* * * * * * * * Éste es el vestido más sencillo que tengo, pero me hace sentir tan sensual, es de flores, sin tirantes y me queda muy ajustado. También lo siento muy especial porque él mismo lo compro para mí, es un gesto que nadie ha tenido conmigo y quizás por eso lo valoro tanto. Ciro me invitó a cenar y me pidió venir cómoda, está era nuestra primera cita como pareja y estaba saliendo de maravilla, creo que no había tenido una verdadera desde que salí embarazada de Liz. Pincho el último trozo de mi filet y las últimas patatas antes de apoyarme en el respaldo de la silla. — ¿Quieres más? — Una mirada de preocupación me hace reír. — Estoy bien, lo prometo. Yo tampoco quiero más postre. — Digo mientras tomo mi vaso de agua y me lo bebo casi de un trago. — ¡Guau! Me encanta que seas tan glotona. Nunca había estado con una mujer de apetito tan voraz, una que comiera de verdad. Eso para mí es demasiado... Sexy. — Sus ojos claros se cruzaron con los míos y nos quedamos viendo m
POV : CIRO. Cómo dictaba mí reloj biológico me desperté al amanecer pero ya no sentía a Isabella entre mis brazos, tenía por costumbre presionar su cuerpo cálido y desnudo contra el mío, lentamente rodé sobre mí espalda para llegar al borde de la cama, alcancé la mesa para tomar mí teléfono y comenzar la rutina de revisar los correos electrónicos y la agenda del día, aunque fuera sábado tenía un par de reuniones que no podía aplazar. Inmediatamente recordé que Bella me pidió cuidar de los chicos, para resolver el problema envié un mensaje a mí asistente muy poco característico, indicándole mí situación y dejándola a cargo de la oficina, pues me presentaría más tarde. El sol comenzaba a iluminar algunas partes de la habitación proyectando un resplandor luminoso, sería imposible intentar dormir. Me alisté para comenzar el día con buen pie, pero antes iría a mí gimnasio personal para un entrenamiento rápido. Al bajar por las escaleras el volumen alto de la música me alertó, esta prov
POV : BELLA. Sonrío cómo una idiota mientras conduzco a casa de mí madre, Ciro y yo hemos pasado prácticamente juntos todo éste tiempo y me duele el cuerpo de tanto sexo. Nunca me había pasado ¡Me encanta! Algo nos está pasando y ni él mismo puede negarlo. No es la latente atracción física que nos tenemos desde que nos conocimos. Hay más y es nuevo. Desgraciadamente, en los próximos minutos mis fantasias con Ciro fueron apagadas por la preocupación que me invadió, hace menos de veinticuatro horas recibí una llamada de mi hermana Jenna.Estaba tomando el sol en la terraza, cuándo mí teléfono sonó y vi la llamada entrante. Mi primer instinto fue ignorarla, pero luego algo me hizo contestarle.Desde siempre mí relación con mí hermana mayor, Jenna, nunca fue fácil. Al poco tiempo de que salí embarazada, ella se casó con un hombre adinerado, desde ese momento nuestro vínculo se rompió. Haciendo que la comunicación entre ambas fuera nula casi por diez años, sólo nos comunicamos en uno
POV: CIRO. Me despierto solo en mitad de la noche y extiendo el brazo para buscar a Bella, pero solo encuentro las sábanas frías. Me incorporo adormilado y echo un vistazo a la oscura habitación. No está aquí. Fruncí el entrecejo, entonces recordé nuestra discusión. Suspiré pesadamente, quizás no era la mejor manera de decírselo. No quiero que piense que no la apoyaría en algo tan íntimo como ésto, pero a lo largo del tiempo he aprendido que no todo lo que brilla es oro. Hasta que no me asegure de la verdadera intención de su hermana, no puedo bajar la guardia. Además tiene años sin hablar con ella muy bien podría ser una oportunista. «Es una posibilidad».Pienso en volver a dormirme y al cabo de unos minutos me vuelvo a girar para seguir pensando en Bella. No cabe dudas de que tiene derecho a su intimidad.... Pero ha sido una noche rara para los dos. Necesito comprobar que está bien, en el instante que me pongo una camiseta y me dirijo a la puerta sé que es mentira. Mis moti
