Mientras todas sus amigas o hermanas como se llamaba entre ellas, estaban dando vueltas por los alrededores, despidiéndose de aquel lugar que por tantos años fue su hogar, Kenna Ahmed, estaba sentada en la sala del orfanato, se había convertido en una joven optimista, inquieta, pero también susceptible e impulsiva, observaba la chimenea que ahora estaba apagada porque la primavera estaba llegando a su fin para darle paso al verano, por lo que el fuego ya no era necesario y fue ese pensamiento el que la llevo a recordar aquello que tanto odiaba.
"Claro que el fuego no es necesario, ni ahora, ni hace 18 años atrás, pero sin embargo lo utilizaste, no te bastó con todo lo que me hiciste.”
Kenna recordó una vez más lo que había sido su vida como Merary Mujtar, una joven de 19 años que había sido desposada en contra de su voluntad con Abasi Najnak, un hombre de 20 años conocido por ser viudo no una, sino dos veces en tan corta edad.
Sus esposas habían tomado el camino del suicidio, y Merary pronto sabría el porqué de ello.
El hombre había pagado por Merary, ya que tenía una belleza única, sus padres aceptaron tres vacas, dos burros y un caballo por ella, aun sabiendo que el hombre pertenecía a una adinerada familia, aceptaron lo que se les ofreció y no pidieron más, para ellos su hija valía aún menos que un burro, creían que este viudo estaba siendo generoso con ellos.
Sin embargo, la joven sabía que nada bueno le esperaba junto a él, pero aun así nunca imaginó lo que le harían, su pobre mente nunca pudo imaginar que personas como Abasi pudieran existir fuera de las películas de terror.
Apenas fue desposada, la arrastraron a la casa de sus suegros, ya que por tradición el hijo mayor permanecería en el hogar de por vida y junto a él su esposa y descendencia, jamás fue tratada como otra cosa que no fuera un objeto, empleada o mascota en aquel lugar, su noche de bodas fue la peor de todas las que puedan existir, sin la menor delicadeza Abasi la forzó, una y otra vez, luego de eso vinieron los maltratos de la familia Najnak, era menos que la sirvienta de todos, vivían en la casa de sus suegros como dictaba la tradición, un año de golpes, insultos y humillaciones, la llevaron a pensar en el suicidio rápidamente, pero la amenaza de Abasi fue clara.
— Si eliges suicidarte como mis anteriores esposas, compraré a tu hermana. – le dijo la noche que la encontró a punto de ahorcarse.
— Pero mi señor, ella es solo una niña de 10 años. — respondió con los ojos cubiertos de lágrimas y voz temblorosa.
— ¡Y tus padres no dudarán en venderla como hicieron contigo! — fue su respuesta antes de salir de la habitación dejándola decidir su futuro y el de su pequeña hermana.
En el tiempo que vivió en aquel horrible lugar, Merary no podía mencionar su nombre, ni decirle marido, ya que luego de un año de ser violada casi a diario no había quedado embarazada, eso le quitaba cualquier beneficio, por lo que se tenía que referir a su familia política como si fuese una empleada y ellos los señores, Merary soportaría todo, el amor que le tenía a su pequeña hermana era todo para ella, un día Abasi se cansó y la llevo al médico, quería saber porque aún no era padre.
—Lo siento señores Najnak, pero la señora Merary es estéril, nunca podrá tener hijos.
Y fue lo mismo que ser sentenciada a muerte, luego de eso su esposo, la entregó a un grupo de empleados como pago por sus servicios, y a pesar de que ella pedía morir cada noche, nunca imagino la forma que su esposo eligió para cumplir su deseo.
Cuando los primeros rayos de sol salieron y ella recobró el conocimiento, salió del cuarto que los empleados hombres compartían, en busca de ayuda, ya que las heridas que tenía por ser violada tan salvajemente provocaban un dolor insoportable, pero lo único que encontró al salir del lugar fue a una turba de personas esperando por ella.
— ¡Engaño a mi hijo! — grito su suegra, con un odio sin igual.
