Narración: Sebastián.
Si los gemelos pudieran callar la puta boca por tan solo cinco minutos en verdad estaría agradecido. Llevan todo el puto día diciendo que no deberíamos estar aquí pero lo cierto es que sé que necesito estar aquí. Debo de encontrar una prueba para darme cuenta que lo que he estado pensando durante días no es solo parte de mi maldita imaginación. Sé que Isabella es capaz de hacer lo que sea, sé que ella es lo bastante fuerte para hacer cualquier locura para vengarse y en estos momentos se está vengando de mí, sé que lo está haciendo.
—¡No creo que encontremos algo!— grita Lucas. Gruño al escucharlo y golpeo la pared con fuerza. Maldigo al ver la gran marca de sangre que debo sobre la pared blanca. Niego antes de soltar una gran carcajada.
NARRACIÓN: ISABELLA.Me ha comprado un maldito departamento para mí misma, estaré viviendo en un maldito departamento que parece un castillo pequeño. Le he dicho que no necesitaba tanto pero le ha importado un carajo. Sebastián está equivocado si cree que ganará mi confianza y mi perdón con un departamento. Sé lo que intenta hacer pero no puedo comprenderlo por completo.Cada vez que me pide matrimonio me provoca un remolino emocional que apenas puedo controlar. Pero si algo estoy segura es que no dejaré que consiga lo que quiera, esta vez no. Al menos ahora sé que no me asesinará. Al inicio temía que me asesinara pero ahora sé cómo es él, solo necesita un poco de amor para poder manejarlo.Franccesco se ha mantenido en contacto conmigo, sé que quiere hacerse pasar por mi amigo pero yo sé la verdad. Ese hombre fue el causante de tod
NARRACION: SEBASTIAN Es una hija de perra, lo he confirmado por completo. Por un momento he creído que ella en verdad dejaría la maldita idea de “Guerra sexual” que ella ha creado entre nosotros pero me he equivocado. Ella solo ha venido a este maldito lugar por Annie, solo quiere a esa maldita mocosa y cuando la consiga se irá de inmediato. Si ella cree que le permitiré llevarse a esa mocosa sin nada a cambio está completamente equivocada. Annie no saldrá de esta casa al menos que consiga algo de Isabella a cambio. Con solo ver la mirada que Isabella me regala sé que sabe perfectamente lo que estoy pensando. Me conoce y yo la conozco. Hará lo que yo quiera con tal de conseguir lo que quiere. —Solo dime de una maldita vez lo que quieres— dice mientras me mira a los ojos. La miro por un momento y suelto una sonrisa burlona en su rostro. Isabella grita y se sacude entre las sogas. —Si no me hubieras golpeado
NARRACIÓN: ISABELLA.Grito desesperada cuando me continúan jalando hacia la dirección opuesta de Sebastián. No puedo abandonarlo. No puedo hacerlo cuando esta herido.—¡Suéltame!— grito con fuerza.—¡Suéltame Lucas! Por favor— le suplico entre llanto. Sé que no se detendrá pero al menos debo de intentarlo. Debo de luchar para regresar con él.—Me pidió que te sacara de ahí, era una orden. No puedo desobedecer.—¡Soy la mujer de Sebastián! ¿Mi palabra no tiene poder sobre ti?—El problema es que necesito mantenerte alejada de eso, es peligroso y me moriría si salieras herida.—¡Está muriendo, Lucas escúchame! Sebastián está muriendo.—Isabella…—¡Jódete Lucas!— gritó antes de rob
