La casa de la familia Suárez se llenó de completa alegría, pero solo de parte de Eduardo Suárez, los gritos de felicidad de Eduardo es nada más y nada menos que por la gran suma de dinero que recibió, a cambio de que su hija Alicia Suárez se comprometiera con el distinguido Marco Pérez, todavía no puede creer que un hombre tan importante y empresario en todas las ciudades del norte como lo es Marco, le ofrezca una gran cantidad para comprometerse con su hija menor por miles de millones de dólares, porque no eligió a Brenda, que es más hermosa y elegante, lo hizo pensar, pero no le importó porque recibirá una gran suma por usar a Alicia.
En la habitación de Alicia todo es un caos y como no va a serlo si ella busca el vestido perfecto para brillar en este día de compromiso.
-Listo sé que puedo. Saco un vestido negro con partes de brillo pegado al cuerpo, largo hasta los tobillos, con una abertura en la pierna derecha que la hace lucir sensual y elegante, además de un escote en la espalda.
-Marco, nunca me había visto vestido así. Me siento decepcionado cuando lo digo mientras me miro en el espejo, no puedo negar lo que siento, pero tengo que hacerlo.
No me maquillo en exceso, quiero mostrar mi rostro completamente natural y así poder revelar mi verdadera belleza, no dejo de compararme con mi hermana Brenda, pero soy más hermosa que ella y yo No lo digo porque sea engreído, me da un poco de vergüenza mostrar mis verdaderos colores, pero no puedo permitirme a Brenda. Me puse el cabello lacio a un lado para poder lucir el escote en la espalda, aún estoy impactada, creo que nunca me había vestido así, siempre fui casual y en tenis.
Me dirijo a la puerta de mi habitación para salir y bajo las escaleras, escucho que el escándalo que tenía mi padre con alegría disminuyó mientras camino por el pasillo, creo que cuando escuchan el sonido de los tacones hacen mucho más silencio veo una sombra al pie de la escalera, es de mi padre.
-Vamos, hija, date prisa, déjame verte. Suena muy desesperado.
Cuando bajo el primer escalón, fijo mi mirada en mi padre para ver su reacción, cuando lo ve se sorprende y mucho, termino de bajar los escalones y me giro hacia el sofá de la sala donde mi hermana Brenda y su mi madre Selena también tiene la misma cara que mi padre solo que ellos también notan la envidia que provoco cuando me visto así y muestro mi verdadero rostro, ignoro todos sus gestos les muestro una gran sonrisa y digo:
-Estoy listo, ¿nos vamos ahora? Lo digo con la gran sonrisa en mi rostro para que se molesten y me envidien un poco más.
- Hija mía, eres hermosa. Lo dice con orgullo, aunque sé que mi padre me trata así solo porque lo estoy beneficiando con dinero.
-Padre, vámonos, se está haciendo tarde. Brenda dice seria y de mal humor, va camino a donde está estacionado el auto y detrás de ella sale su mamá Selena.
- Vamos, hija mía. Me deja pasar antes que él, cuando llego al auto me abre la puerta para que me siente...
Camino a la gran mansión de la familia Pérez, mi hermana Brenda me quiso convencer de que me cubriera, la cara con maquillaje es tan astuta que lleva un estuche con ella para ver si me rendía a hacerlo, cuando me negué múltiples veces finalmente se quedó en silencio y pude pensar en lo que haré en el transcurso del camino, unos minutos después llegamos a la entrada de la gran mansión de los Pérez.
Como puedo olvidar todas las cosas malas que me pasaron aquí cuando vivía con ellos, solo de pensarlo me da un escalofrío en todo el cuerpo, sacudo la cabeza de repente para borrar esos malos momentos, vuelvo en sí y le sonrió mi padre, le pregunto:
-¿Llegamos padre? Digo esto un poco desconcertado para que no sea algo extraño que ya conozca este lugar.
-Claro, hija, ya llegamos. Todavía feliz. Nunca presté atención a este trato antes, pero pensándolo bien, mi padre me está vendiendo a un hombre por una suma de dinero, difícil de creer para otra persona, pero no para mí.
Mi padre no me deja abrir la puerta del auto y se baja rápido para hacerlo por mí, me ofrece su mano para que baje del auto, la tomo y me bajo de él y me paro a su lado mientras cierra la puerta, creo que debemos fingir ser familia perfecta, luego de hacerlo me ofrece su antebrazo para apoyarme y lo acepto, sé que todo lo hace para su beneficio, pero esto también lo aprovecharé, nos dirigimos a la entrada y al llegar me doy cuenta de que una figura esbelta está de pie. Apenas puedo sentir la puerta y mi corazón comienza a latir demasiado fuerte a medida que nos acercamos a él.
-Bu buenas noches Sr. Marco, esta es mi hija Alicia. Su voz tiembla un poco al dirigirse a él, es que este hombre es de temer.
