar los grupos de búsquedas para los cazadores que se escaparón. Fue así como pasé gran parte de la noche, hasta cuando los primeros rayos del sol salierón.Un grupo de avanzada de la manada Dark Moon junto con guerreros de la manada real, llegarón al campamento de abastecimiento allí pudimos ver quiénes eran los caídos, cuántas perdidas habíamos tenido. Afortunadamente no habían sido muchas pero sí fueron grandes en cantidad de liderazgo, fueron alfas, guerreros y por supuesto mi madre, la luna Sara. Transportaríamos a los caídos y herídos a la manada Dark Moon hasta que pudieramos regresar a nuestras manadas a salvo. Aún habían cazadores por los bosques y caminos.
Milca estuvo en todo momento apoyándome y dándome fuerzas para que yo no flaqueara. Termine ayudando a tantos herídos como pude.
Del lobo que había salvado no volví a verlo, rogaba la diosa para que él no pudiera reconocer mi olor, de lo contrario me estaría buscando por toda la manada.
Morgan No sé qué sentir, mi padre prácticamente no habla y no mira a nadie, solo está al lado del cadáver de su compañera, mi madre, los guerreros nos escoltaron y llegamos a la manada Dark Moon, allí nos dieron a cada una de las delegaciones lugares donde dormir, mientras esperábamos que todo se recuperara. Sabíamos que estábamos todos en peligro, hasta la misma luna de la manada Dark Moon había sido secuestrada y atacada, esto era un desastre. Las brujas estaban ayudando, era la primera vez que veía a una bruja de cerca y fue impactante. El rey estaba junto a los demás alfas ayudando a organizar todo. Mi padre no fue llamado, eso dejo a mi manada al margen, cuando el alfa Cael quizo hablar por mi manada ordenar a Roger y los guerreros unirse a él, descubrió la lealtad de todos ellos hacia mí. Esto fue un sock para todos esos alfas presuntuosos. Nos habían traicionado a lo grande, el secuestro de la luna y altaque de los cazadores fue a gran escala, nos salvamos por la organizació
Morgan Santa mierda, ese alfa no puede ser mi compañero, pense mientras lo veía caminar entre los demás guerreros. Era realmente poderoso y muy atractivo.-compañero-dijo Milca, mirando hacia la misma dirección que yo.-no puede ser Milca, él sobre todos los demás, no puede ser, no sé qué es peor, si el alfa Magnus o el alfa Cael, él nos odia-trataba de explicarle a mi loba. Y una vez más oculté mi olor, no deseaba que él me olfateara, corrí hacia la cabaña donde nos encontrábamos a esconderme. A lo lejos pude escuchar que el alfa Cael gritaba, llamando a alguien, me paralicé porque pensé que era yo, cuando giro lo veo parado en medio de la calle, olfateando hacia arriba, buscando algo, mierda me había olfateado, había encontrado mi rastro, solo rogaba para que se esfumara con tantos lobos cerca y perdiera el rastro.-¿por qué no vamos a hablar con él? tal vez sea amable, las apariencias muchas veces engañan Morgan- decía Milca.-no lo entiendes, mi vida siempre ha sido un asco y ese
MorganPor fin pudimos salir de la manada Dark Moon con el cuerpo de madre, mi padre venía con sedantes ya que se volvió loco cuando quisieron tomar el cuerpo de su luna. Me despedí tanto del Rey como del Alfa Ammos, antes de partir el rey me volvió recordar que debía de tomar un compañero o él se haría cargo, no había otra opción, le dije para su calma que ya lo estaba viendo, luego sin más me marche.Roger había conseguido un elixir con las brujas, el cual ocultaba mi olor de mi compañero, por más que él estuviera a mi lado no me reconocería y lo confundiría. Sabiendo que él me había visto esa noche no estaría seguro de que era yo, aunque no lo pudimos comprobar, tenía miedo y aún recordaba lo doloroso que fue verlo y sentirlo con otra loba.Fuimos escoltados hasta nuestra manada, por un grupo de guerreros de elite, el viaje fue tenso, siempre alertas de que los cazadores nos ataquen. La manada Darkness saldría al día siguiente, ya que ellos no quisieron viajar junto a nosotros, co
Morgan Luego de chequear las patrullas de vigilancia y de que instaurar una ley donde todos tendrían que defenderse y entrenar, no fue sorpresa descubrir de que nuestras arcas estaban vacías, estábamos en deuda con otras manadas, teníamos contratos que no habíamos cumplido, habíamos sido demandados por otras manadas, no había suficiente alimento para pasar el invierno, no sé cómo lo hacían mis padres, lo más seguro es que esperaban que mi venta hacia el alfa Magnus, los podría haber ayudado, pero todo se fue al traste. Por lo tanto, teníamos que ingeniarnos y hacer algo de forma inmediata.Busqué dentro de la manada a todas las hembras jóvenes o solteras, las cité a al salon de audiencias de mis padres, ya que era grande, una vez que llegaron todas, algunas muy nerviosas, otras de manera curiosa, les conté mi idea. Lo cual fue muy bien recibida, así es que salieron más que rápido a cumplir sus deberes.Luego me reuní con los ancianos, los más antiguos y a ellos le encomendé la tarea
