—puedo aclarar todas tus dudas Amelie, solo confía en mi —dijo Leroy soltandome de repente.
Suspire aliviada mientras miraba toda la habitación, era amplia con una pequeña biblioteca al lado, seguro tiene libros interesantes.
—necesito ver a Jack, saber como está —dije débilmente.
La mirada de Leroy se torno fría pero también pude captar cierta decepción en sus ojos.
—no podras salir de aquí Amelie, te mantendremos al tanto de Jack —dijo lo último con amargura.
—¿Porque me protegen tanto? ¿Quién es Alek? —había escuchado su nombre —un hombre del cual jamás tienes que confiar, Amelie tus padres fueron poderosos lobos con habilidades excepcionales y tu eres quizás aún más fuertes que ellos, Alek no dudará en tratar de usarte para conseguir lo que quiere —dijo Leroy mirándome serio.Yo mordí mis labios en respuestas y me pregunté que clases de habilidades podría poseer.
—¿que son mates? ¿Y como me convertí en hombre lobo? —pregunté curiosa.
Leroy sonrió con malicia y miro a través de la ventana pensativo.
—todo hombre lobo tiene un mate, una persona unida ala otra, cuando la encuentras pasas con ella toda la vida, sientes una conexión especial, siento deseos de proteger a tu pareja y con respecto a lo de convertirte en mujer lobo lo haces cuando es necesario, sientes el peligro y por instinto tu loba toma el control, las primeras veces es muy doloroso pero te acostumbraras —Leroy me dedico una mirada maliciosa mientras se acercaba a mi nuevamente.
Yo me tense al instante y el solo río ante mí reacción.
—te e buscado por décadas y alfin te encontré, no pienso dejarte ir —susurro el con voz seductora.
—¿y si me negara a ser pareja contigo? —dije de golpe.Leroy tenso su mandíbula y apretó sus manos conteniendo sus deseos de hacer daño.
—no puedes, estarás conmigo aun si tengo que obligarte —murmuró el de mala gana mientras caminaba hacia su escritorio.
—ahora vete a tu habitación —dijo el molesto.Yo me gire y salí de aquella habitación con un nudo en el estómago por las palabras de Leroy, ¿de verdad lo haría? Claro que lo haría, tiene pinta de un hombre loco y obsesivo.
—sigame señorita Blanc —dijo una sirvienta con una sonrisa en sus labios.
Yo la seguí mientras admiraba aquella mansión, las paredes eran color café oscuro con decoraciones color blancas y muebles del mismo color.
Subimos al segundo piso y caminamos por un amplio pasillo que parecía no tener fin, varias personas me miraban extrañadas de verme en aquel lugar y un chico rubio con ojos color azul me sonrió y guiño el ojo al verme, yo me sonroje en respuesta y desvíe la mirada.
—aquí esta su habitación, el señor Leroy tiene normas y reglas que usted conocerá más adelante, por el momento puede descansar un poco —dijo la sirvienta abriendo la puerta de mi habitación.
Me adentre en ella y me deje caer en la cama pensando en como estaría Jack, ¿estará bien? No podría vivir si le llegara a pasar algo.
—esta mejorando —dice Esmee tratando de animarme.
—¿como lo sabes? —pregunte esperanzada.—su lobo me lo a dicho, es un chico bastante fuerte —dice Esmee con cierto orgullo. —¿puedo hablar con el? —pregunto curiosa. —claro, Ivonne, Susan y Jack son tu manada y puedes comunicarte con ellos a través de la conexión, solo diles lo que quieres y piensa que el mensaje solo es para ellos —responde Esmee.Mordí mis labios nerviosa y respire profundamente mientras aclaraba mi mente.
—¿Jack estas bien? —pregunté preocupaba.
—lo estoy, veo que as aprendido a comunicarte con nosotros —dice el divertido. —así parece, esto me parece mentira Jack —digo dolida. —lo siento pequeña, pero no podemos cambiar nuestra naturaleza —dice el en susurro. —hablamos más tarde, cuídate y no confíes en nadie —dijo el con melancolía.Me levante y mire con atención a las personas que estaban frente a la mansión, protegiendo su lugar y yo me encontraba aquí solo observando.
Sentia rabia, dolor e impotencia, tenía deseos de llorar amargamente pues al parecer todas las personas a mi alrededor parecian ser... Cobardes como para decirme la verdad, ¡soy una mujer lobo! Ni en mis más remotos pensamientos paso en mi mente ser una mujer lobo.
—es lo querés y no puedes cambiarlo —dijo mi loba duramente.
Y eso es lo que más me aterra.