-Marco-
-Encantado de conocerte, Alicia. Hablo con frialdad, pero cuando la veo por primera vez me sorprende mucho, aunque ella no lo nota, no es nada comparado con los rumores en Ciudad Norte, todos dicen que ella es la hija horrible de la familia Suárez y que nadie estaría con ella aún después de haber muerto, pero resulta que esta mujer tiene un rostro completamente hermoso, mientras lo pienso, saco mi teléfono y finjo estar enviando un mensaje, no me interesa tener su cariño a pesar de que es hermosa.
-Alicia-
-Encantada de conocerte. Lo digo en un tono completamente frío y sin darme la mano para mostrar rechazo de mi parte, aunque sé que por dentro mi corazón está derretido por ese hombre que nunca me mostró cariño, ni me buscó como mujer, pero Se que si él nos hubiera hecho las personas más felices, en mi vida pasada aprendí de enfermería solo porque él me lo había pedido, le tiene miedo a las agujas y también desconfía de todas las personas que trabajan en esa área menos de un médico de familia, me hizo estudiarlo para que fuera él quien se los pusiera y no sé por qué, para eso me dio un poco de confianza, tal vez no me odiaba del todo, recordando todo eso mi corazón se ablanda de nuevo y Sin querer dejo escapar una sonrisa, vuelvo en mí y miro a Marco para ver si me está mirando, pero es todo lo contrario, sus ojos están en su móvil, respiro, aliviada sabiendo que ni siquiera me doy cuenta.
-Discúlpeme, señor Marco, pronto se servirá la cena, ya pueden pasar al comedor grande para poder ubicarlos en sus asientos. Dice uno de los muchos camareros que trabajan en la gran mansión.
No nos dirigimos hacia el comedor grande de la familia Pérez, cuando veo de nuevo el espacio noto que no ha cambiado en nada, sigue siendo un comedor enorme con una gran mesa rectangular para 25 personas o quizás muchas más, anteriormente cuando íbamos a formalizar el compromiso nunca veníamos a comer a este espacio, en ese momento me llevaron directamente a la oficina de su firma y volví a mi casa. Sé que el comedor de la familia Pérez es una exageración, pero el padre de Marco siempre ha sido un hombre al que le gusta la excentricidad, siempre quiere destacar frente a todos y por eso creo que es uno de los más importantes de la ciudad. .Al entrar veo que Marco está un poco tenso y lo puedo ver en su rostro.-Marco-No puedo dejar de notar lo hermosa que es, todavía no puedo entender cómo los hombres en esta ciudad decían que ella era la fea de la familia, cuando me doy cuenta de que la estoy mirando, tengo que parar por un momento. , nuevamente, uso mi celular como excusa y finjo r
-Joven Alicia dije algo malo? El padre de Marco dice algo confundido.-No creo haber dicho nada malo señor Pérez, sé que como es el compromiso de su hijo mayor lo quiere celebrar por todo lo alto, pero para mí es algo exagerado hacer un compromiso normal, algo por el amor de Dios, Sé que sois una familia distinguida, pero me gusta no destacar y prefiero algo a puerta cerrada con más discreción. Sé que estas palabras pueden molestar al señor Pérez, no le gusta que nadie lo contradiga en sus decisiones y me siento un poco nerviosa cuando se lo digo.De repente, Marco voltea a verme sin ningún tipo de expresión y cuando creo que está pensando en decir algo, su padre habla primero que él:¿Por qué no quieres hacer algo grande con tu compromiso, jovencito? No sabes lo hermosa que eres, me imagino que debes tener una línea de hombres detrás de ti y aparte de eso, mi hijo también es uno de los hombres más deseados de toda la ciudad, codiciado por las mujeres, cualquiera podría tomar su lugar
-Alicia-Siento que su brazo roza sutilmente la parte del escote en mi espalda, inmediatamente se me eriza la piel y lentamente me envuelve con su brazo hasta que su mano llega a sujetar mi cintura, siento una descarga electricidad, creo que es más excitante y sin darme cuenta alguna de que estoy soltando un gemido de excitación:-Ahmmm…Trato de ocultarlo, pero mis mejillas son como un tomate rojo y mi cuerpo está muy caliente, por dentro siento excitación, este hombre todavía me hace sentir tantas cosas que no sé cómo puedo ocultarlas y más cuando nunca antes me había tratado de esta manera, trato de alejarme de él, pero desafortunadamente estoy tan drogado que no importa cuánto lo intente, no valdrá la pena hacerlo, mi poca fuerza ni siquiera le hace cosquillas. Me levanta y me lleva entre sus brazos y accidentalmente quedo pegada a su pecho, tanto que puedo escuchar los latidos de su corazón y está algo agitado, llegamos a las largas escaleras y el camino parece eterno, son tan la
