Brittany le pareció que estaba hablando en una lengua demoníaca o alienígena, ya que le parecia irreal la petición de su ex-crush. Pero al verlo con las cejas juntas en una sola linea, realmente el sujeto del planeta de los generados hablaba enserio, se limpió las manos con la servilleta que le habia dado el de el puesto de comida, puso los ojos en blanco y nego, la idea era más que descabellada y ella no estaba preparada para tener intimidad con una personas que sabia más posiciones anatómica que un médico.

— Bueno después de un análisis de cinco segundo, he llegado a la maravillosa conclusión de que has comido algún hongo alucinógeno en tu rebanada de pizza, asi que te invitó a que busques ayuda a un experto y que tengas una linda noche. — Brittany se dio la vuelta cuando escuchó como Jack silvaba con malicia hacia el aire.

— ¿Qué nombre deberia ponerle a esta foto cuando lo suba?. — Brittany se dio la vuelta y lo miró con los ojos bien abierto, esta empezó a pelear con el pero  Jack era demasiado alto. — Estaría si pongo "La fiona de la comida", en el día como lechuga como conejo, y en la noche soy un ogro que come carne humana, seria algo canibal pero algo demasiado bueno para destruir tú carrera y quedes como una vil mentirosa. — Jack sonrió y miró con malicia la respiración errática de la escritora. — ¿Y cuál es tú respuesta?.

Brittany lo observó fijamente y fue nuevamente al puesto de hot-dog y compró otro, regresó hacia donde estaba el y tomó su teléfono sorprendiendo al hombre, esta mordió el pan y se tomó la foto para luego entregarselo nuevamente. Jack se sorprendió por su acción.

— ¿Acaso no te importa saber que tengo más prueba para arruinar tu carrera?. — Preguntó con curiosidad, Brittany negó.

— Prefiero estar en la calle antes de compartir la misma cama contigo, podras tener conocimientos en cosas sexuales, pero aún no sabes como pedir las cosas o tratar a una mujer sigues siendo la misma basura que como cuando estabamos en.... — Brittany calló de golpe, no queria que el descubriera que habia sido aquella gordita a la que habia humillado. — Digo me imagino, pública la foto y después no veremos en los tribunales. — Brittany se dio la vuelta dejándolo con el celular en la mano.

(.........)

Mentiria Brittany si diría que habia dormido estaba cansada y sus ojeras se lo recordaba una y otra vez en el espejo de su baño, no tenia un buen aspecto para dar una charla y todo por el estúpido de la pichula de Jack y sus amenzas acerca de la foto. Habia pasado toda la madrugada revisando sus perfiles y hasta el momento no habia subido alguna foto de ella, no sabia si estaba jugando con su psiquis pero queria que de una buena vez hiciera lo que tenia que hacer para terminar con esa tortura. Escuchó la puerta de su apartamento abrirse y vio con ojos cansados a Carlos, este se asustó al ver su estado tan deplorable.

— ¿Pero que diablos paso contigo?. — Preguntó curioso al verla poner sal a su café. — Apenas ayer te mirabas radiante como un diamente, y hoy pareces roca, ¿Qué paso linda?.

— Mis ojeras tienen nombre y apellido y se llama:Jack Lovato. "La sensación de la literatura erótica". — Hizo comillas con sus manos mientras dejaba la taza de café con sal en el lavabo. — Ya se que tú cara es de sorpresa y que tienes más preguntas que un policía. Y si mi amor, es el mismo Jack que hizo que me convirtiera en Tiny, ahora el maldito es una gran escritor que por cierto me sorprende, porque tenia pésima ortografía y redacción y todo el mundo en el escuela sabia que pasaba los exámenes porque se follaba a la maestra. — Suspiró cansada. — Y sabes lo que más me da rabia que el maldito tiene talento, ayer me puse a leer su libro y terminé llorando, ¿Cómo diablos pudo crear a un hombre tan perfecto cuando el es una basura?. Y para cerrar con broche de oro de el porque me veo del asco, después de que me humilló en ese programa y soy el tema de que hablar en los programas de espectáculo, ayer me lo encontré mientras comía un hot-dog.

— Pero tú no debes comer eso Brittany, llevabas años que no probabas un bocado de comida chatarra.

— ¡Lo sé!. — Respondió estresada. — Ayer me sentía ahogada, y me dio ansiedad asi que sali a la calle y compre eso, pensé en comerlo tranquilo cuando el muy condenado me tomó una foto y me amenazó con arruinar mi carrera, si lo ayudaba con su nuevo libro.

Carlos la abrazó emocionado al saber que no todo estaba perdido en su carrera.

— ¡Enhorabuena linda!. — Exclamó contento. — Eso quiere decir que no es tan malo a como lo estas contando, porque puede llegar a un trato consensuado entre ambos y todo este asunto queda en el pasado y luego nos vamos a reir, ¿Y cuál fue la propuesta?.

— Me pidio que nos acostaramos ya que no se siente con inspiración, quiere que el de alguna forma sea su musa, cosa que no acepte porque prefieron mil veces comer brócoli antes de estar con él.

Carlos se quedo en silencio unos segundos y después sonrió con malicia.

