Narra Charlotte.La mujer de nariz larga me dejó en una habitación muy hermosa, la verdad es que me gustan los lugares bonitos y este aposento lo es, así que me dediqué a contemplar el espacio en el que viviré a medida que me quitaba el velo de la cabeza, destapando mi rostro y al fin pude respirar con normalidad, no estoy acostumbrada a esto y ya no pienso volver a utilizarlo. Mirando por la ventana recordé que dentro de mi nueva vida ya no estará mi madre y aunque hace apenas unos minutos que dejé de verla ya la extraño.—Mamita, como lo haré sin ti a mi lado, no sabía que estás personas fueran tan diferentes, con razón me pediste pensarlo mejor— dije hablándole al aire, sé que esto es decisión propia; sin embargo, cuesta aceptarlo, estoy dejando atrás una vida completa, llena de libertad para adaptarme a cumplir los caprichos de un hombre con el ego más grande que el Titanic.Di un pequeño salto de impresión cuando escuché el so
Narra Karim.Cuando al fin me levanté decidido ir hacia ella, amplifique mis sentidos y escuché la conversación que ella tiene con Shacia y pongo atención a su diálogo poco amigable donde ella le dice que no le interesa ser mi esposa y que desea darle su lugar a mi lado a otra mujer que si le sea de interés.—No la tomaré por la fuerza, — le dije a Mohamed con una sentencia clara.—Lo sé, pero hay maneras de uno convencer a una mujer, vamos Karim, sabes cómo, antes se te daba perfectamente bien, ve, ella cederá—me pide uniendo sus dos manos.—Ve a la manada, ahora mismo ya no me apetece ir con la humana, pero en un momento pueda que le haga una visita— le digo con el plan de calmarlo, puesto que no quiero ni tengo deseos de ir a rogarle a esa rebelde.#Puedes doblegarla, a que le temes# me incita mi lobo.Mohamed se despidió de mí y junto a Adub se fueron a la manada, mientras que yo decidí ir a mi recámara a ponerme algo cómod
Narrador.Karim hizo que sus tres esposas y la jefa de servicio de la casa se reunieran en la sala de estar y para su sorpresa, Charlotte también llegó a la sala y en el momento que abrió la boca para decirle que le alegraba verla ahí, su mirada la recorrió completa, notando que Charlotte tenía puesto un vestido con un gran escote, corto y unas zapatillas de tacones.—Charlotte sube a cambiarte esa ropa— le ordenó y ella poco caso le puso, si no que se acomodó en el sofá.—Tenemos reunión familiar y no me han invitado que descorteses, son ustedes— comentó burlona.—No me evadas, odio que se me ignore, sube a cambiarte ese tipo de vestuario— la voz de Karim sonaba gutural y ella se señaló a sí misma.—¿Qué te ha hecho mi vestido? — respondió con sorna provocando que Karim soltara un gruñido que hizo temblar a las otras tres esposas menos a ella.—Mira, no me hagas perder la paciencia—, las demás mujeres la miraban con horror, no cali
Narrador.Charlotte seguía empeñada en salir, pero Farzana no se lo permitió, aunque Charlotte quiso investigar el motivo de cómo Karim podría saber si ella salía de la casa, Farzana la ignoró, no podía decirle que son lobos y que saben cuándo alguien miente y más al alfa de alfas.Cuando terminaron de desayunar, Charlotte se estaba levantando de su lugar cuando escuchó a las demás esposas decir.—Bienvenida suegra—, cuando ella se giró para ver de quién se trataba, puesto que no vio a ninguna suegra en la ceremonia. —Muy amables mis nueras—, Charlotte notó, la mujer que se ve bastante joven para ser la madre de Karim, es una mujer un poco más adulta que ella, pero bonita y con un cuerpo que se nota debajo de tantas telas que es voluminoso.—Tú—, la señaló la loba, — ¿por qué estás vestida así?, ¿eres la cuarta esposa?—¿Tengo la obligación de responder? — le contestó Charlotte con una pregunta, pues no le gustaba la form
