Halia está exhausta física y mental, tuvo un día con mucho trajín, la chica se movía de un lado a otro en la cama, su frente está impregnada de gotitas de sudor, su respiración agitada.
Al parecer sufría de otra pesadilla, el vaho sale de ella en cada respiración. El frio en toda la habitación era fatigoso.
Una oscuridad peculiar se apodera de todo el espacio libre, resaltando los objectos del cuarto. Halia siente una presión de energía muy cerca de ella, en su estado semiconsciente da un grito ahogado, abre sus ojos para encontrarse con su habitual techo color mármol.
Se trata de sentar, pero la opresión de energía no tenía precedentes. Así que toma toda su fuerza para reincorporarse.
- «¿Qué es esto?»- Halia por fin logra sentarse. Su respiración para este momento estaba agitada, su piel se puso blanquecina, Halia usaba una camiseta de tirantes de color palo rosa que la hacía ver mucho más demacrada. Las gotas de su sudor se veían en la piel descubi
Halia al despertarse lo primero que ve, son los muebles de su cuarto, había mucha luz en la habitación. Al voltearse se percata que las cortinas están abiertas permitiendo ver el hermoso paisaje.Se tomo unos momentos mientras se adapta a la luz, nota que la posición de las sombras no es temprano. Mira su despertador 11:08- ¡Oh no! Falte a las primeras clases. ¿Qué pasó? ¿Por qué Belinda no me despertó? - Se trata de levantar, pero su cuerpo le responde de la peor manera. Haciéndola caer nuevamente sobre el colchón.Halia fruñe las cejas, - «¿Qué me pasa? Siento como si me hubiera revolcado un camión» -Esto no es normal- Dice en voz alta.- ¡Mija! ¿Qué no es normal? -Dice Belinda entrando a la habitación con una bandeja plegable con comida.
En la Rosa Dorada, todo aparentaba estar igual, Cora no había visto a Karen desde el día anterior. La angustia se había apoderado de ella intento ir al tercer piso, pero había seguridad extra y no pudo entrar.No vio ninguna chica nueva, ni movimiento en los calabozos, así que estaba el doble de preocupada. Trata de averiguar con las otras chicas.- «¡Por favor! que no la hayan matado» - La pesadumbre en su cuerpo era aplastante.- ¿Qué te pasa Cora? Te vez preocupada se le acerca Alba, luciendo varios accesorios costos. La belleza de Cora opaca por completo a Alba a pesar de usar objectos tan vistosos.-Nada Alba ¿Qué podría pasarme? – Le dice a la defensiva. Pero analiza mejor sus opciones- ¿Cómo te va con el Diablo?La mujer sube una ceja - ¿Y eso? No era que querías, que me alejara de él- La mira con burla.- &
Continuando en la Rosa Dorada.-La verdad me gustaría recibir el servicio por el que pague, pero no de la forma que usted piensa- Trata de defenderse Julián.- ¿Según usted?... ¿Cómo pienso yo? - Cora coloca el vaso en la mesa. Tratando de controlar sus sentimientos en conflicto, por una parte, quería creer que había una posibilidad de cambio y, por otro lado, no se permitía confiar en un hombre. ¡No más!Julián la mira con atención, - «Hace un momento logre ver un destello en su mirada, sin embargo, ¿Por qué ahora esta chica tiene puesto este muro? Parece inquebrantable.- ¿Qué tal si hacemos un juego?, tú eres una esposa abnegada que viene a consentir a su esposo, y yo soy el esposo enamorado, que regresa a casa después de un laaargo y agotador día d
