Leandra se sentia algo perdida luego de ver como Nikos entraba en la casa de Carla, no sabia que seria mejor si esperarlo o simplemente irse y esperar a ver cual era la desicion que Nikos tomaba. Se habia hecho una promesa en los dos dias que habian estado separados y es que despues de ayudarlo hacer un cierre con el pasado que lo atormentaba, no trataria de presionarlo para estar juntos. Tenia que ser el que decidiera el rumbo que tomarian.Sumida en sus pensamientos estaba cuando vio como Fabian el esposo de Carla saliade la casa, camino hacia ella para detenerse.– Te invito a un cafe, creo que ambos necesitamos compañia.– le sonrio mientras se acomodaba la montura de sus espejuelos –Anda vamos, aqui no resolveremos nada y ellos necesitan hablar. Ademas te llevare luego a comer los dulces mas deliciosos de los alrededores, se que eres dueña de un gran negocio de dulces por decirlo de alguna manera y tal vez conocer a la tia Polly te guste.– Tienes razon aqui no haremos nada, no t
Unos cinco minutos despues Nikos llego al mercadillo, Miro su reloj habia hecho el camino desde la casa de Carla hasta este lugar en tiempo recod, no fue dificil localizar a Leandra. Ella estaba frente a uno de los puestos ambulantes donde vendian dulces artesanales de diferentes tipos. Conociendola sabia que la conversacion tan amena que tenia con la vendedora era sobre aquellos dulce que habia probado y de seguro estaba tratando de convenserla para que trabajaran juntas.Leandra solia hacer cosas asi, el habia investigado un poc su negocio luego de su matrimonio y siempre comenzaba de la misma manera encontraba algun reposterio, dulcero o simplemente un vendedor de dulce y si el producto que estaba ofreciendo le gustaba le propondria hacer negocios y dependiendo de la actitud y dispocision de la otra parte realizarian una asociacion o solo trataria de comprar su recetas y desde ese punto de partida ella crearia algo completamente nuevo. Respiro hondo sabia que debia de caminar hac
Nikos camino junto a Leandra, estaba usando uno de los conjuntos que le habian llamado la atencion de la tienda y le quedaba de maravillas, llegaron al Land Rover. Tras deslizarse por unas callejuelas estrechas del pueblo tomo la carretera junto a la playa. Siguiendo las indicaciones que Fabian le habia dado. Condujo el Land Rover subió por una carretera llena de baches y rodeada por un lado dedunas que poco poco fueron dando paso a un acantilado y por el otro una pared de piedras cuando parecía que ya iban a tocar el cielo, al doblar una de las pronunciadas curvas, Nikos paró el coche y se bajó.—Vamos —le indicó a LeandraLenadra se bajó del coche y, cuando levantó la mirada, se quedó sin habla. Estaban muy alto, se podia ver un mirador antiguo que a jusgar por la pintura hacia poco habia sido reparado. Los dos caminaron hasta el. Desde donde estaban se veían el puerto con su muelle, las casitas blancas y azules en su mayoria, la plaza y el mercadillo. Era una vista expectacul
Nikos no queria contenerse mas,queria amra su esposa tal y como ella se merecia. Asi que comenzó a chuparle un pezón por encima del sujetador de encaje.Leandra sintió una sensación aguda que la atravesó y estuvo a punto de hacerla perder el equilibrio. Él se apresuró a abrazarla para mantenerla en pie, y continuo lamiéndole el otro pezón. Por las reacciones que Leandra no podia contenr sabia bien que estaba provocando estragos en las emociones y lo que estaba sintiendo y eso le encanto, experimentar la autentica liberacion dejando que sus instintos primitivos le guiaran.—Ven conmigo —le dijo tomándola de la mano.A continuación, la guió hacialas eguridad del mirador, la temperatura estaba descendiendo y no queria que ninguno de los dos se refriara asique entraron al mirador. Una vez allí, Leandra se quitó las sandalias y sintió las losas frias bajo los pies. Las paredes eran un muro que los aislaba de todo. Sólo estaban ellos dos y la luna que se estaba elebando en el cielo.Niko