MorganSeguíamos trabajando duro, la manada continuaba haciendo pequeñas cosas, creando otras nuevas, pudimos adaptar un sistema de electricidad y de agua potable, mejoramos nuestras defensas. Mandé a construir unos refugios en el caso de un futuro ataque, habían muchos cazadores aún, muchos de ellos con mucha sed de venganza.Nosotros estábamos indefensos sabía que la manada Darkness había regresado, junto a su alfa, no tuve contacto con él, podía sentir cada vez que ese alfa se acostaba con alguna hembra porque los dolores se hacían cada vez más intensos, pasaba a cada rato, ese maldito alfa era un mujeriego empedernido.Todos los días sufría uno que otro dolor, luego de tantas veces que ocurría, en el cuerpo del compañero traícionado empiezan a aparecer hematomas, yo tenía mi espalda y gran parte de mi cuerpo lleno de hematomas, debido a la traición y a que nuestro vínculo que estaba siendo afectado, si bien no podía morir, pero sí iba a sufrir una vida de dolores cada vez mas inte
CaelMi lobo estaba inquieto, enojado, no volví olfatearla o sentir el aroma, me quedé un par de días más de lo previsto en la manada del imbécil de Ammos, evitando así regresar con los perdedores de la manada Sunrise y su horrible luna muerta, pero aún así, no la volví a sentir, pero sí aproveché el momento para poder distraerme y distraer mi cuerpo, eran muchas las lobas que le gustaría ser mi luna, por lo tanto las hembras nunca me faltaron. Cuando llegué a mi manada, pude comprobar que todo estaba bien. Sax mi gama había hecho todo lo correcto.Fred venía en silencio, algo le pasaba a mi beta y no me lo quería decir, había estado por lo más extraño desde que estuvimos e la manada Dark Moon, su siempre buen caracter se habia ido lejos, contestaba mal y sobre todo estaba muy alterado. Sabia que cuando quisiera me lo diría por ello no lo presione.Estaba tan cansado, entre el viaje y las actualizaciones que Remo me pedía que no tuve mucho tiempo para descansar, por lo que me tomaría
CaelLuego de retrasar lo que más pude esta reunion, decidí que, de una vez por todas deberíamos de terminar con el problema del límite con la inutil y moribunda manada Sunrise. Por fin conocería la famosa beta, hija de los intúles alfa loco y la malvada luna Sara. Quizas mi hermano me amenazo con venir por una temporada a mi manada si no accedía a reunirme con ellos, algo que no me gustaba.Ordené a Fred que organizara el encuentro, pude notar que mi beta estaba un poco nervioso cada vez que yo mencionaba Morgan, esa beta o a la manada Sunrise en general.-¿qué ocurre?¿hay algo que deba saber?-pregunte a Fred.-no, sólo que es un poco incómodo estar en presencia de ellos, hace poco perdieron su luna y nuestras relaciones nunca han sido las mas amables al correr de la historia, entonces encontrarnos con la hija de ellos es un poco incómodo-respondía Fred, sabía en el fondo que me estaba mintiendo, pero si él no me quería contar deducía que era algo personal.-sí es tan incómodo para t
CaelPara mi asombro, no fue difícil ponernos de acuerdo, si bien el capitán y sus famosos guerreros no se apartaron de esa pequeña beta, ella fue lo suficientemente inteligente para presentamos unos límites que ambas manadas nos servirían. Era muy inteligente y linda, mi lobo estaba hipnotizado por esa pequeña beta, que siempre se mantuvo con el viento a favor y rodeada de sus guerreros.Hicimos por fin el mapeo de los límites y nos pusimos de acuerdo, dejamos las hostilidades. Ella no estaba en conocimiento de todos los anteriores inconvenientes que nos habían ocasionado a sus padres, lo cual la había escandalizadó e ignorandome pregunto:-dime Roger, ¿que había ocurrido en el pasado entre nuestras manadas? iluminame por favor-le pregunto dandome la espalda, lo cual era una falta de respeto y ausencia del protocolo para un alfa.Era resfrescante el trato que tenia con su gente, luego de que contaran lo sucedido, ella se gira y me mira directo a los ojos. Fue como un puñetazo a mi ne