La boca de Byron se abrió. Todo estaba yendo por el camino equivocado. Eso no era lo que él quería oír. Si, necesitaba alejarse de ella, pero no por esas razones.-Espera Dyna- la llamó pero era demasiado tarde, la loba ya había dado media vuelta para irse cuando tropezó con una piedra un poco más sobresaliente y cayó de golpe en el agua, hundiéndose.-Dyna- el gritó de Byron retumbó. El agua era demasiado fría en ese lugar para el cuerpo y la condición delicada de su hermana.Corrió hasta ahí y se inclinó agarrándola de los hombros y limpiando el agua de su rostro para estrecharlo contra su pecho. Su hermana tosía por haberle entrado agua por la nariz y temblaba debido a la baja temperatura.-Maldición- Byron la estrechó contra él para que lo que le quedaba de calor más un poco de sus feromonas fueran pasando hacia su hermana para calentarlo. Sus brazos se envolvieron alrededor de la estrecha cintura y la apretó. No se dio cuenta cuando fue, pero se encontró aspirando la fragancia de
Mathew guardaba las últimas cosas que necesitaba para irse de viaje por una semana. Su padre le había encomendado una misión de reconocimiento y debía partir a la mañana siguiente. Pero no se esperó que su puerta fuera abierta y que un Byron entrara todo mojado y con un rostro de pánico. Este corrió hacia él y cayó de rodillas a punto de romper en llanto.Mathew dejó lo que tenía en mano y temió lo peor preparándose para llamar al doctor pensando que a Dyna le había ocurrido algo cuando Byron le jaló el borde de la camisa.-Señor, ayúdeme por favor. No sé qué hacer. Yo… yo… besé a mi hermana-Mathew solo pudo resoplar. Sabía que eso pasaría antes o después. Solo era cuestión de tiempo.Mathew se pasó la mano por el rostro y suspiró profundamente.-Byron- dijo suave- Ahora mismo tengo tremendas ganas de patearte. Tienes idea del susto que me has dado-El lobo dejó de llorar de golpe y lo miró pestañeando. Mathew se llenó de paciencia, calmándose después de saber que la situación no era
Dyna entró al estudio de Mathew, temprano en la mañana, para encontrarlo vacío. La duda se proyectó en su rostro algo cansado después de no dormir en toda la noche. Había buscado a su hermano hasta el cansancio después del suceso de la cascada sin resultado. Ni siquiera podía encontrarlo por su olor dado que su olfato se había deteriorado demasiado en el último mes.Era como si se hubiera esfumado o la estaba evitando de una forma magistral. Quería hablar con él, necesitaba hacerlo urgentemente y decirle que ella también lo quería.Si lo quería y no como familia. Era un sentimiento mucho más profundo que llevaba guardando muy dentro de ella. Había planificado dejarlo morir cuando ella lo hiciera, no era tan ingenia para no saber que como hermano el vínculo que los unía era más íntima, aún si no compartían sangre. Pero después del apasionado beso del que fue víctima, no podía quedarse de brazos cruzados.Al menos ahora sabía que era correspondida, y tendría remordimientos si abandonaba
Byron caminaba detrás de Mathew cubierto por una gruesa capa para tapar el cuerpo del espeso polvo de tierra de los alrededores. Solo después de entrar en una vieja taberna con las condiciones mínimas para recibir ese nombre se descubrió la cabeza y se secó la frente.-Realmente no entiendo este lugar- se dejó caer en la silla que crujió bajo su peso- Tiene una excelente posición, las condiciones del clima son pasables, vimos que hay minas y recursos en las tierras de las que se puede sacar una buena fortuna. No entiendo porque los que viven en este lugar son tan pobres-Mathew se acomodó frente a él y le pagó al mesero cuando les puso dos vasos con un líquido oscuro frente a ellos.-Es porque no tienen el conocimiento. Este lugar tiene las condiciones para levantar una manada y ser próspera, pero nadie tiene ni los recursos y la técnica para ello. Por eso mi padre me mandó hasta aquí. Desea que me independice--¿Se va a ir de su manada?- el menor casi escupe su bebida mientras el may
