Cambell se sentó más atrás de donde se encontraban las chicas, deseaba darles espacio para que pudieran hablar sin sentirse incómodas por su presencia.El hombre más enamorado no podía estar de Thara, tenían una hermosa familia junto a su hijo, agradecía el día en el que Dios o el destino puso en su camino a la morena, por eso no entendía qué era lo que estaba pasando con Ahmed, él y Aisha eran una pareja perfecta.Ahmed estaba sentado un poco más atrás junto a su amigo Kareem, sentía incomodidad por la manera en la que su amigo observaba a Aisha, no la perdía de vista, incluso eligió sentarse en un lugar desde donde la veía.—Ten cuidado con mujeres como esa, amigo, irá detrás de tu dinero sin dudarlo, y sé que te aceptaría de inmediato si lo propusieras, serías el padre ideal para sus hijos.—Sé que no estuvimos en contacto durante muchos años, pero escuché noticias sobre ti, que te habías casado con una norteamericana, y que tenías tres hermosos hijos.—No son mis hijos, esa mujer
Cambell decidió no decir a Aisha que Ahmed había entrado a su tienda por la noche, no deseaba ilusionarla, Ahmed rehuyó de la chica los dos días siguientes, pero no podía evitar sentirse furioso cada vez que Kareem se acercaba a ella con cualquier pretexto.Deseaba que se alejara, pero no lo iba a decir, no quería parecer celoso, Thara había notado el interés de Kareem por Aisha, así que al cubrir al bus para regresar a la ciudad, se sentó junto a Campbell, con la esperanza de que el árabe se sentara junto a Aisha.Su plan funcionó a la perfección, cuando Kareem y Ahmed subieron al autobús, el primero notó enseguida que Aisha se encontraba sola, así que ignorando a su amigo, se sentó junto a ella.—Hola, espero que no te moleste que te haga compañía durante el viaje.—No soy quién para decirle donde debe sentarse. —Aisha le contestó de manera fría, eso provocó en Kareem una sonrisa, le gustaban los retos, y más si el reto tenía un rostro tan bello.Aisha se sintió incómoda durante el
Ahmed estiró los brazos y sostuvo al pequeño niñ* para alzarlo, empezó a dar vueltas por la oficina, intentaba encontrar una buena manera de cambiar el pañal, en ese momento recordó a Cambell, había escuchado que tenía un hijo, entonces indudablemente sabía cambiar pañales.Tomó el bolso que había dejado su madre con las cosas del niñ*, después de pedirle a los gemelos que lo esperaran en la oficina, salió de prisa, Mohamed y Fariyeh empezaron a reír en cuanto perdieron a su padre de vista.—¿Has visto eso? Papá ha cambiado el pañal de nuestro hermano muchas veces, pero parece que ha olvidado cómo hacerlo, es que me hubiera gustado tomar una fotografía de su rostro y mostrársela a mamá, ja, ja, ja. —Lo sé, hermana, papá es tonto, ja, ja, ja. —Mohamed se daba cuenta de lo que pasaba a pesar de su corta edad, había preguntado a Aisha si su padre ya no los quería.—Has dicho una grosería, también pondrás un dólar en el frasco de malas palabras.—Tonto no es mala palabra. —Contestó de ma
Ahmed apretó los puños con rabia, sus ojos lanzaban destellos de furia mientras observaba la escena en la otra mesa. ¿Cómo se atrevía Aisha a comportarse de esa manera, coqueteando con su amigo, mientras él se veía forzado a lidiar con los niños y aprender a cambiar pañales como si fuera un novato.—¿Papá, por qué te pones tan rojo? —preguntó Mohamed con una sonrisa traviesa, notando la tensión en el rostro de su padre,Ahmed se obligó a relajarse y sonrió forzadamente, no quería que notaran su enojo, Cambell, por su parte, decidió intervenir y hacer la situación aún más divertida.—Oh, Mohamed, papá está tan rojo porque acaba de recibir un premio por ser el papá más increíble del mundo al cambiar el pañal de tu hermano, ¿No es así, Ahmed? —dijo Cambell con una mirada traviesa.Ahmed bufó, pero asintió con sarcasmo, no podía evitar sentir rechazo, esa mujer había intentado separarlo de Lyna, y no pensaba pasarlo por alto.—Sí, eso debe ser, tengo un talento natural para cambiar pañale
