Mi vida no es la misma desde que me quitaron a mi bebé, se que puedo verla pero no es lo mismo, ya en tres meses terminaré la preparatoria a distancia quiero estudiar una carrera en diseño gráfico; para darle un mejor futuro a mi Emily. Se que Artemis pude darle todo, pero yo me esforzaré. —Angie las chicas y yo iremos a casa de Rose ¿Quieres venir? —«Ángela no se ve bien desde que perdió la custodia de su hija, pensé que ganaría pero ni con los abogados de mi familia, se pudo hacer algo», pensaba Mía aflijida por la tristeza de su hermana. —No te preocupes Mimi tengo tarea y no quiero dejar que se acumule, discúlpame con las demás luego nos vemos.Me despedí de Mimi y fui directo hacia mi bicicleta, pero mi camino fue bloqueado por alguien, me sorprendió mucho pues no era que conociera a esa persona, no tengo nada en su contra pero tampoco me agrada y honestamente yo estoy segura que el sentimiento es mutuo.—¿Qué hace aquí Señora Lombardi? —no respondió esa mujer se acercó sin men
Nota de aurora: las leyes de en esta historia son ficticias. De seguro decir que esa cercanía no le había dolidó sería una vil mentira, ver a su hermano y a la chica que le gusta fue como un puñetazo en la cara, pero que esperaba su atracción era tan obvia. Cerró la puerta con delicadeza, no quería ser mal tercio, pero la tensión llegó cuando al voltearse vió a Gabrielle con la pequeña Selene en brazos, >>se ve tan linda con la niña en brazos, pero ahora, no es capaz de mirarme a la cara y eso me molesta no se porque pero no me gusta, no quiero que me vea así<<. Como si ella le leyera paso de largo sin pronunciar palabra alguna. Bajó al recibidor y allí estaban Luck y Mía, tomó asiento un rato para a charlar con ellos, le alegraba ver a su amigo Luck más desenvuelto y animado con Mía, eran tan distintos y creía que por eso encajaban tan bien. —Helios ¿Puedo hacer una pregunta? —Si claro Papelitos, la que quieras.Mía lo meditó un poco pero debía preguntar, así la tildaran de meti
Nota de aurora: las leyes de en esta historia son ficticias. Hoy era un día muy importante, hoy sería la audiencia de apelación de Ángela. El teléfono comenzó a vibrar el ver el nombre en la pantalla decidí contestar. —Hola Nataniel buenos días. —Buenos días Artemis ¿Estás listo? —empero el castaño al otro lado de la línea. —Si, así es Nataniel. —Respondió el pelinegro decidido. —Artemis creo que deberías pensarlo mejor...—Nat estoy seguro, yo no quería hacer las cosas así y tú lo sabes amigo. —Si bien era su deseo tener a su hija a su lado, no podía pasar encima de Ángela ella era la madre de la niña no iba a valerse de la treta de Sofía para tener a su hija. —Artemis ahora la situación no es igual escucha tengo algo que contarte.—Si tiene que ver con...—Escucha —interrumpió Nataniel a Artemis pues lo que tenía que decir era importante para el pelinegro—, busqué información de la chica, lo hice porque sabes que me gusta estar al tanto de la contraparte, Artemis esa chica no
Fue por un poco de café tenía una fuerte migraña que no tenía ninguna intención de ceder, al contrario sentía que a cada minuto el dolor era más punzante. —Señora Lombardi la muchacha ya está estable, el médico me pidió que le llamara. —Dijo una joven enfermera de una expresión amable, luego de dar su recado la muchacha de blanco se retiró. Dió el último trago a la humeante bebida para luego tirar el vaso al cesto de la basura. El celular comenzó a sonar con insistencia dentro de su bolso pero al ver que se trataba de su representante decidió ignorar la llamada; en momentos así, Brenda no era de mucha ayuda. Entró a la habitación allí estaba el médico revisando la historia medica de Gabrielle. —¿Cómo está? —pregunto la morena tomando la mano de la muchacha pelinegra. —Estable pero aún así frágil —fue la respuesta del médico de cabello canoso—, su embarazo es de cuidado y ella no ha cumplido las indicaciones, sus niveles de hierro son muy bajos. Sofia abrió la boca impresionada,