— Exijo justicia, mi esposa fornico con otros hombres. — Su esposo, el mismo que la había encerrado la noche anterior con los trabajadores se mostraba engañado y devastado por lo que supuestamente ella había hecho.
Merary estaba desorientada por los golpes recibidos en la noche anterior y se tambaleaba en busca de ayuda, algo que nunca consiguió, la turba de personas que allí se encontraba, tanto familiares de su esposo como propios le arrojaron piedras, y la golpearon sin piedad alguna.
Abasi la sujeto a un árbol y colocando ramas a sus pies la prendió fuego, no importó lo mucho que gritara, nadie se apiadó de ella, y tuvo una muerte lenta y sumamente dolorosa.
Así fue como con 20 años terminó la vida de Merary y comenzó la de Kenna.
— Pequeña, ¿acaso piensas incendiar el orfanato? — pregunto la única mujer a la que ella consideraba madre.
— Hermana Raquel, lo lamento tanto, solo estaba recordando. — Kenna miro el fuego que salía como lenguas de la chimenea y lo detuvo, extinguiéndolo por completó. Aunque el fuego de sus ojos jamás se extinguirá.
— ¿Estas lista? Esta será la última prueba, ¿quieres preguntarme algo? — esta mujer la conocía demasiado bien, después de todo era la niña que crio.
— Mis hermanas... todas ellas amaron y fueron traicionadas, pero yo nunca amé, ¿por qué renací? — el hada del fuego pocas veces pronunciaba aquella palabra, para ella el AMOR, era un tabú.
— Tu amaste con locura a tú hermana y fue por ella que soportaste tanto, el renacer fue tu recompensa, para una nueva oportunidad.
— ¿Convertirme en hada? ¿O ser humana?
— Eres muy lista, eso es algo que solo tú decidirás.
—La mejor opción es ser un hada, el amor no existe, por algo no puedo tener hijos, ¿verdad?
La hermana Raquel moría de ganas por decirle que en esta vida ella podía ser madre, y así darle un motivo para querer quedarse como humana, pero rompería todas las reglas. Kenna amaba a los niños, pasaba horas viéndolos correr he incluso se ofrecía a cuidarlos, era por eso por lo que la hermana Raquel guardó silencio. Ella no debía interferir con la decisión que debía tomar la peli negra.
— ¿Sabes? hoy que cumples los 18 años de vida te daré un regalo.
— ¿Qué cosa?
— Tu hermana… ella es feliz, después de que tus padres te vendieran, y luego de tu cruel destino, le quitaron a tu hermana, ella creció y tiene una buena vida, ya no debes preocuparte, tú la salvaste.
— Gracias hermana. — Kenna sentía que se había sacado el peso del mundo de sus hombros, por lo menos pudo ayudar a su pequeña hermana, ¿valió la pena? Claro que sí.
— Mira, los señores Petrov por fin llegaron.
Kenna estaba segura de lo que quería, deseaba ser una con la naturaleza, hacer explotar los volcanes para crear tierra cada vez que quisiera ver a sus hermanas, controlar los incendios en los bosques para que la vida comience con su ciclo nuevamente, ella renunció desde el inicio al ser una humana nuevamente, pero ¿podrá mantener su elección cuando sepa lo que es el verdadero amor?
IGOR:
Igor el mayor de los hermanos Petrov de 25 años, se encontraba en el despacho de la mansión, ordenando las últimas cosas, ya que durante este año en ausencia de su padre él tomara las riendas de todo, y esto generaba aún más problemas con sus hermanos.
Este hombre tenía una personalidad excitante además de ser sumamente musculoso de piel bronceada, y alto, que decir ... un hombre con cada letra bien puesta en su lugar, por lo que era común verlo rodeado de mujeres hermosas y problemáticas, con varios titulares en diversas revistas por sus escándalos amorosos y eso repercutía en las empresas que manejaba. Pero nada se podía hacer para remediar aquello, después de todo este hombre había renunciado al amor. Solo sexo y mientras más peligroso sea, mejor.
