Hola!!! Espero ver sus comentarios amigas !!!
El día había sido agitado y lleno de imprevistos, Erick odiaba esta clase de días, le recordaba que podría perder el control en cualquier momento.— Señor Contreras— El chofer rara vez iniciaba algún tipo de conversación— creo que hay alguien en la entrada de la villa.Eso llamó la atención de Erick, quien se llenó de rabia al identificar ese cabello rojo fuego iluminado por las luces del auto, ella se encontraba en el suelo.— Detente, por favor— la rabia que sentía era notable.El chofer siguiendo las indicaciones, se detuvo justo frente a la chica que estaba siendo detenida por el guardia de la puerta principal.Erick abrió la puerta de manera firme y salió con su presencia impetuosa e imponente para poner orden.Aunque su ira aumentó cuando escuchó al guardia correr de manera prepotente a Miranda.— ¡¿Qué sucede aquí?!— gritó Erick furioso conteniendo su rabia.En ese momento el guardia de ser impetuoso y seguro, cambió su actitud a una llena de docilidad .— Señor Contreras —dijo
Luciana y Mauricio se encuentran en una boutique de las más exclusivas del país.Mauricio había insistido repetidamente en acompañarla para elegir un vestido juntos y poder presentarse en una cena de negocios.—Realmente —dijo Luciana con voz tímida— no me siento tan cómoda con estar vestida de esta manera.El vestido era como un guante y ella no estaba acostumbrada a la ropa tan entallada.— Miranda, eres hermosa— respondió Mauricio estando detrás de la cortina— déjame verte, por favor.Luciana suspiró ante la voz tan sedosa y conciliadora de Mauricio, daba por hecho que ella iba a lucir bien, aun antes de verla.—Señora —dijo la asistente de ella— su esposo es muy comprensivo y atento, debe amarla mucho.Luciana sonrío apenada de saber que esto era solo un matrimonio arreglado, ¿Qué pensaría la joven mujer si lo supiera?La cortina se abre mostrando a una imponente Luciana con el cabello rojizo recogido en un moño y un vestido tono verde oscuro enmarcando cada curva de su cuerpo.La
— Finalmente llegas. — Victoria estaba esperando a Mauricio y sentía que su paciencia era algo con lo que no contaba, ella estaba golpeaba constantemente sus uñas contra el escritorio de madera haciendo un ruido constante.— Dime madre ¿qué es lo que te molesta ahora? — Mauricio se adentró en la oficina de manera tranquila, a pesar de tener velocidades más altas en la silla eléctrica, su madre no merecía ponerle presión al motor.— No quiero que juegues conmigo, ¿Crees que no lo sé? Yo me entero de todo.— ¿De qué hablas? — Mauricio se puso serio, no creía que nadie más supiera del incidente de la noche de bodas de Miranda y Erick, pero estaba dispuesto a defenderla.— La renovación del contrato de la empresa naviera no se ha renovado y no quiero perder esos fletes, ni la asociación.— Recuerda que a pesar de nuestros intentos no ha funcionado, ellos no explican por qué, pero se niegan a renovarlo.— ¡No me interesa! — Victoria lo interrumpió furiosa— No entiendo qué diferencia hay de
Al entrar a la joyería Luciana se quedó impactada ante lo que veía, jamás en su vida había estado en un lugar de esa categoría, la luz, los detalles del lugar, solo al entrar los recibieron con una copa de un muy exquisito licor.— Señor Contreras — Saludó la anfitriona que los iba a atender— Bienvenidos.Erick se mantuvo sosteniendo la mano de Luciana, evitando que se alejara de él, la sentía nerviosa con el deseo de correr en sentido contrario a donde estuviera él, pero una especie de sensación le pedía que estuviera a su lado, que la retuviera ahí… junto a él.“Es necesario” se justificaba al querer sentirla cerca más de lo que sería recomendado.— Gracias, hemos venido para encontrar una joya específica. — Levantó la mano izquierda de ella. Mostraba que en ella no había un anillo. “Delicada y pequeña cómo si de una muñeca se tratara” Observó el al mismo tiempo que recordaba dónde había estado su mano unos días antes y eso calentó su sangre en solo un segundo.El rostro de la a
