Al día siguiente el Royce Rolls vuelve a estacionar en la misma cuadra del día anterior. Dunca le abre la puerta a Halia.
-Sabes no me siento muy cómodo con que vayas sola- La mira como un cachorrito abandonado.
-No te preocupes, la seguridad en ese lugar es muy buena. Sabes esa es una de las razones por la que la escogí.
-Y no habrá sido porque sabías que el Joven Ortega está ahí.
- ¡No! - Ciñe las cejas. -Cuando aplique no conocía a ninguno de los Lombardo. No seas injusto conmigo. - Bufo.
Alonso sale del auto en auxilio de Halia. Observa que la acera esta desolada. Y se acerca a los dos.
-Nos mandas un mensaje cuando estes adentro, ¡Hermanita!
-Como que te estas tomando muy enserio, lo del hermano mayor- Le da un mirada representativa.
<A kilómetros al oeste de la compañía Koyama, llega el Royce Rolls al espeso bosque frente a la carretera principal Bruno se estaciona cerca de los pillaos, así se encuentra el maestro Vene con los brazos cruzados observando el ostentoso auto.Un escalofrió le recorre toda su columna vertebral, en su cuero cabelludo siente como le hormiguea, su piel se eriza- No se preocupe señora, esta vez no le fallaré.Atsushi sale del auto con toda la elegancia que lo distingue - ¡Cómo que se ha puesto frío! -Le comenta a Marcus que ya estaba a su lado, y detrás de él Bruno.Camina relajado al encuentro del maestro.- ¡Bienvenido amigo! - Se dan un abrazo fraternal.- ¡Vaya amigo, te veo muy repuesto, ¿Encontraste al escurridizo gastroenterólogo? - Le dice mientras lo gu&i
Al día siguiente Halia entra atareada al ascensor, en sus brazos carga una montaña de carpetas, pequeñas gotas de sudor salen de su frente, a cómo puede pulsa el número 70 del ascensor. - ¡Din-Don! Halia sale del ascensor apenas se podía ver su pequeña cara que sobresales de las carpetas. -Niña ¿Por qué no usaste el carrito? - Daniela corre para ayudarla con los archivos. -Pregunté a la chica en el almacén- Se inclina para que Daniela tomé algunos. - Se presentó como Felicia Granados fue amable al principio, me mostró donde estaban los archivos, pero cuando le dije para donde los llevaba… - Halia camina con el resto de las carpetas al interior de la oficina de Liam. -Me dijo, que no contábamos con ninguno, para luego ignórame- Halia le da una sonrisa de frustración. - ¡Oh no!, que mal- Habla entre dientes, pero Halia logra escucharla. - ¡Perdóneme!, Señora Daniela…. Daniela la interrumpe -No me llames señora, me haces sentir vieja, solo dime Daniela al fin y acabo somos compañ
Regresando al complejo de departamentos.Halia sale a la sala, podía sentir su corazón en la garganta, cuando ve a su amiga temerosa detrás de la chica del bazar podía reconocerla donde fuera, tenía grabado su rostro.Ambas mujeres fijan la mirada hacia la figura femenina que sale a su encuentro. Sus ojos de iluminan devolviéndoles el alma al cuerpo. Karen que había permanecido cabizbaja da un suspiro de relajación. Observa con más atención a los hombres que están en el departamento.Sus ojos se llenan de lágrimas, por primera vez en muchos años siente como las cadenas se desvanecen de su corazón, aparta a Julián de su camino y corre hacia Halia.Quien la espera con los brazos abiertos. Las dos caen hincadas al piso y lloran abrazadas. Durante ese tiempo en el departamento solo se escucha el sollo
Dentro de la sala existe una tensión. Halia rompe el silencio.-No puede pedírselo a mi Padre…- Suspira frustrada.-No te preocupes Halia, no hay problema- Dice Karen con una sonrisa fingida.-Karen cuando nos separamos hace 12 años….Antes que Halia pudiera continuar Karen la toma de las manos para tranquilizarla.-Hablo en serio, no tienes que justificarte, han pasado muchos años de eso, estoy contenta por todo lo que has hecho para tratar de ayudarme.-Pero… Las tres opciones no me gustan. La más factible te envía lejos, no puedo evitar sentir, que no es justo apenas nos encontramos de nuevo- Sus lágrimas escapan sin poner contenerlas.-Halia tú eres libre de ir y venir donde quieras, simplemente puede visitarnos a donde vayamos. Nosotras te estaremos esperand
