Los “padres” de Kaylee se movieron de manera incómoda sobre sus asientos. El líder entró en la habitación en la cual estaban los ancianos. Totalmente nerviosos intentaron no voltear a verlo a los ojos, debían muchísimo dinero y desde que Kaylee había decidido arruinar el trato, todo se había ido a la mierda. Tenían que encontrar la manera fácil de conseguir el dinero que debían o terminarían bajo 3 metros. Ninguno quería morir pero estaban seguros de algo, harían pagar todo lo que les habían hecho. Empezando con Kaylee, ella los había arruinado de una manera completamente absurda y ahora la harían pagar, por arruinar sus planes y arruinar sus vidas.
Ella no lo sabía pero ellos habían terminado con la vida de su madre, su madre había sido la verdadera hija de esos hombres y ella nunca les había hecho
Anna observó a Dante entrar al departamento con el rostro totalmente rojo y lleno de sangre. Estaba borracho y apenas se podía sostener de pie.— ¿Qué sucedió?—preguntó ella mientras lo veía caminar.—Soy un idiota. —dijo él.—Amor…estás todo… lleno de sangre, llamaré al doctor.— ¡No quiero un maldito doctor!— gritó Dante. — ¡Quiero a Kaylee! ¡Quiero a mi pelirroja! La quiero a ella—dijo para luego ponerse a llorar. — pero soy un estúpido y te tuve que embarazar.— ¿No me amas?—preguntó Anna mientras lo veía tambalearse en el centro de la sala. — creía que querías al bebé, que me querías a mí.— ¡¿Quién se iba a querer casar con una mujer t
Ricky se acercó a ella con una carpeta entre manos. Suspiró de manera nerviosa y tragó saliva para finalmente sentarse a su lado.—Tengo noticias, pequeña— le dijo mientras deslizaba con suavidad la carpeta sobre la mesa. — hablé con mi tío.— ¿Con tú tío?— preguntó ella mientras soltaba el sándwich de jamón que se había preparado para cenar. — ¿FBI?—FBI— confirmó Ricky. Kaylee lo miró y con rapidez abrió la carpeta en busca de algo importante. Su corazón se detuvo por co
Dante pisó con fuerza el acelerador a percatarse que lo habían estado siguiendo por mucho tiempo. Le costaba mantener el auto bajo su control a causa del alcohol y la velocidad no le ayudaba por completo. Estaba mareado, desesperado y molesto.El auto lo había estado siguiendo por casi una hora y él no se había percatado de ello, al inicio pensó que era Anna quien lo estaba siguiendo pero luego notó que la persona que conducía el auto era un hombre. Y no era su hermano ni algún hombre conocido.Tomó con más fuerza el volante para asegurarse de poder controlar el auto con la gran velocidad que llevaba. Intentó perder al auto desviándose de su
Kaylee guardo silencio cuando el doctor revisó a Dante por una última vez. Se mordisqueo el labio y suspiro levemente creyendo que el doctor finalmente le daría buenas noticias pero no fue así, en cambio negó suavemente y la miro fijamente.—Sigue Igual —dijo. — Tienes que llamar a sus padres— dijo el hombre de barba blanca. Kaylee maldijo suavemente y asintió—Lo entiendo doctor, llamaré a su familia. — dijo ella mientras veía a Dante sobre la cama del hospital.La habitación nuevamente quedó casi en completo silencio cuando el doctor Salió de aquella habitación de lujo. Kaylee tomó el celular roto de Dante por un segundo y observo la pantalla negra. Su corazón dio un vuelvo de emoción al observar la fotografía de una Kaylee pelirroja. De una Kaylee que no conocía el dolor como lo hacía a
La habitación siguió en silencio durante varios minutos. Dante mantenía su mirada fija en los ojos de aquella mujer que tanto amaba pero ella parecía no querer responder.—No tienes que responder si realmente no quieres hacerlo. —dijo Dante al darse cuenta que ella no quería dar una respuesta. Kaylee lo observó durante unos segundos y finalmente soltó una pequeña sonrisa entristecida.—Esto no es un juego Dante... nuestros sentimientos no son un maldito juego— susurró mientras lo veía con tristeza. Dante se movió con incomodidad sobre la cama del lujoso hospital, con cada mínimo movimiento podía sentir como cada uno de sus músculos gritaban en un fuerte reclamo de dolor, no quería moverse pero sentía una completa necesitad. Debía de acercarse a ella y tocarla. Necesitaba tocarla.—No estoy diciendo que nuestros sent
Kaylee soltó un pequeño jadeó cuando Nicolás la obligó a caer sobre un montón de cajas de cartón usadas. El hombre de cabello rubio la observó por unos momentos y soltó una gran sonrisa mientras asentía. Había conseguido lo que tanto había querido.— ¡Eres un hijo de puta!— gritó Kaylee mientras lo veía y lloraba con fuerza. Nicolás asintió suavemente y se acercó a ella sin borrar la sonrisa de su rostro. Kaylee intentó alejarse pero él la sostuvo con fuerza de las muñecas y la obligó a verlo. Ella cerró los ojos con fuerza. No quería verlo, lo odiaba como nunca había odiado a una persona. — te juro que si le haces algo a Dante...
Kaylee retrocedió con fuerza mientras veía a la persona frente a ella. La mujer la observó con atención y maldijo suavemente al darse cuenta que realmente estaba viendo a Kaylee.— ¡No puedo creerlo!—gritó Kaylee.La mujer la miró durante unos minutos. Parecía estar en completo estado de shock. “Mierda” es lo único que pudo pensar Kaylee y sin pensarlo dos veces la obligó a salir de aquel lugar. Ricky observó a la mujer mientras ambas salían del lugar.— ¡Que mierda!—gritó Ricky. — ¡Es igua
Kaylee guardo silencio en la habitación. Su mirada estaba completamente clavada en él. Dante seguía en la camilla mientras el doctor saturaba las heridas de su rostro. Ricky ya había sido atendido y por suerte solo tenía golpes superficiales y no tenía heridas internas. Dante la observó durante unos momentos, parecía que intentaba leer sus pensamientos con solo verla, Kaylee se percató de la mirada de Dante sobre ella y ladeó un poco su cabeza.— ¿Qué sucede?— preguntó. —Estaba completamente seguraque él seguía confundido por su relación. Incluso ella estaba confundida pero no quería pensar en ello. Solo quería vivir junto a él.Ella sabía que no podía permitir vivir toda una vida a base de mentiras, ya no podía vivir engañándose a sí misma. Estaba cansada de intentar ser alg