Si a Helios le pasa algo no me lo perdonaría, me recosté en la pared y me deje caer hasta quedar sentada en el frío piso, Artemis llegó en cuanto antes y trajo a Helios al hospital. —¡Ah porque tenía que ser así de impulsiva y soltarle todo a Helios! —Me lamentaba llorando de frustración.Una mano se posó frente a la mia, ofreciéndome un pañuelo, para limpiar las lágrimas. acepté el gesto educadamente y limpié mis lágrimas. —M...uchas gr...acias.—No hay de que Tranquila, Helios es fuerte.—¿Y usted cómo sabe eso?—pregunté alzando la mirada hacia, la persona que amablemente me prestó su pañuelo. —Querida como no saberlo, si soy su madre. —Dijo la mujer riendo de forma jovial. —¡Madre ha dicho! —exclamaba, sorprendida. La mujer solo asintio, como respuesta a la muchacha —mi nombre es Valentina Lombardi, tú debes ser Ángela, la madre de mi nieta Emily muy linda mi nieta por cierto. —Dijo la mujer con una sonrisa de boca cerrada. No sabía que decir esa señora era la madre de Helios
Nota de autora: este capítulo no está en la línea principal de tiempo de la historia, es un capítulo especial que relata la historia de los padres de la protagonista, Isabel y Daniel. El capítulo tendrá solo dos partes. Era una calurosa tarde de Julio ya estaba de vacaciones en la preparatoria, pero para ella no había vacaciones debía prepararse si quería estudiar ballet en Nueva York. —Isa. —¿Si? —respondió ella sin quitar la vista de su cronograma de clases. —Es cuatro de Julio papá y mamá harán una barbacoa, vendrán los chicos de nuestra escuela y... —Luna sabes que debo prepararme para las audiciones...—¡Isabel solo será un día! —exclamó Luna exasperada alzando sus manos—, por favor Isabel piscina, sol y Chicos lindos solo imaginalo. —Dijo tratando de convencer a Isabel de desconectarse un momento. —Si Arthur te oyera ¿Qué crees que diría? —cuestionó la pelinegra guardando su ropa en la mochila. —Lo de los chicos lo digo por ti Isabel, no por mi además casi no te veo estos
Nota de autora: este capítulo no está en la línea principal de tiempo de la historia, es un capítulo especial que relata la historia de los padres de la protagonista, Isabel y Daniel. El capítulo tendrá solo dos partes.Despertó en la habitación de Luna, el lugar estaba a oscuras, lo único que iluminaba la habitación eran los últimos rayos de sol del día. Llevó sus manos a su frente palpando el golpe en su sien. —Que bueno que ya estás despierta —Luna entró a la habitación seguida de su novio Arthur que traía una bandeja en sus manos—, te diste un buen golpe...—Pero tienes la cabeza muy dura solo te hicieron una pequeña sutura, te golpeaste con los escalones de la piscina y como no estaba totalmente llena bueno el resto es historia... —Arthur guardó silencio al ver la cara de pocos amigos de su expresiva novia. —Gracias chicos ya debo irme a casa mis padres...—No llamamos a tus padres no regresarán está noche, el equipo de Sami
Llegó a su departamento hecha una furia, azotó la puerta consumida en su furia sacó el celular de su bolso marcó a Artemis en repetidas ocasiones hasta que dejó de insistir. —Pero esto no se va a quedar así Artemis, te juro que está humillación te va a pesar. —Declaró molesta la rubia tirando el teléfono en el largo sofá de cuero negro. —Parece que alguien no tuvo las buenas noches que esperaba —Susurro una masculina voz rasposa en el oído de Tabita—, dime muñeca ¿Acaso Lombardi no te dejó satisfecha? O aún peor ¿Las cosas no salieron como tú esperabas y el junior rico te mandó a volar? —cuestionó el pelirrojo con mofa rozando sus labios en la tersa piel del cuello de la modelo furiosa. —¿Qué haces aquí? —preguntó Tabita omitiendo la ironía de su compañero. —Bueno linda tenía unas ansias locas de ti, imaginé que el seco de Lombardi no iba a saber cómo tratarte y...—Y asumo estás aquí escondiendote de alguien verdad, asumo volviste a