Pasaron dos días antes que Byron volviera a ver el rostro de su hermana. En todo ese tiempo había esperado como un lobo fiel delante de la puerta donde las ondas de feromonas mezcladas con el denso olor a la medicina se filtraban por debajo de esta. No tenía idea de que ocurría en su interior y por momentos pensaba que el doctor saldría y le diría que todo había sido en vano. Que su hermana no lo había logrado y que él se desmoronaría.Porque de algo estaba seguro, si Dyna moría, por mucho que le fuera fiel a Mathew, él no podría dejarla sola y la acompañaría. Aun después de la muerte.Fueron los días más largos de su vida. La vida de la pequeña loba colgaba de un hilo y él había sido un imbécil de haberla abandonado en el peor momento, solo por sus inseguridades.Cuando el doctor salió después de varios días se notaba cansado. No había descansado desde que llegó, pero había una sonrisa en su rostro.-Ya puedes entrar- le dijo y vio al lobo levantase y correr al interior casi con dese
Tres años eran poco tiempo para muchos, pero para Mathew y Byron fueron muy pocos. Sobre todo, por todo lo que ocurrió solo en ese tiempo.A los seis meses de la partida de Dyna, Mathew también lo hizo junto a Byron y llevando a Mirian consigo para salvarla de un matrimonio arreglado e impuesto y un enlace donde ella solo sufriría.A los siete meses ya comenzaban a construir el primer edificio de la futura manada.A los 9 meses abrían la primera entrada a una de las minas.Al año ponían el cartel de la nueva manada y delimitaba los terrenos con su olor.Al año y dos meses entra el primer miembro como guardia.Al año y cuatro meses, la manada aumenta el número por la integración de los demás lobos de la zona.Al año y medio vino el primer macho a retar la nueva manada, con victoria de Mathew y haciendo su nombre más conocido de lo que era ya.Al año y ocho meses habían logrado que las áridas y pobres tierras alrededor de la manada diera su primera cosecha abundante y que estas atrajera
¿Una hembra? A él. Acaso Que no jodieran, solo había una loba en el mundo que sería capaz de ser tan insistente con su presencia, sobre todo después de la mala fama que tenía de rechazar de forma sumamente fría. Claro que ellos no lo sabían que solo esa loba lo podía poner a los pies de ella besándole los dedos con pasión. Solo un número muy resumido sabían que él tenía ya a alguien que estaba esperando con ansias para enlazarse.La emoción recorrió su cuerpo como una ola que casi no lo dejaban respirar y corría tan rápido que casi tumba a lo que se le atravesaran en su camino. No le importó. Dyna… Dyna… Dyna había vuelto.Se detuvo en la punta de la escalera que daba a la plazoleta de bienvenida de la manada del Norte. Allí, a unos metros de él había una figura, era alta, esbelta pero bien formada. La ropa se amarraba a una cintura que era delgada pero no esquelética. Sus manos que se venían cuando las largas mangas bailaban con el viento estaban callosas, pero no pedían su habitual
Mathew tomó un sorbo de té con una sonrisa menos boca que la que Byron tenía en su rostro, mientras escuchaba todo lo que Dyna tenía que contarle. Desde la llegada a aquel lugar donde estuvo durante tres años, desde el inicio de su tratamiento, hasta como había empezado a entrenar su cuerpo y transformación para hacerla aún más ágil. Ahora su cuerpo estaba cerca de lo fuerte que era el de su hermano, aunque no en fuerza, pero si en destreza.-Me alegra mucho que estés de nuevo con nosotros. Mandaré a preparar un cuarto para ti. La manada se está ampliando en estos momentos, pero siempre hay espacio, sobre todo para ustedes-Dyna negó e hizo una reverencia.-Joven Mathew me gustaría otra vez compartir habitación con mi hermano- Mathew no se extrañó esas palabras- He pasado tiempo desde que no nos vemos y realmente siempre dormía con él. Nunca me acostumbré a hacerlo sola. Solo permítame quedarme con él-Mathew bajó la taza y miró a Byron.-¿Eso es lo que quieres?-Byron asintió con fue