Capítulo 18: Atracción y SombrasAurora se encontraba en la biblioteca del templo, un lugar silencioso y cargado de una energía antigua. Las estanterías llegaban hasta el techo, llenas de libros cubiertos de polvo y pergaminos enrollados. Había venido en busca de respuestas, esperando encontrar algo sobre su linaje o la conexión con su magia. Pero su mente no estaba en los textos. Damien había invadido sus pensamientos de una manera que no podía controlar.El entrenamiento con él había sido brutal. Había sentido cada mirada, cada movimiento, y aunque estaba frustrada por sus constantes críticas, también había algo más. Un calor que se extendía desde su pecho cada vez que él se acercaba, una mezcla incómoda de atracción y temor.Aurora cerró el libro que tenía frente a ella con más fuerza de la necesaria, dejando escapar un suspiro de frustración.—Si sigues así, romperás algo —dijo una voz familiar.Ella levantó la vista para encontrar a Damien, apoyado contra el marco de la puerta. S
Capítulo 19: Ecos de PeligroLa calma que envolvía el templo parecía frágil, como si pudiera romperse en cualquier momento. Los rumores del avance de la Orden habían puesto a todos en alerta, y aunque las defensas mágicas del lugar eran poderosas, nadie se sentía completamente seguro. Aurora observaba desde una de las ventanas del pasillo, mirando las sombras del bosque que rodeaban el templo, preguntándose si algún día podría enfrentar lo que se avecinaba.El sonido de pasos detrás de ella interrumpió sus pensamientos. Cuando se giró, vio a Kael y Freya acercándose, sus expresiones más serias de lo habitual.—¿Preparada para otra sesión? —preguntó Freya, aunque su tono carecía de la ligereza habitual.—¿Otra vez? —Aurora suspiró, apartándose de la ventana—. Pensé que el entrenamiento de ayer fue suficiente para demostrar que puedo manejarme.Kael cruzó los brazos, su postura firme. —No es una cuestión de demostrar nada. Si la Orden llega hasta aquí, no tendrás margen de error. Nadie
Capítulo 20: Bajo AsedioEl templo estaba sumido en una tensión palpable. Las defensas mágicas vibraban con energía, un recordatorio constante de que la Orden Sangre Oscura estaba cerca. Aurora había sido escoltada de vuelta a su habitación después de que las alarmas sonaran, pero no podía quedarse quieta. Cada segundo que pasaba sin hacer algo la hacía sentirse inútil.Se sentó en el borde de la cama, recordando el entrenamiento con Kael y Freya, y cómo su magia había salido de control. Su mente repasaba cada error, cada chispa descontrolada, preguntándose si alguna vez estaría lista para enfrentar lo que la esperaba fuera del templo.¿Qué esperan de mí? se preguntó, mirando sus manos, que todavía sentían el leve hormigueo de la energía que había canalizado.Una conversación reveladoraNo pasó mucho tiempo antes de que la puerta se abriera y Damien entrara sin previo aviso. Su expresión era severa, pero había algo más en su mirada: una mezcla de preocupación y algo que Aurora no podí
Capítulo 21: Ruptura y DecisiónEl pasillo norte estaba sumido en un caos silencioso. Las runas en las paredes habían dejado de brillar, como si el ataque del infiltrado hubiera drenado su energía. Damien mantenía al hombre encapuchado contra el suelo, una de sus manos firmemente cerrada alrededor del cuello del intruso. Los ojos rojos de Damien brillaban con una ferocidad que hacía que incluso Kael y Freya dudaran en intervenir.Aurora, todavía con las manos temblando por la energía que había liberado, dio un paso hacia ellos. Había sentido el calor de su magia fluir con una claridad que nunca antes había experimentado, pero también un rastro de peligro que no podía ignorar.—¿Quién eres? —preguntó Damien con un gruñido, acercando su rostro al del infiltrado. La voz del vampiro era baja, pero cargada de una amenaza palpable.El hombre encapuchado intentó hablar, pero la presión de la mano de Damien lo impedía. Kael intervino, colocando una mano en el hombro de Damien.—Si lo matas ah
