Escorpión no le dio importancia a lo que dijo, pero dijo fríamente: —¿Cómo va la colaboración con el Grupo Silva? He oído que Ángel no quiere trabajar con el Gran Félix.

—Ángel, ese viejo dijo que hace poco se rompió la cadena financiera del Grupo Silva, ahora están recaudando fondos, dentro de tres días definitivamente estarán disponibles los fondos.

Escorpión se mofó, —¿Lo crees?

—Claro que no. Si en tres días no tienen el dinero, lo voy a demandar por romper el contrato, en ese momento, seguro que afectará la imagen del Grupo Silva, y entonces yo voy a conseguir los clientes del Grupo Silva a un mejor precio.

—Sí, pero date prisa, si Ángel reacciona, no tendrás oportunidad.

—Lo sé.

—Por cierto, vendré la semana que viene, ya me pondré en contacto contigo.

Después de eso, sin darle a Tadeo la oportunidad de reaccionar, colgó el teléfono.

De vuelta a la oficina, el hombre entró con una caja.

—Señor Ramos, aquí tiene lo que pidió.

Tadeo cogió la caja, la abrió y se burló al ver lo que