Narrador Omnisciente
Arizona se quedó rabiando molesta. Le parecía imposible que aquel estúpido le estuviera tomando el pelo. Cómo se atrevía a dejarla así, él tendría que estar rogando por estar en esa cama con ella y no largándose a mitad de la noche. Era casi seguro que era gay o peor aún, quizás estaba con otra mujer, quizás tenía una pareja estable y ella sólo era la tapadera para su vida social perfecta.
Ella no iba a permitir eso, ella tenía un prestigio social que defender y eso le parecía inaceptable en su vida. Ella no sería la tapadera para que su esposo se estuviera revolcando con otra.
Narrador Omsniciente Antes del mediodía se marcharon a la que sería la nueva residencia de Arizona. Se despidió secamente de su padre y bajo sin hablar hasta el coche de su esposo. Se cohibió de preguntar a donde irían, ya que no estaba de humor para escuchar una posible respuesta sarcástica y de mal gusto de parte del adorable y antipático comandante.Tan solo se sentó en el asiento del copiloto de el Chevrolet Corvette de Jack y observó como los paisajes desaparecían fugazmente de su vista por la velocidad en que él mantenía la marcha. Aquel coche era igual que su dueño, fuerte, controlado, misterioso y potente.Ya cerca de la frontera mágica el coche aminoró la marcha, habían llegado al destino. Se trataba de una finca un poco alejada del centro de la ciudad. Estab
Narrador OmniscienteLuego del episodio con la Ninfa unicornio cada uno salió en una dirección. Arizona subió a su habitación y Jack desapareció, pero esta vez por dos días seguidos.La tal Hænlüz rondaba la casa de vez en cuando husmeando, buscando a su Jasciel.«Si será puta, Ninfa descarada».Cuando Arizona bajaba las señoras del servicio la miraban de forma dura, con desprecio. Estaba más que claro que ella no era bienvenida allí, a pesar de estar casada con el señor de la casa solo era una intrusa. Debía salir de allí lo más rápido posible.
Narrador Omnisciente Allí inmóvil, con brazos y piernas encadenados con una gruesa cadena de un metal blanco que parecía Plata , por primera vez se dio cuenta de la estupidez que había cometido en seguir a Jack. Aquello había resultado todo menos lo que pensó.Su propia estupidez la había llevado a esa penosa y humillante situación, de la que no tenía manera de salir ilesa. Jack se desquitaría esta afrenta de algún modo, eso si no llegaba al verdadero fondo del asunto.«¿Que creía? ¿Que seguir a su esposo sabiendo sus antecedentes sería un día en el campo con la señorita Rizzos?»Él no hablaba, solo esperaba que los hombres presentes cumplieran su orden y daba pequeños paseos observando a su esposa. Era un experto disimulando lo que sen
Narrador Omnisciente La lluvia seguía cayendo torrencialmente en aquel lejano paraje. El viento se había hecho más fuerte y se escuchaba de fondo al mar furioso romper contra los riscos de aquel acantilado. Los truenos eran cada vez más fuertes sentenciando su cercanía. Cientos de piedras de granizo golpeaban los techos del galpón haciendo pequeños estruendos aislados que le pondrían los pelos de punta hasta al más valiente.El cuadro era realmente espeluznante, pero allí estaba Jack tan tranquilo como roca contemplando a su esposa encadenada retorcerse demencialmente luchando por escapar. La furia del comandante se había disipado y su semblante era tan neutro y sin expresión como de costumbre.
Narrrador OmniscienteEl miedo la invadió las manos sudorosas la delataban. Para colmo la iba a encontrar totalmente desnuda. Su temor era inmenso, no porque se tratara de un Arcángel, ella no le temería nunca a un igual. Solo el miedo de enfrentar a quien la convirtió la hacía morderse el labio inferior. Él no tenía derecho a reclamarle por su infidelidad, ni siquiera sabía si en las costumbres de los arcángeles se reconocía la infidelidad como censura, o eran libre de acostarse con quien quisieran. Ella era libre de hacer lo que quisiera, ella había pasado sola por lo peor.Jack estaba cargando una escopeta de gran calibre mientras que la protegía con su cuerpo por si el arcángel entraba por la puerta que golpeaba en cualquier momento. Pobre Jack, su vida entera matando bichos lo hacían creer que era el único capaz de pro
Narrador Omnisciente Después que se hubo marchado Egnar, Arizona recogió su ropa del piso y comenzó a vestirse. La blusa estaba rasgada y descargó su mal carácter en ese hecho, le lanzó una mirada al tal Jasciel hecha una furia. Tendría que deambular medio desnuda, y aunque había sido una de las mejores noches de su vida mientras estuvo entre los brazos de Jack, jamás lo admitiría. Sus alas por el momento estaban a salvo...o no... el estupido de Egnar sabia que ella era un arcángel, podía vengar su traición contándole a su padre Richard Bronwbear o al propio Jack Moore. Otra razón para asesinar a ese maldito con sus propias manos.Desde que se convirtió
Narrador Omnisciente Las palabras de Jack daban vueltas en su cabeza. No podía concentrarse en nada más. ¿Qué tipo de trabajo realizaba junto a su padre y el esclavo alado?. ¿ Qué podía ser peor que esos galpones llenos de criaturas sobrenaturales que eran asesinadas y sus cuerpos arrojados al mar, como si no poseyeran alma?. No podía imaginarse que podía ser peor que eso. No quería ver a Jack involucrado en semejantes atrocidades que lo dejaban mal parado ante sus ojos, y lo alejaban cada vez más de su humanidad arrancando lo poco que quedaba que valía la pena salvar de él.Algo grande manejaba su padre, cuando Jack ni siquiera sabía cuándo regresaría. El tiempo era lo d
Narrador Omnisciente Jack la llamó para sacarla del trance, ella se había paralizado totalmente.—¿Ocurre algo?— preguntó enarcando una ceja y tirando suavemente a Arizona por la mano para hacerla caminar.—Eh, no, yo solo me distraje — musitó ella sacudiendo la cabeza.—Parecía como si hubieses escuchado algo—insistió.—No, no te preocupes, solo tuve un deja vu— al escuchar esto el sonrió.—Así que mi bella esposa estuvo casada