 — Quizás el no estaba hablando de esa manera tan "Íntima contigo". — Hizo comillas mientras se dirigía a la habitación de Brittany y buscaba un atuendo para su charla. — Jack es un símbolo sexual, y eso seria bueno asi aprendes un poco de él, además no siempre deseaste volver a verlo para cumplir tú ridícula venganza por lo que te habia hecho años atrás, ahora es tu momento de brillar. — Carlos tomó su mentón y lo levantó con suavidad. — Ya no eres la Brittany de antes, aquella que lloraba por cada palabra cruel, estaba vez es diferente.

Brittany se dio la vuelta y lo miró con curiosidad.

— Tú nunca me has apoyado las veces que he mencionado acerca de mi resentimiento y odio hacia él, ¿Porqué ahora si?.

— Después te diré el porque ahora ve a alistarte y te espero en media hora para ir a la charla. — Carlos esbozó una sonrisa a Brittany mientras ella se encerraba en el baño, en eso el miró la foto que tenia de Jack cuando aun eran unos adolescentes inmaduro. — Yo solo deseo que seas feliz. — Susurro.

(......)

Desde que era pequeña habia sido una persona tímida, siendo la menor de tres hermanos varones los trillizos rubios: Rod, Tom, Bob. este siempre fueron más enérgicos que ella hasta que ella llegó a la universidad y empezó a exponer sola y valerse por si misma, y cuando se refugió en la escritura quiso gritar y compartir toda su experencia para que su voz fuera escuchada no solo en el papel, sino fuera de ella y habia logrado su cometido. Amaba la manera en que los espectadores la escuchaban con atención sus vivencias, y ellos se tambien la hacian partes de sus luchas y logros hasta conseguir sus metas. Esta era la décima quinta charla que impartía desde que se habia convertido en escritora, siempre relataba como las palabras duras de las personas en lugar de hacerla sentir mal la habia vuelto en una persona más fuerte o al menos eso queria creer y dejarlo bien en claro en su mente. En cierta parte era verdad, luego de las palabras de Jack y del rechazó de su amor y de algunas personas por su aparencia, se dio cuenta de que las personas algunas veces juzgan al libro por su oportunidad y olvidan que también tienen sentimientos.

Dio su última conferencia y empezó a firmar algunos libros cuando se acerco una señora de algunos setenta cinco años acompañada de su nieto. Brittany se levantó de su asiento y abrazó a la señora quien lloró entre sus brazos.

— Muchas gracias madre por haber venido me siento tan feliz de tenerla aqui, y espero que lo haya disfrutado mucho. — Sonrió amablemente.

— ¡Me encanta tú forma de ser!. — Respondió alegre. — Te sigo desde tus inicios y amo que cada día vas creciendo pero siento que detrás de tus palabras se esconde un pasado triste. — La abuelita se acercó a ella y le tocó la mano izquierda. — Veo que no estas casada, ¿Te gustaria casarte con mi nieto?, el también es famoso asi que por el dinero no te preocupes.

— ¡Mita Cony!. — Exclamó apenado el nieto. 

Brittany le pareció tierna la imagen y miró la cara del chico sentia que lo conocía de alguna parte.

— ¿Tú eres el vocalista de Baztard?. — Le preguntó Brittany. — Yo te conoci el día que cantaste en el programa de Gabriel.

— Si, lamento mucho lo de tu entrevista, Jack siempre tiene la costumbre de arruinar las cosas, ya esta en el ADN de su familia.

Su respuesta le pareció raro y quiso preguntarle si lo conocia cuando de nuevo la abuelita Cony juntos las manos de ambos y hizo que entrelazaran sus manos y los ato con una cinta roja que habia en la mesa como adorno.

— Ustedes estan destinados para estar juntos. — Habló con voz dulce.

Ambos se vieron sorprendido por la acción de la abuela y el intento quitarse la cuerda, Brittany igual solo que con un poco más de calma, la cinta se soltó sin romperse, la señora sonrió y tomó la mano de su nieto.

— Está será la primera de muchas veces que ustedes se van a ver. — Tomó a su nieto y se fue, Brittany miró la cinta en el suelo y la recogió para luego guardarlo en la parte de atrás de su pantalón 

Después de autografiar unos libros más y saludar algunas personas a las que le habia dado la charla, pensó en las palabras de Carlos ahora que habia vuelto a ver Jack tenia que tenerlo a sus pies, ahora le tocaba a el llorar y suplicar por ella. Llegó al apartamento de Jack proporcionado por los contactos de Carlos, golpeó la puerta dos veces hasta que escucho del otro lado de la puerta el sonido de algo pesado caerse.

— Que bueno que ya vino mis pinceles que pedi por A****n para mi nuevo proyecto y... — Jack se quedó en silencio cuando la vio, y sonrió con malicia. — Vaya veo que la propuesta fue más rápido de lo que pensé. ¿Y bien serás mi musa?.

— El servicio de A****n ha entregado su musa en perfecta condiciones.

Jack la tomó de la cintura y la apego a su cuerpo, el rostro de Brittany se sonrojó ante la cercanía.

— Tus deseos son ordenes.

"Algunas no hay que forzar al destino".