Cuando desperté al día siguiente, me quedé fijamente mirando a Aaron, ya que estaba durmiendo con el torso desnudo, un brazo debajo de su cabeza y su otro brazo encima de su vientre. Me levanté muy despacio para no despertarle,y entré en el cuarto de baño para ducharme, volviendo al dormitorio después de la ducha, tapando mi cuerpo solamente con una de las toallas que cogí. Cuando volví al dormitorio, la mirada de Aaron y la mía se cruzaron, haciendo que sintiera un escalofrío por todo mi cuerpo— Ven aquí Rebeca — me dijo— ¿Qué quieres? Tengo hambre, me voy a la cocina necesito tomarme una buena taza de café ¿te pongo a ti uno? — preguntePero mi esposo se levantó enseguida de la cama, dejándome ver su escultural y desnudo cuerpo mirando como su miembro estaba listo ya para atacar. Quise salir del dormitorio corriendo, pero no pude llegar a la puerta, ya que mi esposo saltó de la cama y me cogió en brazos tirándome a la cama poniéndose él encima de mi, con cada uno de sus brazos a
Cuando entre en mi despacho, me senté en el sillon que habia detras de mi mesa del despacho y encendí mi ordenador para empezar a trabajar, cuando de pronto escuche como golpeaban a la puerta de mi despacho varias veces— Adelante — grité, viendo entrar a ClayEnseguida me levanté de mi sillón, abroche el botón de mi chaqueta mientras me iba acercando a donde estaba Clay. Él y yo nos estrechamos la mano, invitándolo a sentarse en uno de los sillones que había enfrente de mi mesa, sentándome yo en mi gran sillón. Esperamos para hablar hasta que mi secretaria nos trajera el café que le pedí cuando entré en mi despacho, marchándose ella después cerrando la puerta una vez que salió.— Según he sabido, tu esposa era una gran empresaria, hasta que las deudas le hizo venderla — me dijo Clay— Si lo sé muy bien, su empresa se la compre yo antes de conocernos, ahora se puede decir que somos socios a parte de ser esposos — le dije— De verdad Aaron que espero que tengais los dos exito, yo creo
Estaba sentada en el sofá del salón hablando con Kristy que ese día vino a mi casa de visita, cuando de pronto escuchamos como abrían la puerta de la casa, mientras mi visita y yo nos estabamos riendo.— Rebeca ¿donde estas cariño? — escuche preguntar a mi esposo— Aaron estamos en el salon — le grité desde el salon, con una especie de sonrisa burlonaAaron apareció de pronto en el salón dirigiéndose hacia yo donde estaba sentada con sus brazos extendidos, que hizo que me levantara del sofá para ir hacia él, cuando ya estaba bastante cerca de mi esposo, me rodeo con sus brazos, abrazándome mientras yo me reía, poniendo después él sus manos en mis mejillas cubriendo mis labios con los suyos, haciendo que sintiera una especie de calidez que me recorrió por todo mi ser, poniéndome Aaron su mano en mi nuca para acercarme más a él, haciéndome gemir cuando nuestras lenguas se rozaron, hasta que escuchamos carraspear detrás de nosotros, arrancandonos a mi esposo y a mi una sonrisa — Cariñ
Despues de la sesion de sexo que tuvimos Aaron y yo en la cocina, Aaron abrio la botella de vino poniendo el liquido en las dos copas que cogio del armario, chocando despues nuestras copas para brindar.— ¿Qué vas a hacer? — pregunte— Quiero trabajar junto a Clay, me cae bien la verdad, quiero lograr que se sienta orgulloso de mi, conseguirlo es muy importante para mi y para la empresa — me respondió— ¿Qué quieres decir? — pregunte— Crei que seria mas sencillo, lo que no esperaba es que su hija y tu tuvieras tanta amistad, ni que según Clay, su mujer te adora, no esperaba que su esposa y su hija fuera parte también de nosotros — me contestó Aaron muy serio— ¿Eso es bueno ¿no? ellos quieren trabajar contigo porque vas a tener familia, es una de sus condiciones, eso es genial para los dos — respondí— Si ya lo se, pero el contrato que firmamos era, que me dieras a mi hijo y luego te daría tu empresa, nos divorciamos y cada uno seguirá con su vida,--- me dijo— Ya lo entiendo, el con