Cuando Ahmed se marchó, el ambiente en torno a la mesa se sentía tenso y cargado de emociones negativas, Fariyeh sollozaba inconsolablemente en brazos de su madre, mientras Mohamed miraba a su alrededor con confusión y tristeza, Cambell, por su parte, intentaba calmar la situación.—Tranquilos, chicos, todo estará bien, vamos a terminar de cenar tratemos de olvidar el mal rato, ¿De acuerdo? —dijo Cambell en un intento de mitigar la tensión.Aisha asintió, mientras intentaba contener las lágrimas. Kareem volteó a verla, se sentía molesto por la manera en la que Ahmed la había tratado, no quería intervenir en la pelea de la pareja, pero sabía que su amigo estaba actuando de manera incorrecta.Después de una cena incómoda en la que apenas se cruzaron palabras, Aisha decidió llevar a los niños a casa, Mohamed y Fariyeh seguían visiblemente afectados por el comportamiento de su padre.Cuando llegaron a casa, Aisha llevó a sus hijos a su habitación y los acostó, intentó consolar a Fariyeh,
Cambell habló con Thara para que pidiera a Mía que les permitiera llevar a sus hijos por un helado, así podrían pasar tiempo con su hijo.Mía aceptó enseguida, a sus hijos les serviría para distraerse, no tenía idea de lo que Campbell pensaba hacer, por la tarde, el rubio y su familia pasaron por los pequeños.—No te preocupes por ellos, amiga, sabes que estarán seguros con nosotros, además nanny vendrá, así me ayudará a cuidarlos.—Lo sé, amiga, está bien que nana vaya con ustedes, porque créeme, estos niñ*s tienen energía de sobra.Cambell pensó que tendría que ingeniárselas para tomar las muestras de cabello de los pequeños sin que la nana se diera cuenta, después de todo sí lo viera tomando mechones de cabello, podría comentarlo a Mía, y ella sabría de qué se trataba aquello de inmediato.No fue difícil que consiguiera las muestras, las colocó dentro de unas pequeñas bolsas que ya tenía preparadas con el nombre de cada uno de los niñ*s, si algo le sobraba al rubio era ingenio para
Ahmed se le quedó viendo fijamente a Mía, ella hizo el intentó de alejarse, pero él apretó aún más su brazo.—Me estás lastimando, suéltame ahora mismo.—Primero vas a escucharme, puedes hacer de tu vida lo que desees, pero después de nuestro divorcio, con este tipo de comportamiento me humillas.—Por lo visto eso es lo único que te importa, no estoy dispuesta a sacrificarme porque tu te sientas bien, en el pasado sacrifique demasiado para poder estar a tu lado, así que hazte a un lado que seguiré bailando.—Aisha, no me retes, mira que puedo ser muy despiadado. —Siseó el árabe, ni él mismo sabía si estaba molesto porque ella se comportara liberalmente, o porque la había visto disfrutar en compañía de Kareem.—¿Aisha? No Ahmed, Aisha quedó en el pasado, así como lo que hubo entre nosotros, así que desde ahora en adelante te dirigirás a mí como Mía, que es mi verdadero nombre.Ahmed soltó el brazo de la chica, Mía se alejó de inmediato seguida por la profunda mirada del árabe, él no po
Mía y Ahmed no se vieron en los días siguientes, el día de la reunión las cosas no habían salido muy bien entre ellos, después de que Kareem saliera de la sala de reuniones, Ahmed la increpó sobre su comportamiento.Mía se dio cuenta de que era realmente inútil discutir con él, ya era hora de que le pusiera las cosas claras, quería que le entregará lo más rápido posible los documentos del divorcio, ella los firmaría enseguida para que él no volviera a atravesarse en su camino, ni a meterse en sus decisiones.Ahmed se sentía desesperado, esa fuerte sensación dentro de su pecho no lo dejaba en paz ni un solo segundo.El día del evento de la compañía llegó rápidamente, una lujosa limusina en color negr* llegó al evento, el chofer abrió la puerta, enseguida descendió un atractivo hombre, las cámaras de los reporteros se volcaron hacia él, se veía elegante y distinguido enfundado en ese traje.El hombre volteó hacia los lados, después de ajustar su corbata, volteó hacia el interior de la l