Capítulo 84. Como si fuera un miembro de la realeza, la habitación de Rosaura está custodiada por varios hombres de seguridad, de Emmanuel y de Vicent, lo que causa curiosidad a las personas saber a quién protegen, ya que el pasillo que da a la habitación de Rosaura está completamente tomado; nadie entra ni sale sin identificarse primero. Mientras que en el auto de Emmanuel, Vicent se sorprende al escuchar todo lo que Emmanuel le cuenta; se desahoga con él, sacando cada frustración que lleva en sus hombros. — Mira nada más, la niña nos salió toda una guerrera; eso hay que recompensarlo. Me has dejado sin palabras saber de los alcances de Vanessa; ella como que no aprecia su vida. — Vanessa no es la que me tiene tan irritado, Santino; se ha burlado de mí todo este tiempo, pensé que era leal, pero he descubierto cosas de él que me hacen dudar de la muerte de mi padre. No quiero pensar mal, pero si lo confirmo, quiero el peor castigo para él, quiero matarlo con mis propias man
Capítulo 85. Tres semanas después. Rosaura despierta en medio de la noche, sintiendo que su estómago gruñe. Abre los ojos lentamente, despertando a Emmanuel, que desde que están en la clínica tiene el sueño ligero a causa del movimiento de ella. — ¿Qué tienes?—pregunta acomodándose en la cama. — Tengo hambre, mi amor, mucha. — ¿Hambre?— Emmanuel ve la hora, 3 am—. ¿Qué quieres comer? Dime, te lo compraré antes de que despierte Emiliano. — ¿Podrías traer un yogurt de fresas con cereal? — ¿Eso quieres? —Sí. — Bien, enviaré a Víctor, ¿nada más? — ¿Recuerdas esos muffins de chocolate? Victor dijo que en la cafetería los preparan. ¿Puedes pedirme dos? — ¿Dos? — Y un batido, que sea de merengada o chocolate. Emmanuel abre los ojos completamente; si pedido lo ha dejado loco. — Ok, voy a pedirlo, quédate en la cama. Emmanuel se levanta al encuentro con Víctor, que vigila en el pasillo. — ¿Pasa algo, señor? ¿Al bebé? —Tu jefa quiere de esos muf
Capítulo 86. Golpe bajo. La semana pasa tan rápido que apenas lo ven. Tras un poco más de un mes, hoy Rosaura sale de la clínica con su bebé en brazos, creyendo que irán a un departamento o al club, pero no; Emmanuel la sorprende llevándola a una hermosa mansión que le da como regalo. — Bienvenida a tu casa, Rosaura.— Rosaura está sin palabras al ver lo enorme del lugar; es maravilloso todo, incluso se puede evidenciar la seguridad que hay. — ¿Viviremos aquí? Pensé que… — ¿Qué regresaríamos o iríamos al club? No, nos vamos a quedar aquí por un tiempo; esta es tu casa. Rosaura sonríe feliz por la hermosa sorpresa; le ha dado un hermoso lugar que puede llamar hogar, todo tan diferente a donde ha vivido estos pocos meses. — Esto es maravilloso, mi amor, realmente me has sorprendido. Gracias, gracias por todo lo que has hecho por nosotros.— Rosaura lo besa, sosteniendo a su pequeño en brazos.— Mira, mira tu nuevo hogar, cariño, mira el lugar que papá ha escogido para t
Capítulo 87. Detonante. Emmanuel intenta sin romper en la habitación, tratando de que ella le abra por su voluntad. — Hablemos, Rosaura ; abriré la puerta. — Aquí está la llave, señor. Uno de sus hombres de seguridad trae la llave, permitiendo que Emmanuel entre a la habitación, donde la halla abrazada a Emiliano, mientras llora muy triste sobre el sofá. — Lárgate, por favor, vete, quiero estar sola. — YANNIN.— Emmanuel la llama y de inmediato aparece. — ¿Señor? — Llévate al niño, ve. — No, Yannin, déjalo conmigo; quien se tiene que ir es él, que se vaya. No quiero hablar, no quiero escucharlo. Yannin no sabe qué hacer; verla tan afectada, aferrándose a su hijo, es doloroso. — Yannin…—ordena Emmanuel—. Suelta al niño, Rosaura; hablaremos solos tú y yo, como pareja. — YO NO SOY NADA TUYO, HIJO DE PUTA…— la saca de quicio, la ve como nunca antes. — ROUS, el niño, el bebé, cariño, no necesita estar en medio de esto, no es saludable para él. —Dámel