* * * * * * * * * * Apenas atravesamos la sala de juntas todos levantaron la vista. — Estaba apunto de llamarte hombre, me tenías preocupado, jamás en tú vida habías llegado tarde a una reunión.— Watson hizo un chiste y se levantó tendiéndome la mano. — Sí, lo siento pasé a dejar a mis hijos en el colegio. — Quedó tan impresionado cómo Astrid y los demás socios, que no hacian más que mirarnos. Ocupé mí lugar en la cabecera de la mesa de juntas a un lado de Astrid y dónde ya habían sentadas otras diez personas, todas esperaban por mí. — Buenos días a todos, me gustaría comenzar esta presentación, haciendo incapié en por qué somos los indicados para vendernos su compañía. — Hice clic en un mando a distancia para iniciar, enseguida las imágenes de mí presentación se reflejaban a mi espalda. — Lo primero sería la integración financiera, hemos contratado una firma de auditores independientes para supervisar nuestros planes y una vez que completen su labor...— Hice una pausa al se
POV : BELLA. Bajé las escaleras y me encuentro con mi hermana Jenna, reunida en el sofá con mis hijos, estas semanas ha sido un regalo del cielo, se le da genial estar con los chicos y me ha ayudado tanto su compañía aquí en la casa, que me siento tan agradecida de volverla a encontrar.Justo ahora viene con un semblante alegre, nada parecido a la Jenna destruida y temerosa que llegó aquel dia. — ¿Estás segura que puedes quedarte sola con los chicos? porque podría llamar a Magda.— Pregunté mientras terminaba de arreglarme. — Tranquila, hermana. Estoy segura de que puedo. Además, nos vamos a divertir mucho hoy, veremos una película o dos. Ustedes, vayan tranquilos. — Le dió un beso Lizzie en su cabecita y está se rió. — Bueno.— Contesté más tranquila.— James, cariño. Ciro y yo estaremos unas horas en una cena importante con tus abuelos, ¿Me prometes que todo estará bien?No pelees tanto con tu hermana. — Me Incliné para mirarlo y disimule un poco delante de Jenna. Había a
POV : CIRO. Se me hiela la sangre. Los accidentes pequeños no existen cuándo hay un niño de por medio. — ¡No pueden irse Ciro! Necesitamos hablar sobre algo importante. Un tema que te concierne. — Exclamó mi padre. — Lo siento papá, tenemos una emergencia con mí hijo y no puedo seguir aquí...— Le hice seña al mozo para cancelar la cuenta. — ¿Pero que le sucedió?— Mi madre pregunta al vernos a Bella y a mi enloquecidos por la situación que se nos presentó con James. — James desapareció, no lo encuentran por ningún lado. — No puede ser... — Cubrió su boca con sus manos. — Iremos con ustedes. — Margareth, no deberías meterte en esto. — Ambos giramos la vista hacia mí padre. ¿Qué demonios le sucedía?— Cómo puedes ser tan insensible, Thomas...— Mi madre contesto tajante, antes de avanzar con Bella. Tome las llaves del auto y casi salimos corriendo del restaurante, muchos pensamientos recorren mi mente mientras conduzco a nuestro hogar que está a treinta minutos. Cuando ape
[...] — Jefe debe girar a la izquierda en la próxima intersección.— Nos dijo Mateo, a través del sistema de comunicación móvil del auto. — La señal GPS termina en la 6ª Avenida, cerca de la calle 46. — El tráfico estaba atascado en horas de la mañana siempre aumentaba el flujo de conductores. Miré a Bella que estiraba el cuello en un intento por ver alrededor de los autos alineados frente a nosotros. — Cariño ahí... Mira hay un espacio continúa por ese canal.— Me indicó. Seguimos en línea recta y en alerta máxima, solo deseábamos llegar hasta la dirección marcada por el rastreo. — Estamos a pocos kilómetros cariño. — Estiré mi mano para tomar la suya, ambos teníamos una sensación de hundimiento en el estómago. — Espero llegar rápido. — contestó con la ansiedad en la punta de su lengua. — Cuándo encontremos a James, debemos enfocarnos en él. quizás, Liam tenga razón. Y, lo que le sucede a James es un estado de rebeldía contra nosotros. — Apreté mi mandíbula, apenas escu