-Liam, ¿Confías en ese hombre? ¡Bueno! Sé que es tu amigo y todo. Pero ¿Puedes confiar plenamente en él? - Halia mueve sus manos suavemente. - ¿Máximo? No es el hombre más amable del mundo, sin mencionar los muchísimos defectos con los que cuenta, tantos que no podría nombrarlos todos. -A su favor, es un hombre que trata de mantenerse dentro de la Ley. Leal a nuestra orden, la fundamos hace muchos años cuando éramos jóvenes. Hicimos un pacto de sangre. Y en lo personal, él es quién lo ha cumplido a cabalidad sin la menor queja- La vuelve a ver para ver su reacción. Volviendo la mirada otra vez en la carretera agrega -Sin embargo, para tu tranquilidad pondré a uno de mis mejores hombres ayudarlo y cuando digo uno significa todo un equipo detrás de él. Bebé, te aseguro que las cuidaré, puedes confiar en mí. -Debes pensar que soy una cobarde por no decirle a Bàba- Baja la cabeza. Liam pone su mano sobre las manos de Halia que están cruzadas sobre su regazo -No tienes que explicarme n
A muchos kilómetros de distancia en el edificio industrial alquilado (Centro de operaciones Vestock) está esperando en la gran mesa ejecutiva rectangular el señor Fajardo, completamente solo, su mirada perdida hacia el vacío. La posición de la sala permite tener mucha iluminación natural.Frente a él esta su laptop, se encuentra pensativo esperando una video llamada. Al otro extremo, esta una gran pantalla plana para exposición, en ese momento su laptop esta enlazada con esta.- ¡Biiip! ¡Biiip!Conecta la llamada tanto en la laptop como en la pantalla plana. Se reproduce la imagen de una gran sala de juntas, varios hombres mayores sentados en completo orden con sus laptops encendidas.En la cabeza de la mesa de reuniones, un hombre con aura fuerte, su rostro con facciones perfiladas como la de un dios griego, sus ojos de color
Nuevamente en la propiedad del maestro Vene. Halia está sentada con las piernas cruzadas en forma de mariposa. En el centro de una roca lisa lo suficientemente amplia para construir una casa con jardín incluido. A los lejos puede escuchar las maldiciones que dice Liam.- ¡Mierxxx!... ¡ϟҨ ӜҨϟ!Tratan de concentrarse pero le parece gracioso, verlo perdiendo sus estribos, cuando hace unas horas se comportaba como el serio e intachable jefe, sin percatarse se le escapa una risa silenciosa.- ¡Concéntrate! ¡Mocosa! – Refunfuña Vene.-No los voy a dejar entrenara juntos- Habla entre dientes- Ese noviecito te distrae- Dice furioso.Halia trata de no pensar en Liam y concentrarse en el ejercicio, - «No puedo negarlo me encanta la compañía de ese hombre o más bien me encanta él»- Mueve la cabeza de un lado para otro. Toma aire para concentrarse.Al calmarse, caen en su realidad y una tristeza nace en su corazón, sabía que posiblemente Liam se iba a convertir en su amor platónico, no podía saca
Continuando en la cabaña del maestro Vene…El hombre a duras penas puede quitarse la ropa, el olor era tan terrible que el estómago de Liam estaba a punto de voltearse.Pero las lesiones en su cuerpo lo distraen, fruñe las cejas ante lo que ve. En toda su vida ha visto muchos golpes pero nunca como estos hematomas.Los mira con atención parecía que la sangre coagulada que usualmente está por encima como cualquier moretón, venían desde adentro dejando una marca cónica invertida.-Pues botarlo tengo muchos más- Lo distrae Vene ¡Ayúdame a abrir la llave! - Liam llena la tina con agua, luego vierte él jabón líquido produciéndose mucha espuma, aprovecha que el hombre se está bañando para quitarse el saco que apestaba, para lavarse brazos y tórax.- ¡Mocoso! – Liam lo escucha llamarlo, da un suspiro de frustración y se acerca al hombre al menos ya no huele mal. Liam lo termina de ayudar sin decir ninguna palabra.- ¡Ahhhhh!-Ya me siento mejor, mucho mejor, siempre he tenido miedo a morir…