—¿como estas cariño? —pregunto mi madre con una sonrisa.
—estoy bien mamá —dije con una débil sonrisa.Aún sentía nostalgia por mi antigua vida pero ya no podía volver el tiempo atrás.
—alegrate, mejoraste tu vínculo con nuestro mate y eso te hace feliz —dijo Esmee alegre.
—lose, me causa felicidad —dije apenada.Era cierto, Leroy alfin había dicho sus sentimientos hacia mí y ahora podía estar segura que me quería.
Abrí mis ojos poco a poco mientras mi cerebro reaccionaba a lo que estaba pasando.—tardaste mucho en despertar —me levante de golpe al escuchar esa voz, pero caí torpemente al suelo pues sentía mis piernas muy débiles. —ten cuidado, aún estas muy débil —dijo esa voz de manera amable.examine el lugar donde me encontraba, era un cuarto vacío y no había mucha luz, el chico estaba cerca de la puerta, era el mismo chico misterioso que me atacó cuando estaba con Leroy... O no.—¡¿donde esta Leroy?! —pregunte asustada. —quiz&aac
Aferrarse al pasado no servía de nada, ¿pero como podía dejarlo ir tan fácil? ¿Como podia vivir con ello? Mi familia, mi vida todo fue un engaño.—¡me siguen ocultando cosas! ¿¡Como pueden hacerme esto a mi!? —grite histérica.Mi madre, Ivonne y Jack estaban frente a mí, sus miradas era de decepción por sí mismos pero eso no calmaba mi enojo.—no creímos que... Estuvieras lista —dijo mi madre apenada.—¡ustedes solo piensan en ustedes! Ojalá hubiera muerto con mis padres y así nunca haberlos conocido —dije entre dientes mientras salía de la habitación a toda prisa.
—necesitamos ir a otro lugar más seguro —dijo Leroy mirando fijamente a su beta. —Alek tiene personas vigilando por los alrededores, tendremos que ser muy discretos —contesto Josh mirando a Leroy.Jugué con mis manos nerviosa mientras presenciaba aquella charla pues no quería ser una molestia.—no hace falta hacerlo, Alek dijo que no me haría daño —bien quizás no me había dicho exactamente eso, pero no quería causarle más problemas a Leroy. —solo esta tratando de manipularte, el quiero regir a nuestro mundo de una forma sangrienta —dijo Leroy tomando mi mano.
—Amelie lo siento mucho —dijo Jack mirándome con lastima. —no quiero hablar de ello —dije desviando la mirada.Ivonne me miró con ternura y me abrazo con fuerza mientras susurraba un, "estarás bien" en mi oído, pero sabía que no sería así.Le había confiado todo a Leroy, mis sentimientos, mis deseos y mi cuerpo, solo para enterarme que el había estado casado, ¿pero la dejo no? ¿Eso es bueno verdad? Una patética esperanza surgió en mis pensamientos pero negué rápidamente, la forma en que ella lo miro... Habían tenido algo especial entre ellos.Yo nada más había llegado como u
—¿como puedes decirme eso? —susurre apenas.—lo lamento Amelie yo... —mi hermano intento acercarse a mi retrocedí instintivamente y me hice a un lado.—largo de aquí, no quiero verte —murmure entre dientes.Convertí mis manos en puño y resistí los deseos de llorar pues no quería que me viera tan vulnerable.—por favor Amelie, solo quiero protegerte —dijo el.—¡lárgate! —chille.Mi hermano soltó un suspiro y salió de la habitación d
Siento una ansia crecer en mi interior como si estuviera ala espera de algo o a alguien y eso me desconcierta, ¿será el vínculo es eso?—hola —dijo Ivonne con una sonrisa mientras bajaba ala cocina.—hola, ¿ya esta el desayuno? —moría de hambre.—seguro, ven sientate, los chicos están afuera —me senté con una sonrisa nostalgica pues pensaba en Leroy.Ivonne puso mi plato de comida frente a mi y ella se sento junto a mi.—¿como te sientes? —preguntó.—
Me sentía tranquila y eso me hizo feliz.—llegamos por fin —Dax detuvo el auto frente a una enorme casa de color azul y todos la miramos con atención.Es hermosa, con el jardín lleno de flores, es una casa un poco apartada de la ciudad, supongo que siempre es así por si ocurre alguna transformación inesperada o algún ataque.—entren, estaremos aquí un tiempo —sentenció mi hermano Jack.Suspire aliviada y nerviosa, mientras pensaba en sí en verdad sería capaz de empezar de nuevo.—el lugar es muy bonito —susurro Ivonne a mi lado. Me encontraba en una de las habitaciones de la casa pero no pude poner atención a mi alrededor pues sentía que me partían en dos.Era algo indescriptible, un dolor sumamente fuerte que aturdia todos tus sentidos, mis ojos no podían más y poco a poco mi cuerpo fue cediendo ala oscuridad.—no Amelie, no cierres los ojos —escuché la suplica de mi hermano pero no podía más.Me encontraba nuevamente en la casa de Leroy, la luna iluminaba todo el bosque y yo me sentí atraída por eso, así que camine por todo el bosque disfrutando de la vista que me ofrecía cuando de repente algo capto mi atención.A lo lejos podía ver una silueta moverse mCapítulo 18