Llegamos a la manada antes de lo esperado y sin contratiempos. Curiosamente no volvimos a toparnos con vampiros. No deje de correr hasta llegar al hospital, aunque mis instintos me pedían que dejara a esta hembra en mi casa, bajo mi techo y protección, pero desconocía el daño y no quería que sufriera más.

-¿quién es ella?-pregunto mi beta Jake, cuando dejaba en la camilla a la hembra y era atendida de inmediato por sanadores que nos estaban esperando. Como no tenía más interés que el bienestar de ella, quede en el pasillo esperando y de paso relate todo lo sucedido a mi beta, que escuchaba con mucha atención.

-y eso sería todo, aunque si te soy sincero no esperaba este regalo Jake, no sé qué hacer-dije a mi beta quien aun nada decía.

Estuvimos unas horas esperando antes el que apareciera el sanador principal, se notaba cansado.

-alfa, beta-nos saludo el sanador-la hembra esta fuera de peligro, curamos sus heridas más graves y le administramos nutrientes que su cuerpo no rechazo. En es