El aire frio de la noche hizo que Leandra se estremeciarea un poco, Nikos al notarlo la abrazo un poco mas fuerte, le dio un suabe beso en la frente. Luego se incorporo y fue recogiendo la ropa que estaba esparcida en el mirador. Luego se acerco a su mujer para entregarle la ropa.— ¿Ahora que Nikos?—Le pregunto Leandra, la mayor parte de sus problemas se habian solucionado hoy pero no podia tampar el sol con un dedo sabia que su relacion era un trabajo en progreso — ¿ Que vamos hacer ?— Ahora cariño — Nikos aparto su cabelo alborotado de su rostro y le dio un pequeño y tierno beso — vamos a casa, mañana sera un nuevo dia. No te voy a mentir habra momentos que me comportare como antes, pero te puedo asegurar que no te apartare... Leandra sintio que su esposo le estaba hablando con sinceridad, le abrazo y le dio un beso, por el momento la idea de ir a casa se le hacia muy apetecible. Los dias que no habia estado con el fueron horrible ahora su marido queria ir a casa y ella no se iba
Leandra se hecho en la boca la piruleta, el sabor a fresa le lleno y poco a poco se fue calmando. Comenzó analizar la forma de decirle a su esposo que de cierta manera habia llegado a un acuerdo con su padre, de que si ellos lograban solucionar sus problemas tendrían o intentarían tener un hijo. Suspiro cuando termino con el dulce, habia dado mil vueltas en su cabeza pero aun no sabia como decirle a Nikos lo que su padre había sugerido y que ella de cierta manera había estado de acuerdo, miro el paisaje que iba cambiado conforme se acercaban a la ciudad. Y decidio que era mejor callar hasta que estuvieran en la seguridad de su apartamento. Este tipo de conversación era de las cuales solo se deberían de tener en casa y estando cómodos los dos. Casi una hora después Nikos se estacionaba, estaba inquieto conocia a Leandra y si aún después de terminar el dulce había decidido guardar silencio, no podia ser bueno o por lo menos era algo que podía clasificar como delicado. Se imagino miles
Doce años más tarde — ¡Corre, Nikos, corre! -vociferó Leandra cuando su marido llegó a la tercera base y se dirigió hacia el home píate.. — Caramba, mamá, ¿no podrías gritar más fuerte? Nos vas a dejar sordos a todos... Leandra miró a su hijo mayor, Nick, sonriente. El pequeño era la viva imagen de su padre y ya todo un rompe corazones según su amigo Dom. Nick podía dedicarse a ser modelo. Cuando Nikos se enteró casi pone el grito en el cielo. — Sí — vio que Nikos se lanzaba al suelo en los últimos metros y tocaba la base. Sabia que estaba contento le iba a restregra a su cuñado Santos que era el picher contricante que le habia conectado un cuadrangular. Gritó de alegría y bailó el baile de la victoria en honor del hombre al que amaba, confiando en no romperse algún hueso en el intento, ya no era una jovencita pero sabia que el amaba cada de sus locas ideas. Vio como su hijo quiso minimizar su precencia a su lado mientras que las gemelas intentaban seguir cada paso que ella d
– Oficialmente, podemos estar al borde de un ataque de pánico –Leandra Kours terminó de leer el mensaje de su hermana Reanna y miró a su padre Jose. Este tenía cara de sorpresa y Leandra no podía culparle. Ella se sentía igual esto era un shock, todo el mundo estaba allí, desde hacía una semana habían comenzado a llegar los adornos, mesas, mantel, en fin todo estaba planeado al detalle según sus preferencias, no sabia como su hermana se habia atrevido a tanto a solo unas horas de estar en el altar con sus prometido. Porque ahora y no antes, Dios los adornos estaban puestos y la tarta estaba hecha. Habían alertado a los medios de comunicación, y se había realizado una selección de las mejores y prestigiosas revistas para que presenciaran la boda del año como le había apodado las celebritys y todos estaban allí o estaban por llegar. Oficialmente no era momento para tener un ataque de pánico como el que ella quería tener, tras haber leído el mensaje que Reanna le habia mandado minutos