Capítulo 22: La PartidaEl aire del templo estaba cargado de tensión. Aurora observaba cómo los ayudantes del templo recogían pergaminos, artefactos y otros objetos esenciales, empacándolos apresuradamente en bolsas encantadas. Las palabras de Elias resonaban en su mente: “La Orden sabe dónde estamos. No podemos quedarnos.” Aunque sabía que era la decisión correcta, abandonar el templo, su refugio y lugar de aprendizaje, le producía un vacío difícil de ignorar.Damien estaba cerca, dando instrucciones a Kael y Freya mientras revisaban el mapa que Elias había extendido sobre una mesa. Su presencia imponente y segura parecía mantener a todos enfocados, pero Aurora podía ver en la rigidez de su postura que él también estaba tenso.—¿Lista para partir? —preguntó Freya, acercándose a Aurora con una sonrisa que intentaba ser tranquilizadora.Aurora asintió lentamente, ajustándose la capa ligera que Lyra le había entregado. —Tanto como puedo estarlo.—No te preocupes —dijo Freya, bajando la
Capítulo 23: La Bestia DesatadaEl claro se llenó con el sonido de ramas rompiéndose y hojas agitadas. Aurora apenas tuvo tiempo de darse la vuelta cuando vio las primeras figuras emerger del bosque. Los encapuchados de la Orden Sangre Oscura habían seguido su rastro, y ahora estaban más cerca que nunca.Damien dio un paso adelante, interponiéndose entre Aurora y los atacantes. Su espada brillaba con un resplandor oscuro, como si respondiera a su rabia contenida. La mirada en su rostro no era de simple defensa; era la de un depredador listo para destrozar a su presa.—No toquen a Aurora —dijo, su voz baja pero cargada de una amenaza letal.Los encapuchados no respondieron con palabras. En su lugar, avanzaron como una ola de oscuridad, rodeando el claro con movimientos rápidos y coordinados. Aurora sintió cómo el aire se volvía más pesado, lleno de la misma energía oscura que había sentido en el templo.Damien no esperó. Se lanzó hacia ellos con una velocidad que desafiaba la lógica, s
Capítulo 24: Lazos en la OscuridadEl grupo se movía rápidamente a través del bosque, dejando atrás el claro donde los restos de la batalla aún empapaban la tierra. Aurora podía escuchar los pasos apresurados de Kael y Freya detrás de ella, mientras Elias conjuraba runas en el camino para ocultar su rastro. Damien lideraba, su figura imponente era un faro de determinación en medio de la incertidumbre.A pesar de la aparente calma, el ambiente estaba cargado de tensión. Aurora no podía quitarse de la mente la brutalidad que Damien había mostrado en la batalla. Había visto su lado protector antes, pero nunca había sido testigo de la bestia que se escondía bajo su fachada controlada. Ahora, mientras lo seguía a través de las sombras del bosque, no podía evitar preguntarse cuánto de eso era por ella y cuánto era simplemente quien Damien realmente era.Un respiro necesarioFinalmente, Elias detuvo al grupo en un claro protegido por altos árboles. Las runas que trazó en el suelo comenzaron
Capítulo 25: Ecos de lo Perdido El bosque parecía infinito, envolviendo al grupo en un silencio pesado. Aurora caminaba entre Damien, Elias, Kael y Freya, mientras la memoria del templo destruido se repetía en su mente. Aunque habían logrado escapar, las imágenes del ataque de la Orden y los sacrificios que otros habían hecho por ellos pesaban en cada uno de sus pasos.Kael y Freya, quienes habían sido pilares de apoyo durante la huida, caminaban detrás de Aurora, sus miradas vigilantes. Ambos estaban tensos, con la magia aún pulsando en el aire a su alrededor. A pesar de haber dejado el templo atrás, la amenaza de la Orden seguía latente.El templo: lo que dejaron atrásCuando el grupo se detuvo en un claro protegido por runas de Elias, Aurora no pudo contenerse más.—¿Qué pasó realmente en el templo? —preguntó, mirando directamente a Elias.Elias, trazando cuidadosamente un símbolo protector en el suelo, levantó la vista con un rostro cansado pero sereno.—Selene destruyó el núcleo