Capítulo 88. Reencuentro del pasado. Emmanuel camina de un lado a otro; lleva más de media hora esperando en la sala de espera y su angustia es inquietante. — Señor Maglot. —Sí, sí, dígame, doctor, ¿cómo está mi esposa? ¿Cómo está mi bebé? — Señor Maglot, debo informarle que su esposa tuvo un preinfarto, en estos momentos está fuera de peligro ella y el bebé, pero debe saber que está recaída puede volver a ocurrir, lo que le sugiero que siga las indicaciones, debido a que su esposa está embarazada, su situación es complicada, en su caso, necesitaría una cirugía, yo no podría darle un diagnóstico completo, pero tengo una colega conocida que trabaja con este tipos de casos, incluso a operado a pacientes con enfermedades cardíacas en medio de un embarazo, yo tengo la preocupación de que esté episodio se repita, su esposa no podría dar a luz en este estado, ella podría sufrir un nuevo ataque en medio del parto que podría poner en riesgo su vida, le sugiero que converse con mi col
Capítulo 89. Declaración. Emmanuel, al notar la situación, sale de la habitación dejando al pequeño Emiliano con Yannin, para él poder verificar la situación que ha dejado a todos muy desconcertados. — ¿Se encuentra bien? —pregunta Emmanuel, acercándose a la mujer que trata de recomponerse. — Sí, sí, disculpe, pediremos todo para el traslado; hablaré con mi colega. — Está bien, aquí la espero. Emmanuel regresa a la habitación, donde poco tiempo después llega una enfermera con la silla de ruedas. Rosaura nota que Emmanuel se acerca para ayudarla y ella, al no quererlo cerca, se aleja subiéndose a la silla sin esperar su ayuda. — Poco a poco, Rosaura, no es bueno que te exaltes.— Afirma Dayanira que nota la tensión entre Emmanuel y Rosaura. — Me siento mejor, solo quiero salir de aquí e irme a casa. — Por ahora no iremos a casa, ya te lo informé, iremos a California para una evaluación completa sobre tu corazón. — Yannin…— Rosaura la mira y ella niega. — E
Capítulo 90. Proceso. Al bajar del auto, Emmanuel nota que Rosaura está más apegada a Dayanira, e incluso la mujer la protege demasiado, encargándose personalmente de cada paso que ella da hasta el avión. Mientras que Rosaura permanece calmada, siguiendo el consejo de su madre, pensar en sus bebés es la prioridad. No importa lo que haya pasado, siempre y cuando sus bebés sean la prioridad; su salud es prioridad, porque sin su madre, los bebés no tendrán más que quedar bajo la tutela de su padre y eso Rosaura no piensa permitirlo. Dayanira está feliz con su nieto, ayuda en todo a Rosaura, liberándola un poco de la presión, mientras analiza al esposo de su hija, un hombre claramente acomodado, unos cuatro años mayor que su hija, distante, con expresión fría, un hombre elegante pero reservado. No puede negar que es un hombre muy guapo y además tiene una inteligencia e influencias que la sorprenden; sin embargo, ahora solo ve frustración y cansancio en sus ojos. Está distraído y pe
Capítulo 91. Reinicio. Al saber toda la verdad, la parte de la historia que Dayanira cuenta, Emmanuel se queda sorprendido; jamás imaginaría que el mundo sería tan pequeño. —Entiendo, solo le pido que ahora que está aquí, presente en su vida, no interfiera en las decisiones que debemos tomar; solo quiero que todo se mantenga igual. —Lamento informarle que no lo será. Ahora más que nunca lucharé por sanar a mi hija. Me metí en esta profesión por ella, por su salud, para ayudar a otros. Voy a evaluar la manera de hacer una operación completa con ella, lo evaluaré con mis colegas. Por otro lado, pienso acercarme a mi hija, estar presente en su vida. Además, Rosaura no está sola, ella tiene dos hermanos que sin duda querrán conocerla. Quiero que sea parte de nuestra familia, ¿si a usted no le importa? —¿Por qué me interpondría? —No lo sé, sé que usted ama a mi hija, pero siento que es sobreprotector; espero no use ese exceso de protección contra nosotros. —Si ella la quiere e