Pero el mayor problema que tenía con sus hermanos es que era un ser, voluble y agresivo, por decirlo de alguna forma, era pólvora que a la menor chispa explotaba.
"Listo, ya está todo en su lugar, bien ahora a recibir a esta pelirroja, parece una persona tranquila, mientras que a los periodistas les guste no tendré problema, durante un año la haré pasar por mi novia, y así podré juguetear tranquilo con mi agenda de mujeres casadas, sin ser expuesto."
Sus padres le habían designado a Nasima, quien poseía un rostro de niña bien portada, justo lo que él necesitaba para distraer a los periodistas. O eso pensaba.
— ¡Igor! Nuestros padres ya llegaron. – grito el pelinegro desde la escalera.
— ¡Voy Yannick, no grites maníaco del control!
— ¡Tú no me grites!
Este hombre de carácter fuerte se destacaba por ser explosivo, pero también muy amoroso cuando la situación lo requería, era un don juan en todo sentido, sus padres le asignaron a Nasima, pero si hay algo que le gusta a Igor Petrov son los retos, y cuando conozca a Kenna descubrirá el mayor reto de su vida, ¿cómo enamorar a alguien que no sabe lo que es el amor?
Los señores Petrov cruzaron el umbral de su mansión, seguidos por las cuatro jóvenes, mientras sus hijos los esperaban sentados en los grandes sillones de cuero negros del salón.— No lo puedo creer, están en silencio y sin pelear, esto es algo nuevo. — La sorpresa era autentica en la voz de Victoria.— Que chistosa madre. — Respondió con molestia el mayor.— Igor, cuida tú tono de voz, que estás hablando con tu madre. Adelante niñas tomen asiento.— dijo el patriarca y ellas obedecieron, el señor Vladimir les agradaba.Los hermanos se encontraban sentados de una forma casual casi descuidada, de espalda a la entrada, mostrando de esta manera la molestia que le causaba las ordenes de sus padres, pero cuando las jóvenes desfilaron frente a ellos, automáticamente su postura cambió, miraban a esas mujeres vestidas tan difer
Una vez que las jóvenes se instalaron en sus habitaciones, se tomaron un momento para sacar las cartas que cada hermana les había entregado, para leer cuando llegaran a su destino.Querida Avani:Esta será la prueba más importante que deberán realizar para así poder recibir sus alas, debes tener en cuenta que este año podrán hacer lo que ustedes consideren necesario para ayudar o no a los hermanos Petrov, pero además podrás vivir como humana y hacer cosas que cualquier chica haría, recuerda como eras, trata de que Avani y Acacia coexistan, solo así podrás tomar una decisión, pero sobre todo se feliz, sal del caparazón donde decidiste estar, todo está permitido siempre que sea realizado con amor, eres tierra, llanuras, montañas, dadora de vida y sostén de todos, pero hasta la tierra necesita que la cuiden.Siempre estar&eacut
Milos no había comenzado bien el día, después de que despidieran a sus padres y regresarán a la mansión una llamada lo puso de mal humor, aunque claro que no se necesitaba de mucho para que él se enfadara.— ¿Qué es lo que no entiendes Erick? ¡No me interesa si no llegamos con el tiempo, no podemos presentar algo después que ellos! ¡Soluciónalo ya! — Corto la llamada y se dio la vuelta para encontrar a Avani quien lo veía con sorpresa.— ¿Siempre tienes ese humor en la mañana? — Pregunto la joven con voz suave.— ¡Si, ¿por qué?! — respondió aun en un grito, Milos no quería ser descortés con la joven, pero cuando se enfadaba le costaba guardar las apariencias, era alguien que no se preocupaba por el qué dirán y siempre hacia lo que a él le parec&ia
