- ¡Lily! – Pietro corrió escucho el ruido del vidrio al romper.Lily llevaba un vaso de agua en sus manos mientras buscaba a Eva cuando notó la puerta del departamento entreabiertaPietro salió del estudio con el corazón en la garganta, justo para ver cuando Pablo se acercaba a su esposa y la abrazaba.- Tú… - Lily llevo una mano temblorosa hasta el rostro de Pablo – Pa… ¿Pablo?- Sí, cariño, soy yo“Imposible” pensó, regurgitando un montón de emocionesEl hombre que una vez amó hasta el borde de la cordura, el esposo que lloró, el padre que despidió, estaba delante de ella después de cinco años y el abismo entre la vida y la muerte.- Estas… Estás vivo – su voz fue amortiguada por la mano con la que cubría su boca.No podía creer lo que veía- Sí, soy yo LilyChequeó su rostro, su cabello, sus brazos.Era él.Lo tocaba, sentía su respiración, miraba cada detalle de él. Lo abrazó con todas sus fuerzas.Por un segundo, fue la esposa que deseo con todo su ser volver a verlo.Se hundió e
- Secretario Han - Señora Vermont ¿En qué puedo ayudarla?- Señora Loren, por favor- No me atrevería Señora – era muy consciente de lo que su jefe podría hacer si alguien lo desafiaba.Se compadeció de Pablo en la oficina.- Pietro me comentó que podía ponerme en contacto contigo para discutir sobre Cosméticas Loren- Señorita… - titubeo- ¿Sucede algo?- Espero que no – murmuró cuando se escuchó el ruido de un golpe seco a través de la línea.- Lo siento, creí que era mejor llamarlo cuando estuviera en la oficina, no quería molestarlo en su tiempo libre- Estoy en la oficinaCon Lily hablando en su oído y Pietro arremetiendo contra Pablo del otro lado de la puerta vidriada, se dio cuenta de que marido y mujer tenían mucho en común.Y Samantha y Pablo, igual. Ambos terminaban en el suelo cuando querían provocar a Lily y Pietro, estos últimos no dudaban en saltar contra cualquiera que hablara de sus hijas de manera maliciosa.- ¿Está todo bien? Sabes – volvió sobre sus palabras – no
- Matt – Lily lo recibió con una sonrisa, en un delantal azulDespués de salir del departamento de Pietro, Lily se sintió desorientada y eso le molesto de sí misma. No contaba con el contrato entre ellos cuando regresó, pero le había gustado la idea de que alguien la ayudara.Con el correr de los años, los problemas se tornan cada vez más difíciles, o lo encuentran a uno cada vez más cansado. Por un par de días, sintió que Pietro le había quitado la mitad del peso que cargaba en su espalada y la entusiasmó estar más ligera, aunque no lo reconociera. Dejó a Eva y Emma una vez más con Rose y caminó un par de horas hasta que oscureció.- ¿A qué hora llegaste? - Hace una horaMatthew la miraba con el maletín en una mano y la llave en la otra- ¿Estás bien?- Mejor que nunca – mintió - ¿Te molesta que esté aquí?- No – acomodó sus cosas y se acercó a ella – estaba preocupado por ti- ¿Por?- ¿No viste las noticias?- La verdad es que desde que salí del hospital no he podido ni mirar la
- Lily, no quise decir que no puedes gritar – respiró hondo – de hecho, mientras pueda oírte, no me importa si gritas, solo… no quiero más malentendidos entre nosotros- ¿Por qué siempre tienes que decir algo así?- ¿Así cómo? – suspiró- Nada – “Así de sensible” pensó- Lily, lo de hoy con Samantha se ha filtrado a los medios y ha escalado a niveles masivos- Lo vi hace un momento- Aunque pueda lidiar con la información que maneja la prensa y suprimir los artículos en línea, no podemos hacer mucho más- No esperaba que hicieras nada – soltó- Pero podemos usar eso a nuestro favor- ¿De qué hablas?- Los abogados de Vermont han elaborado un plan para lidiar con Samantha y recuperar la dirección de la compañía de tus padres- Según leí, están preparados para demandarme, no ayudarme- Todo es parte del plan- El video me compromete claramente y los titulares les quedan perfectos - El video fue enviado por…- Por tu prometida- No, Lily, fue enviado por Pablo- …- No quería decirte es