Erick se sentía traicionado, no sabía por qué pero ella representaba una intriga tentadora que tenía mucho tiempo sin sentir y ahora al comprobar que no había sabido siquiera su nombre lo enfurecía.— Estás equivocado, soy Miranda— Dijo Luciana no muy convencida de poder hacerlo cambiar de parecer.Erick firme y sobre todo seguro de lo que estaba diciendo no se dejó engañar.—No Luciana— dijo él— no comprendes, en este momento nada lo que digas valdrá la pena el esfuerzo.— Yo te aseguro que puedo explicarlo.Luciana estaba perdida, él ya sabía la verdad y por más que lo intentara veía en sus ojos que no podría hacerlo retractarse.— Como te dije, tendrás la oportunidad de conocerme tal y como soy…— Erick se acercó a ella como un cazador frente a su presa.— ¿De qué hablas?— Sencillo, serás mi adorable y servicial secretaria.—No puedo… yo no sé nada de eso, yo…— Lo sé eres una maestra de niños pequeños.Luciana está impactada al saberse descubierta.— ¿Cómo lo supiste?— cuestionó—
Para Erick Contreras magnate poderoso y un hombre irresistible, entrar a cualquier lugar era algo sencillo y la villa de la familia de Luciana, no era la excepción. Sólo fue cuestión de mencionar su nombre y la puerta principal fue abiertaTenía que hablar con Luisa, ella seguramente conocía las respuestas de todo lo que Luciana ocultaba.Ya había estado anteriormente aquí, mucho tiempo antes pero sabía perfectamente que esa mujer vivía para los negocios y esos solo se hacían en su oficina.La puerta estaba entreabierta y por ahí salía una voz fuerte y condenatoria.— Pues debes cumplir con todo. — Victoria estaba en la oficina.— Eso jamás lo haría una madre...Erick se sorprendió al escuchar tanto dolor y sufrimiento de la voz de Luciana, la mujer de la que quería hablar con Victoria.En ese momento alcanzó a ver cómo Victoria consumida por la rabia levantaba una mano visiblemente con la intención de golpear a la pelirroja.Sin pensarlo dos veces Erick reaccionó adentrándose en la
En el ocaso del día cuando los últimos rayos del sol llegan a los ojos de Luciana provocan que ella despierte.Su cuerpo que en ese momento sentía sensible y renovado estaba completamente desnudo y satisfecho en una sábana, que lo único que hacía era abrazar su satisfacción.Entre la penumbra del sueño y la conciencia escuchó agua correr.— ¿Dónde estoy? ¿Qué sucedió?— se preguntó aún con la garganta cerrada.Se levantó de la cama tomando una bata para cubrirse y paso a paso se acercó al baño de dónde provenía el ruido y comenzó a recordar.“Su madre” “Gritos” “reclamos” “Erick” “Deseo” “Sexo”Quedó impactada al darse cuenta que eso último que recordaba, no era uno de sus varios sueños húmedos, esos que se negaba a aceptar que tenía desde que lo había conocido.Pero al bajar la mirada y esforzarse solo un poco podía identificar que su cuerpo estaba lleno de muestras de lo salvajes que había sido, todo ese día, porque realmente se desconocía al pensar que era ella quien no se había con
Respaldado por la oscuridad de la noche, un hombre que caminaba intentando pasar desapercibido por la gente entraba a una farmacia veinticuatro horas.El gorro de su sudadera ocultaba completamente su rostro y su actitud puso nervioso a quien atendía el lugar.Este hombre misterioso sacó la mano de sus bolsillos y extendió una hoja al dependiente.— ¿Lo tienes?— preguntó nervioso seguía mirando para todos lados, en busca de algo que estuviera fuera de lugar.El joven extendió su mano temblorosa y observó la hoja, en ella se encontraba escrita una medicina sumamente difícil de conseguir y sobre todo muy cara.El dependiente negó con la cabeza— ¡Maldición! ¡Ninguna m*****a farmacia lo tiene! , ¿De qué les sirve tanto si no hay lo que se necesita? —gritó frustrado, sin paciencia.El hombre misterioso arrebató la receta del joven y salió del establecimiento, no sin antes mirar para todos lados, necesitaba mantenerse a salvo.— ¡Maldición! ¡Maldición!— Susurraba de manera desesperada mien