Milos la miro con asombro, jamás creyó que de esa hermosa boca salieran tales palabras, pero para cuando se recompuso Avani ya estaba rumbo a la oficina de donde Nasima había salido minutos antes, por lo que él la siguió.Cuando entraron a la oficina de Kilian se encontraron con el joven rubio sujetando a una morena bastante curvilínea y a Yara parada enfrente de ellos con los ojos cristalizados y una mano en su mejilla.— ¿Qué sucede? ¿Qué hace aquí teresa? — inquirido Milos entrando a la oficina.— Yara, ¿qué sucedió? — Antes que la mencionada pueda decir algo la morena habló.— Yo estoy aquí porque soy la novia de Kilian, la pregunta es ¿qué hace esta trepadora oportunista aquí?— ¡¿Cómo mierda llamaste a mi hermana?! — Kenna entr&oacut
HORAS ANTES KENNAKenna busco a Yara apenas se levantó y la encontró en la cocina.— Hola Ara.— Enna, buen día. ¿Estas preparada?— No claro que no, y es por eso por lo que te buscaba.— ¿Necesitas calma?— Necesito que me apagues por completo. — dijo la pelinegra con toda seguridad.— Pero Kenna, eso es peligroso.— No, no lo es, iré a buscar a Nasima para que se relaje, sabes que de una brisa hace un huracán. — Ambas rieron a su broma, pero sabían que era así.Yara abrazo a Kenna y comenzó a sentir calor, pero lo soporto, ella sabía lo que guardaba su hermana en el corazón, ese dolor era tan grande, clamaba por justicia y venganza con cada latido.— Si pudiera hacer más por ti. — Se lamentó la joven rubia.
Horas antes Yara.Yara había absorbido la energía de Kenna, se sentía un poco agitada, como el agua cuando hierve, trato de tranquilizarse, y cuando Kilian la encontró regando las plantas que su madre tenía en la cocina ya estaba fría y calma como siempre.— Hola. —dijo el rubio tratando de sonar normal, como si el hecho de tener a una hermosa joven en su cocina solo a su vista no fuera mayor problema.— Buenos días, Kilian. — La sonrisa de la joven lo llevó a imaginar un collar de perlas, blancas y brillantes, algo digno de ver.— ¿Sucede algo? —pregunto Indy, al darse cuenta de que Kilian tenía cara de idiota.— Tienes una sonrisa hermosa. — respondió viéndola un poco embobado.— Si, eso dicen.—sus hermanas siempre se lo decían.— Te
La semana pasó, entre trabajo, almuerzos y cenas, los hermanos Petrov, estaban un poco frustrados, las chicas eran muy buenas en ayudarlos, pero había algo que no les estaba gustado y que cada vez era más irritable para estos empresarios, y es que las chicas levantaban los suspiros de más de un hombre en la empresa, por lo que siempre debían estar atentos, además tenían cada vez más dudas con respecto a sus asistentes, les sorprendía el nivel de comunicación que tenían, entre ellas , como con simples miradas sabían lo que las demás querían o sentían, a diferencia de ellos que seguían sin ponerse de acuerdo en nada, sus discusiones eran cada vez más fuertes y la máscara de tranquilidad que se habían colocado cuando las jóvenes llegaron, poco a poco caía dejando ver cómo eran realmente, ellas se esforzaban en buscar la solució
Avani estaba entrando en ese momento a la sala, y sonrió al ver que, por primera vez, desde que ellas llegaron, estos hermanos estaban teniendo una plática cordial, claro que nos sabia de que estaban hablando.— Disculpen, pero la cena esta lista. —Los Petrov la miraron como queriendo ver más allá del tierno rostro de la joven, por un momento se sintió incómoda, Milos lo notó, en esta semana él había aprendido a leerla.— Enseguida vamos Ani. — Le dijo de forma tierna. La voz suave del joven le gustaba a la muchacha, por alguna extraña razón, la hacía sentir segura, era como si estando a su lado nada malo le pudiera pasar. Y por supuesto que Milos no dejaría que nada le pasara, este joven sentía la necesidad de protegerla, ni siquiera él entendía la razón.Tomaron lugar cada uno enfrente de sus asistentes, la mesa e