Continuando el Dojo del Maestro Vene - ¡Je, je, je! -Primero me hacen esperar, cuando esa no es una de mis cualidades, segundo hace un escándalo de gallinas en mi puerta y por último cuando estoy frente a ustedes se queda callados como imbéciles. - ¡Lo siento Maestro Vene!, Perdone nuestra descortesía- Halia se apresura a decir. -Él es … - ¡Grrrs! -Apresúrate, no me hare más joven…- Interrumpe a Halia dándole la espalda, para luego caminar erguido hacia el interior. Se detiene al percatarse que Halia no se movió. -Halia ¿Qué esperas? - La mira por encima del hombro. La chica vuelve a ver a Liam, y se apresura alcanzar al maestro que ya había retomado su marcha. Por su lado Liam no lo piensa, y los sigue. - ¿Quién te invito a venir? …- El maestro le dice sin darle la cara y deteniendo el paso. Halia abre su boca para hablar, pero es interrumpido por la voz masculina y fuerte de Liam, que para ese
Continuando en el centro de entrenamiento del maestro Vene. El hombre de mediana edad se inclina frente a los dos jóvenes, el cuerpo de Halia sobre el de Liam. - «Sería muy engorro borrar tu existencia, tal vez sea mejor que ambos se olviden y así no tendré que volver a toparme contigo» El hombre se levanta para concentrar su Qì en un punto. Sin embargo, su piel se eriza, un frio abrumaron se apodera de toda la zona, siente como sus articulaciones se enfrían, así como su alma. La mujer que estaba al pie de la cama de Halia, la noche anterior ahora estaba frente al hombre, él no podía verla. La mujer levanta su mano para alcanzar el cuello del hombre empujando su alma fuera de su cuerpo llevando por los cielos. El hombre percibe en su interior un gran vació, ve como su cuerpo cae inerte hacia el frente, al mismo tiempo, que su yo consciente se aleja del piso elevándose,
Regresando a la cabaña de maestro Vene. ¡Crash! ¡Crash! Solo se escucha el crujido de la leña, el sol llevaba varios minutos de haberse ocultado. Liam abre sus ojos, observa que tiene varias agujas de acupuntura en el pecho, y los brazos. Un olor a lavanda llena la habitación. - «¿Dónde estoy? ¿Qué es este lugar?»- Hace un esfuerzo por recordar y viene a su mente el enfrentamiento con el maestro. Trata de levantarse se da cuenta que no puede. Echa un vistazo a los ventanales, observa la figura del hombre, su enigmática mirada concentrada con algo afuera de la cabaña. -Por fin despiertan, ya era hora, ustedes par de holgazanes, se tardaron mucho y en tu caso mocoso. ¿Así quieres ser mi discípulo? - Da un suspiro de frustración. Su tono de voz mostraba un toque de sarcasmo. Una hermosa voz se escucha a pocos metros de Liam. -Usted acepto que
Mientras tanto en la compañía Koyama, Atsushi observa el paisaje a través de los ventanales de la sala donde tuvo la reunión con Kano el día anterior.-Señor el General Ivanov está aquí- Le dice la mujer joven cabello café claro que cubría un poco más de sus hombros, trae una Tablet en las manos.- Carina ¡Por favor! Hazlo pasar- Le dice con un tono de voz normal.Atsushi se acerca despacio hacia los cómodos sillones y espera de pie, al abrirse la puerta entra primero, un hombre alto, moreno claro, ojos negros, cejas tupidas, utiliza uniforme militar con varias insignias que demuestra su grado. Trae una expresión solemne en el rostro.- ¡Buenas tardes! Señor Koyama- Lo saluda con una reverencia. Atsushi contesta de igual forma.-No seas tan formal conmigo, tantos añ
Continuando en la compañía de Koyama.Dos soldados que acompaña al general estaba formados uno a cada lado de la puerta de la sala de esparcimiento. Cuando los hombres salen del salón, caminando uno al lado del otro conversando. Se colocan firmes permitiéndoles el paso.Marcus se encuentra recostado en mostrador de la recepción de ese piso. Platicando con la recepcionista.Al ver que ambos hombres caminan hacia su dirección para intercéptalos.-Buenas noches general- Le dice inclinado la cabeza.- ¡Buenas noches, Marcus!- ¡Señor! Me tome el atrevimiento de coordinar un equipo específico de salud laboral para que se haga cargo de la gestión que usted nos trae- Le dice al general.- ¡Vaya! – Abre bien sus ojos, gira la cabeza hacia Atsushi- Que equ