NARRACIÓN: SEBASTIÁN.Isabella está furiosa conmigo pero me importa una mierda. He pasado todo el día y la noche en el hospital.—Juro que te golpearé si te escucho quejarte del dolor— dice Isabella mientras cierra la puerta del auto. Lucas me mira por un momento y suspira. Tomo a Isabella de las mejillas con fuerza y la obligo a verme. Un pequeño quejido de dolor sale de sus labios cuando aprieto sus mejillas con fuerza y me acerco para morderle los labios.—¿Quién es la que está quejándose ahora? — preguntó mientras uno mis labios con los de ella. Isabella me coloca la mano en el pecho y gruño al morderla. Isabella abre levemente sus labios y suelta un delicado gemido que no pudo contener.—Si vuelves a abrir la boca para intentar reclamarme algo te juro que te dejaré el maldito culo rojo aquí mi
NARRACIÓN: ISABELLA. No sé qué ha sucedido. Solo recuerdo haber venido al bosque con Florentina. Mis manos están llenas de sangre mientras observo el cadáver de Florentina y escucho llorar a Sebastián mientras me grita. —En verdad… en verdad no he sido yo. —Dijiste que te vengarías de mi… dijiste que lo harías pero nunca te imagine capaz de tocar a mi familia. ¡Eres una hija de puta!— grita antes de lanzarse sobre mi. Grito cuando me toma con fuerza del cuello y me comienza a ahorcar. Sebastián grita y llora mientras me ahorca. Pataleo intentando zafarme de él pero es imposible. —¡Te metiste con lo que más quería!— me grita— ¡voy a matarte para que puedas irte al puto infierno! Estoy aterrada ante la idea de saber que e
NARRACIÓN: SEBASTIÁN—Fírmalo. Ahora— digo mientras deslizo mis manos por el escritorio. Ella me observa con la mirada llena de lágrimas. Lucas y Oscar se mueven a sus espaldas con nerviosismo y se miran entre ellos. Parecen preguntarse si lo que estamos haciendo está bien pero me importa un puto carajo.— fírmalo, gatita.—Dijiste que me dejarías…—Cambie de opinión. Torturarte es mucho más placentero que dejarte esconderte como una maldita rata en algún maldito rincón de la ciudad. ¡Ahora fírmalo! — le grito mientras ella observa el papel.—¿Estas seguro de lo que estás haciendo?— pregunta ella al colocar la pluma sobre el papel. Me acerco a ella y la tomo del cabello antes de jalarlo. Obligándola a verme.—Firma.—Sebas..<
NARRACIÓN: ISABELLASé que en estos momentos nuestra historia se ha vuelto confusa. Sé que nuestra historia no es como la típica historia de amor. Se conocen, se enamoran y se casan para ser felices. Sé que eso nunca lo viviré por qué es imposible.La persona que amo es un maldito psicópata y yo soy una maldita bipolar. Nuestros problemas mentales chocan y eso nos hará pelear siempre. Lo único que dé es que quiero permanecer aquí incluso si peleamos todos los días.Estarlo viendo dormir en estos momentos mientras me abraza es la mejor sensación del mundo. No me arrepiento de haber firmado el acta de matrimonio y tampoco me arrepiento de haber hecho lo que hice. Tenía que vengarme por lo que Franccesco nos hizo y ahora que estoy junto a Sebastián sé que él podrá protegerme.—Mierda,
NARRACION: SEBASTIÁNVeo a Lucas llevarse la mano a la mandíbula segundos antes de lanzarse hacia uno de los hombres de Franccesco. No puedo encontrarlo por ningún lado, el hijo de puta probablemente ya se ha escapado.Uno de los hombres me observa con pánico en la mirada. Le he cortado todos los dedos de una mano y se retuerce en el suelo. Me acerco a él con una gran sonrisa, juego con la navaja entre mis dedos. El hombre grita y se arrastra por el suelo. Su imagen es divertida, recuerdo a este hombre, hace dos años le ofrecí trabajo y se negó porque según él quería vivir una vida llena de paz. No sé por qué huye, le voy dar la vida de tranquilidad que él quería. Me limpió la sangre del rostro y grito al clavarle la navaja en la pierna y por último en el pecho. Lo apuñalo una y otra vez mientras disfruto de sus gritos desgar