-Alicia- -Cómo es posible que en una habitación tan inmensa como esta no encuentre una toalla para secarme. Me digo a mí misma, ya que estoy sola en la habitación, el efecto de la droga logra disminuir un poco más con la ducha fría, ignorando que estoy en la casa de la familia Pérez, decido salir del baño a la habitación completamente desnuda a ver si encuentro una toalla para secar mi cuerpo, busco y busco, pero no encuentro toalla, me froto la cien y respiro hondo para no enloquecer y explotar de verdad que no lo entiendo, después de unos segundos siento como si me estuvieran mirando trato de calmarme tal vez estoy loca me encuentro sola en la habitación y nadie ha tocado la puerta, pero los nervios me traicionan no sé por qué y decido dar la vuelta rápidamente, es él, Marco está parado en la puerta mirándome detalladamente sin pestañear. -¿Qué estás haciendo aquí? Digo en un tono muy nervioso y avergonzado, nunca antes me había visto desnuda. -Vine a traerte una toalla por si te
-Marco-Nunca antes una mujer me había hablado de esa manera, pero ¿qué descaro tiene ella para hablarme así, cómo puede enfrentarme cuando le hablo? ¿No me tiene miedo? ¿Será que no sabe quién soy y qué poder tengo? No me respeta para nada y lo peor de todo, como no puede desearme, cualquier mujer que se fuera a comprometer conmigo estaría completamente rendido a mis pies y más porque será la mujer más codiciada de la ciudad del Norte y tendrá todo lo que ella quiera. Mientras pienso en el carácter audaz de esa mujer, abro el cajón de mi escritorio y saco un puro mientras lo enciendo, me viene el recuerdo de su cuerpo completamente desnudo y húmedo porque no tenía con qué secarse, en cuestión de segundos mi miembro estará erecto solo de pensar en ella.-Pero qué demonios... Mi miembro está muy erecto, trato de borrar de mi mente el recuerdo de su cuerpo, pero creo que mi cerebro no coopera porque cada vez pienso más en ella desnuda y siento más excitación que antes esa mujer debería
Después del primer encuentro entre Marco y Alicia han pasado 4 días y no se han vuelto a ver, cada uno estaba concentrado en su vida haciendo sus deberes diarios, sin saber que pensaban el uno del otro, pero aunque cueste creerlo, Marco tiene sueños con Alicia y se está volviendo loco porque quiere que termine ya. Si bien Alicia no pensaba mucho en él, muy pocas veces le venía a la mente el recuerdo de él mirándola desnuda, pero hasta entonces, ella seguía con su vida como si nada hubiera pasado, visitando a sus amigos y trabajando en secreto.-Alicia-Después de un largo día termino de dejar el trabajo que le he ocultado a mi familia y me dirijo a la casa de mi padre, cuando entro veo a mi hermana Brenda y a su madre Selena sentadas en el sofá de la sala, y se me ha arruinado el día completamente de solo verlas.-Por fin llegaste, la pequeña se cree una reina que tenemos que atenderla, no estás en casa pero tampoco trabajas. Esta es Selena, la odio tanto.-Madre, no debe importarte p
-Alicia-Desde que llegué a esta gran mansión, Andrés me recibió afuera y también me acompañó a entrar y mientras caminábamos uno al lado del otro, decide hacerme una pregunta inesperada:-Puedes decir que no estás vestida así intencionalmente para estropear el compromiso, pero es que vestida de la manera más sencilla te ves más hermosa que antes, no creo que te veas de mal aspecto, todo te queda bien. Me sorprende un poco lo coqueto que es conmigo, en mi vida pasada me trató muy mal tanto que un día me encerró en una habitación para hacerle creer a Marco que me había ido con otro hombre, quizás fue cómplice de Breda. Lo miro y le digo con coquetería:-Gracias Andrés, tú también eres muy guapo. No sé que más puedo decirle.Mientras lo dice y yo le respondía, se había parado frente a mí, noto que la gran sonrisa que tenía se ha ido y ahora su rostro es serio, cuando de repente noto una sombra tras de mí, todo mi cuerpo tiembla, pero trato de que no se note, me siento aún más nervioso.
-Marco-Han pasado un par de minutos desde que Alicia dijo que si podíamos hacer un contrato completamente secreto y todavía no le he respondido, no sé qué decirle, ya que tal vez todo esto pueda ser una trampa y ella quiere dinero, mi la mirada está fija en el documento de compromiso que está encima del escritorio y cuanto más lo pienso, no le veo sentido si antes no quería comprometerme porque ahora sí, pero debe estar en secreto. Sigo pensando, pero, que le puedo encontrar algo de lógica a lo que me propuso, pero no le encuentro y solo puedo decir:-Sigue adelante, debo escuchar un poco más. Necesito saber muy bien qué trama esta mujer.-Podemos hacer un compromiso falso, es decir, casarnos y demás, pero cada uno tendrá su vida normal fuera del matrimonio. Está un poco nerviosa, lo sé porque no puede mirarme a los ojos.-Para qué tendríamos una boda, si vamos a tener una vida normal fuera del matrimonio, cualquiera en el ámbito público puede darse cuenta y hacer un escándalo que me