- Eva ¿No volveremos a ver a Pietro?- Sí Emma- Pero dijiste que mamá se enojó con él- Pero tienen un contrato- ¿Mamá se dio cuenta de que no estábamos dormidas ayer?Lily conversaba con Rose en la sala mientras las niñas se vestían para salir.- Te dormiste de verdad Emma- Es que era aburrido cerrar los ojos y hacerme le cuenta que estaba dormida- Si te dormiste en serio, es obvio que mamá no se iba a dar cuenta- Pero dijiste que si estábamos dormidas podríamos quedarnos con Pietro- Tenemos que hacer algo más – Eva fruncía los labios en una mueca.- La tía Rose es divertida, pero… quiero un papá- Yo también creí que al fin tendríamos un papá- ¡Cuando Pietro me alzó llegue muy alto!- Y podía alzarnos juntas, aunque ya estemos grandes- Solo mami logra alzarnos así- Tampoco fue igual que Luca, Eva, ¿Te puedo contar algo?- Sí – las niñas se sentaron una frente a otra en la cama de Rose- No me dolió mi pie cuando me caí en la oficina de Pietro, pero quería que me abrace- Lo
- ¡Papá! – Eva y Emma gritaron al unísono y corrieron hacia él.Pietro, que se sostenía del marco de la puerta en uno de los laterales del amplio pasillo delante de ellos, se agachó con el corazón acelerado, anhelando el abrazo de las niñasAmbas se acomodaron contra su pecho y él respiró el aroma del cabello cobrizo de sus hijas.Lily no pudo evitar el nudo en su garganta.Cada año se preparaba mentalmente para explicarles que no tenían un papá, pero nunca se preparó para cuando ellas eligieran una figura paterna.- Señor Vermont – Han se apresuró a su lado, nervioso- Papá, ¿Estás bien? – Eva pregunto con lágrimas desbordando sus ojosCuando vio la manera en que Pietro las abrazaba, inclinado sobre ellas, como si estuviera dispuesto a frenar con su cuerpo todo lo que cayera sobre ellos, y su espalda pudiera soportar el peso de un edificio entero, como si fuera un escudo en el que las niñas cabían a la perfección, Lily no pudo evitar pensar en su propio padre.Bajo las alas de su pad
Lily cerró las piernas alrededor de Pietro y lo escucho soltar un quejido.- ¿Estás bien?Pietro la recostó sobre la cama- Sí - sonrió tratando de tranquilizarla- Nos dijeron que estabas en la enfermeríaPietro dejó besos en la comisura de sus labios, la punta de su nariz y su frente antes de ocupar sus labios sin dejarla continuar- Pietro – trató de esquivarlo, inquieta – déjame verte, quiero checar que estás bien – recordó- …Se deslizó por la línea de su mandíbula, dejando un rastro húmedo por su cuello.- Pietro… - susurró mientras se estremecía.La cercana intimidad que sentía con solo besarla, lo fascinaba, pero quería explorar aún más que solo su boca y lo que había conocido días atrás.Dada su inexperiencia, le agradecía a Robert Vermont por haberlo drogado aquella noche, o nunca habría descubierto que algo como aquello era tan instintivo.Y no se habría animado a llegar tan lejos. Con el pasar de los años, era más difícil aceptar algo que desconocía.Pero cinco años atrá
- No es nada serio – sostuvo las manos de Lily- ¿Qué no es nada serio? ¡Pietro! ¡Tú…! ¿Por qué no me lo dijiste?- Me distraje – movió su cadera y Lily entrecerró los ojos, resistiéndose a la marea en la que Pietro quería hundirla.De esa manera había logrado evitar que ella lo descubriera antes.- No te muevas- Lily, esto duele más que lo de mi abdomen – señalo su erección.Lily estaba perdida.No sabía qué hacer con Pietro- Pero no te muevas – le dijo con ojos suplicantes.- No te alejes- No lo haré – sujetándose de sus hombros, lo beso.Tuvo mucho cuidado de no recostarse sobre su abdomen y cuando se sintió lista, se deslizó sobre con toda la energía que logró reunir.Pero bajo la atenta mirada de Pietro, le era imposible apartar la vista de la sangre en las vendas.Él notaba que ella no disfrutaba del roce entre sus cuerpos igual que antes.- Hay que cambiar las vendas- Las cambiaron hace una hora- Y ya están así – se sentía mal por él.- Lily – Pietro la detuvo – no te fuerc