Me levante con un vacío en mi interior al ver que todo esto era real que no era una pesadilla, y que de ahora en adelante esta sería mi vida.—es hora de comer señorita Blanc, el señor Leroy ordena que baje en 25 minutos —dice la sirvienta con voz dulce mientras toca la puerta.—enseguida bajo —respondo.Bufé enfadada mientras me metia al baño para ducharme rápidamente, ¿Porque presiento que Leroy será un dolor de cabeza? Su mirada es Fría y distante como si temiera saber lo que está pensando en realidad, su aspecto es de un hombre de poca paciencia, obsesivo y compulsivo además de controlador.Salgo del baño y escu
Las personas de esta manada resultaron ser amables conmigo, es mi cuarto día en este lugar y Leroy no me a dirigido la palabra lo cual agradezco, aun pienso sobre lo que Dax me a dicho y es muy tentador la idea de rechazarlo.—hola Amelie, ¿quieres venir a entrenar? —pregunto Dax sonrisa juguetona. —supongo que estaria bien —dije nerviosa.Caminamos en dirección al patio trasero y ahí estaban todos los integrantes de la manada.—¡Hola Amelie! Ven será divertido ver lo que tienes —dijo Josh.El es alto, de tez morena, ojos color verde y cabello color caoba, todos aquí son muy fornidos, lo
¿Que debía hacer? ¿Obedecer a lo que Leroy me dijera? Siempre me gustó obedecer las reglas pero ahora... ¿Que pasaba conmigo?—buenos días Amelie —Leroy entro a mi habitación y yo cubrí mi cuerpo nerviosa pues hace 2 minutos había salido de la ducha.Mis mejillas se sonrojaron sin poder evitarlo.—¿no sabes tocar? Estoy por cambiarme —dije enfadada. —no necesito pedir permiso para entrar, eres mía —dijo en tono posesivo.Desde hace 2 días Leroy no me dirige la palabra y ahora parece como si nada hubiera pasado. Leroy permitió que mi familia se quedara conmigo un par de días, pues tienen cosas que atender, ¿serán sobre mi?—¿Leroy tu mate? Vaya eso si no me lo esperaba —dijo Ivonne con una sonrisa pícara.—no me pongas esa cara, el es un idiota —dije entre dientes.Era cierto, siempre quise tener una pareja tierna y amable, Leroy era todo lo contrario a lo que yo esperaba.—créeme lose, pero si Leroy es tu mate con más razón estarás a salvo en este lugar, ¡veras Amelie! Todos los alfa de las manadas suelen ser mates muy sobreprotectores y posesivos, se que no es tu estilo pero Leroy seria tu mejor opción para estar a salvo &mCapítulo 9
—¿como estas cariño? —pregunto mi madre con una sonrisa.—estoy bien mamá —dije con una débil sonrisa.Aún sentía nostalgia por mi antigua vida pero ya no podía volver el tiempo atrás.—alegrate, mejoraste tu vínculo con nuestro mate y eso te hace feliz —dijo Esmee alegre.—lose, me causa felicidad —dije apenada.Era cierto, Leroy alfin había dicho sus sentimientos hacia mí y ahora podía estar segura que me quería.
Abrí mis ojos poco a poco mientras mi cerebro reaccionaba a lo que estaba pasando.—tardaste mucho en despertar —me levante de golpe al escuchar esa voz, pero caí torpemente al suelo pues sentía mis piernas muy débiles. —ten cuidado, aún estas muy débil —dijo esa voz de manera amable.examine el lugar donde me encontraba, era un cuarto vacío y no había mucha luz, el chico estaba cerca de la puerta, era el mismo chico misterioso que me atacó cuando estaba con Leroy... O no.—¡¿donde esta Leroy?! —pregunte asustada. —quiz&aac
Aferrarse al pasado no servía de nada, ¿pero como podía dejarlo ir tan fácil? ¿Como podia vivir con ello? Mi familia, mi vida todo fue un engaño.—¡me siguen ocultando cosas! ¿¡Como pueden hacerme esto a mi!? —grite histérica.Mi madre, Ivonne y Jack estaban frente a mí, sus miradas era de decepción por sí mismos pero eso no calmaba mi enojo.—no creímos que... Estuvieras lista —dijo mi madre apenada.—¡ustedes solo piensan en ustedes! Ojalá hubiera muerto con mis padres y así nunca haberlos conocido —dije entre dientes mientras salía de la habitación a toda prisa.
—necesitamos ir a otro lugar más seguro —dijo Leroy mirando fijamente a su beta. —Alek tiene personas vigilando por los alrededores, tendremos que ser muy discretos —contesto Josh mirando a Leroy.Jugué con mis manos nerviosa mientras presenciaba aquella charla pues no quería ser una molestia.—no hace falta hacerlo, Alek dijo que no me haría daño —bien quizás no me había dicho exactamente eso, pero no quería causarle más problemas a Leroy. —solo esta tratando de manipularte, el quiero regir a nuestro mundo de una forma sangrienta —dijo Leroy tomando mi mano.