Ella suspiró, y le dió un suave beso, sin ser apasionado, quería ser prudente, aunque sus encuentros habían sido muy intensos.

Ella sugirió que quería visitar un tiempo a su madre, viajaría al día siguiente, pero él tendría que esperar un poco mientras ella ordenaba sus emociones. Calvin llegó al consorcio el lunes con poco ánimo, el tener a Eleanor lejos, no le daba mucha energía a su cuerpo y la actitud que ella tenía no mejoraba. Ya quería que todos se estuvieran al tanto de que él y ella estaban enamorados, ya estaba cansado de ocultar lo que sentía. Nada le importaba, solo había accedido porque se lo había pedido ella. Solo quería que llegara el tiempo para andar libre, amarla sin temores, ni tabúes.

Eleanor Hawkins, a pesar de ser una mujer segura en los negocios y las finanzas, en el amor era el ser más inseguro y lleno de tabúes. Pensaba en lo que podrían hablar de ella, si la veían formalizando una relación con un hombre más joven. Eso tenía que terminar de una vez por