Narrador. Luego de que Charlotte se había pasado el día, encerrada en su dormitorio para no tener que lidiar con las locas y ahora una mujer que quería ser llamada suegra. Decidió cambiarse, con algo más cómodo, se puso un short de tela Jean ajustado que se adhería a sus caderas y redondeaba más sus nalgas y junto a este una blusa strapless dejando más expuesta su piel, que antes. En sus pies colocó una sandalia bajita y ató su pelo en una cola alta pero algo floja, que le daba ese toque de adolescente, dejando la piel de su cuello libre al recoger su larga melena. —Señora Charlotte, la cena está lista— le informó Farzana dando dos toques en la puerta y Charlotte le abrió cargando un libro en una mano y un móvil en otra, con unos auriculares puestos en los oídos. Farzana negó porque Charlotte no parecía entender que no debía exhibir tanta piel, aunque a ella no le causa impresión ni le horroriza, porque en la manada viste li
Narra Karim.La batalla no dura mucho, a pesar de que Moran es rápido y feroz; Zilo lo, es más, y pronto tenemos a mi hermano tendido en el suelo con su cabeza bajo nuestras patas delanteras, exigiendo una sumisión que él se niega a hacer. No comprendo por qué me enfrenta si sabe que no podrá contra mí, incluso no estando en mi mejor momento, hay seres que se enfrenten a mí. No es altanería, sino el poder que la madre luna me concedió. Me he batido a duelo las suficientes veces como para conocer mi fuerza. Si algo bueno tiene todo esto es que al menos pude castigar un poco a Kasul y de cierto modo me siento más tranquilo, desde que asesinó a Mirza no había podido encontrarlo para hacerle pagar. He ventilado algo de tensión, pero la sensación de perdida sigue ahí.El recuerdo de mi luna vuelve a mi mente y cuando lo quiero volver a enfrentar se escabulle y se va; no lo sigo, en realidad no vale la pena hacerlo si de todos modos no lo puedo
Narra Karim. Quería poseerla, y sabía que no se negaría si la tomaba de la cintura con fuerza y la volvía a besar, pues pude sentir el dulce aroma de su excitación crecer a mil; ella es de fuego y la deseé más allá del mero hecho de hacer valer mis derechos de esposo y de mi deber de alfa rey de mi manada y de las demás, la deseé como nunca antes había deseado a una mujer. Eso me asustó, porque ese deseo solo pertenecía a mi luna, no puede ser de más nadie y ahora incluso por ella lo siento más fuerte y no está bien. Obviamente, se debe a mi enfrentamiento con mi hermano, pero como vengo de castigarlo a medias porque nunca podré castigar definitivamente al asesino de mi luna y luego mancillar su memoria disfrutando como nunca de otra mujer, esto está fuera de control, mi vida ordenada llegó a su fin el día que esa mujer entró en ella cambiando tantas cosas como hasta mi temple de lobo alfa que no aceptaba que nadie le llevara la contra
Narra Charlotte.Aún mis manos temblaban, y no es que esté asustada, -claro que no-, es que me cuesta mucho comprender cómo un hombre que se muestra tan caliente pasa a ser un bloque de hielo total en cuestión de segundos y siento temor a caer un día, entregarme a él y luego volver a mi realidad siendo la mujer que tiene que compartir su cama con tres mujeres más y esperar a que mi esposo mandón tenga deseo de mí.«Yo acepte esto, y tengo que aceptar que tal vez por más que niegue y no quiera, este seguirá siendo mi destino»Me senté sobre la cama, con la respiración agitada aún, y me toqué los labios, sintiendo sobre ellos un pequeño hormigueo, y no sé en qué momento cerré los ojos reviviendo el calor de su beso.Me ruborizo tanto que siento mi piel arder de la vergüenza. No sé si será eso que llaman el reloj biológico, puesto que cada molécula de mi cuerpo lo exige a gritos, como si muriera por sus caricias y de súbito mi apetito sexual se