Aaron de pronto se levantó de su sillón quedándose de pie delante de la ventana, me marché de su despacho hacia la cocina saludando a Elisa cuando entre, fijándome en que ya estaba preparando el desayuno.— Buenos días Elisa ¿ha desayunado ya mi esposo? — pregunte— No, le estaba preparando una taza de café para llevárselo a su despacho —- me dijo— Damelo a mi, yo misma se lo llevaré, necesito que hablemos el y yo mientras los dos desayunamos — le dije cogiendo la bandeja que ya tenía Elisa preparadoMe volví a acercar al despacho de Aaron, entrando esta vez sin esperar a que me dijera nada, girando él de pronto su cuerpo mirándonos los dos a los ojos— Te traigo tu taza de café y unos rollitos, pensé que te gustaria comer algo —- le dije— Gracias — me dijo cogiendo la taza y uno de los rollitos— ¿Has repasado ya los documentos? —- pregunte, sentandome en el sofá que tenía en su despacho— Si, lo he hecho — me dijo muy serio— No parece que te convenza mucho, estas muy serio — resp
Después de hablar con Kristy por teléfono, deje mi movil al lado de mi bolso marchándome del salon a mi dormitorio, ya que quería cambiarme de ropa y pintarme la cara con colores muy claritos, después de vestirme y ponerme los zapatos volvi al salon para coger mi bolso y mi móvil, llamando a un taxi desde mi casa para que me recogiera, ya que donde se hacía el evento estaba bastante alejado de mi casa. Una vez que paró el vehículo el taxista y le pagué al conductor, baje del vehículo acercándome a donde estaba la celebración. Nada más entrar cruzamos las miradas Kristy y yo, viendo como se iba acercando a donde yo estaba con una amplia sonrisa.— Hola Rebeca, ¡¡ has venido !! ¿eres la mejor!! — me dijo abrazandonos las dos,—- Cariño no me has ido que ibas a venir, de haberlo sabido hubiera ido a casa para recogerte -me dijo mi esposo, rodeando mi cuerpo con sus brazos– — Después de tu llamada, me ha llamado Kristy para que viniera y no le iba a decir que no ¿no te parece? — le dije
Ninguno de los dos estabamos preparados para ese despliegue de pasión y ese deseo inminente por estar los dos solos y no rodeados de tanta gente mientras nos demostrabamos nuestro deseo. Aaron se apartó de pronto de mi, dándonos cuenta de cómo Kristy y su esposo nos miraban con cara de sorpresa, Cuando mi esposo se apartó de mí, casi me caigo, pero el fue mas rapido cogiéndome de la cintura con su brazo antes de caerme. Nos quedamos mirándonos los dos, sintiendo como tenía mis mejillas sonrojadas de vergüenza, dándome cuenta de como Aaron me miraba con una especie de sonrisa burlona— Cariño, creo que debemos marcharnos — me dijo mi marido— Estoy de acuerdo contigo — fue lo único que pude expresar— No, de eso nada, vosotros dos no vais a marcharos —nos dijo Kristy– mi madre y yo no hemos terminado de hablar con tu esposa y además Rebeca, no se ha comprometido con nada de lo que le hemos dicho, y juraría que nos estáis ocultando algo — termino de decirnos Kristy— Esta bien, no te po
Al día siguiente me desperté algo confundido, ya que tardé un buen rato en darme cuenta de donde estaba, porque estaba acostado y vestido en el sofá de mi salón. Me senté sujetándome la cabeza, pues me dolía como los demonios, pensando en que en parte me lo merecía, aunque no dejaba de ser una mierda la manera en que me desperté. Con cuidado fui abriendo los ojos sorprendiéndome cuando vi encima de la mesita que tenía enfrente de mi, una botella de agua y dos pastillas, las cogí bebiéndome seguidamente toda la botella de agua, ya que tenía la boca bastante seca por culpa del alcohol que me bebí, pero lo que mas me impresiono fue cuando me levanté del sofá, ya que estaba cubierto con una manta, cayendo esta al suelo cuando me levante, al coger la manta del suelo, fue como un reflejo para mi, acordandome más o menos de lo que anoche pasó con Rebeca. Acordándome de que cuando ella se marchó del salón muy enfadada, cogí la botella de whisky, bebiendo hasta que conseguí acabar con el líqui