En ese momento, Jessica se acercó y también estaba muy sorprendida —No esperaba que ni siquiera tú pudieras hacerlo.—Jessica…Irene la miró de reojo con sospecha —¿De qué estás hablando?Jessica se rio y sacudió su cabeza —Querida Irene, finalmente regresaste, y tengo mucho que decirte, ¿por qué no buscamos un lugar para conversar?Jessica pensó, es mejor unirse por el momento con Irene, para ambas Astrid es su enemigo común.Astrid regresó al apartamento y fue directamente a su habitación. Se acostó en la cama para descansar su débil cuerpo, pero no podía quedarse dormida, la imagen de Irene seguía dando vueltas en su cabeza.Esa noche inolvidable, cuando escuchó la frase Irene salir de su boca, fue el golpe más fatal para ella. Y ahora la persona estaba frente a ella, Astrid sintió verdadera desesperación.—¿Por qué no duermes un rato? —Susi la miró preocupada.Cuando la encontró, estaba en cuclillas al costado de la carretera, su cuerpo hecho una bola, y lloraba lastimosamente. Al
En medio de la noche, la luz de la luna iluminó a la persona acostada en la cama, parecía que estaba teniendo una pesadilla, frunció el ceño con fuerza. James entró por el balcón, este daba directamente a la habitación, se acercó a su cama lentamente.Miró la hora, eran solo las ocho cuando ella se quedó dormida, su expresión era incómoda. James la miraba con preocupación, más de lo alguna vez imagino sentir por esta mujer.«¿Por qué ella insistió en no ir al hospital?» «Debería investigarlo con cuidado»Se sentó en el borde de la cama, extendió la mano y le acarició la mejilla, observando cariñosamente su rostro dormido.«¿En qué estaba pensando?»Todo su cuerpo estaba congelado, las manos están muy frías.La cuerda en su corazón se movió, suspiró y sacudió la cabeza con angustia —Amor¿Por qué no me dejas cuidarte?Astrid, que estaba dormida, su rostro estaba pálido y sus labios se fruncieron dejando salir un gemido de dolor, dijo suavemente —No, no me alejes.James frunció el ceño l
James limpió cuidadosamente su herida, tratando la herida con cautela, dejando atónita a Astrid. Su mano parecía tener un poder mágico, y cuando tocó su tobillo, hubo una ráfaga de electricidad, que viajó por todo su cuerpo.La cara de Astrid se enrojeció, trago un poco y no pudo evitar preguntar.—James, ¿por qué cambiaste tanto de repente? Eres bueno conmigo, te pido por favor que no lo hagas. No me dejes malinterpretar las cosas, en ese entonces fue tu amabilidad lo que me hizo pensar que también sentías algo por mí, y cometí un gran error. No volveré a pasar por algo igual. Sé que ahora te resultó interesante, y buscas que caliente tu cama de vez en cuando. Pero te lo digo, no estoy dispuesta. Lo que sucedió esa noche…— ¿Eso crees, que quiero que me sirvas de vez en cuando?La voz fría del hombre hizo que ella frunciera el ceño.«Como quieres que no lo piense, si antes era peor que un cuadro en tu presencia y ahora no dejas de aparecer frente a mí»—¿Entonces, por qué apareces en
Astrid abrió la puerta, y la mujer que entró era alta y esbelta, con cabello castaño sobre sus hombros, de hecho, ella no era diferente a hace tres años.No ha cambiado en absoluto. Pero, ella sí ha cambiado mucho.—Astrid, tu casa es bastante hermosa — Irene sonrió y se sentó en el amplio sofá de cuero.—¿Te parece? No le he prestado mucha atención. Lo hicieron como un regalo para mí, hace unos días y aún no he tenido tiempo de admirarla.Irene levantó las cejas —Oh, ¿Algún admirador, quizás?—Tal vez — dijo Astrid, mientras se sentaba en el sillón frente a Irene.—Como te darás cuenta me lesioné un poco y no puedo salir, así que tuve que invitarte aquí. ¿Apenas llegaste anoche? Vi tu entrevista hoy, por lo que me imagino que debes estar muy ocupada, me siento honrada de que saques tiempo para mí.Irene sonrió levemente —Por supuesto que sacaré tiempo, hay muchas preguntas, y quiero saber la respuesta cuánto antes.Irene fue directo al grano. Ella no perdiera tiempo con suposiciones,
Cuando Carlota llegó a casa de Astrid, ella estaba sentada en una silla junto al balcón, tomando el sol, observando a la gente que transitaba por la calle.Inesperadamente, cuando se abrió la puerta, ella entró con un objeto grande.—¿Qué es eso?—Ah, eso es un regalo para ti.—¿No habías dicho que era un perfume? ¿Es una botella tan grande? —Astrid se rio.Carlota negó con la cabeza y puso el paquete sobre la mesa junto a ella y dijo misteriosamente —También hay un perfume. Pero, hay un regalo especial para ti. ¡Vamos, ábrelo ya!Ella también estaba muy desconcertada. Cuando lo abrió, se quedó sin palabras.Una nueva lámpara de cristal de sal.Al igual que la que le regaló a James en ese entonces. Ella la acarició, emocionalmente complicada.Su amiga no vio la reacción esperada, frunció el ceño y preguntó —¿Qué pasa, no te gusta?Cuando James se lo entregó, claramente dijo que este era un regalo, que Astrid apreciaría.Astrid levantó los ojos y miró a su amiga que acababa de regresar
Astrid se quedó atónita y negó con la cabeza —Tu razón es descabellada.—Esa es mi razón, ¿qué otra cosa podría ser?—preguntó él a su vez, con la mirada encendida mientras miraba fijamente sus mejillas cada vez más rojas.—¿Quién sabe lo que estás pensando? Sal de aquí o llamaré a la policía.Se sentó de forma dominante, sin afectarle y sonrió con suficiencia —Bien, puedes llamar a la policía.—¡Bien!— miró al hombre con asombro, no tenía miedo a las amenazas.—Si no tienes miedo de que el público sepa que escondes a un hombre en tu casa, puedes seguir adelante y llamar a la policía —Fue franco al respecto, levantando una ceja en señal de triunfo.«Sí. ¿Cómo podría dejar que alguien supiera que James estaba en su casa?»Astrid se sentía muy frustrada porque él tenía razón.—¿Y tú, no tienes miedo de que la gente sepa que te has colado en casa de una actriz en plena noche?—¿Quién ha dicho que he entrado a escondidas? ¿Quién se lo creería si dijera que me has abierto la puerta?—Solame
Irene abrió mucho los ojos y se inclinó hacia Jack, su rostro cambió —¿Quieres decir que ella y el productor…?Jack sonrió —¿Es eso importante de todos modos? Mientras los ángulos sean ambiguos, que se haya ido a la cama o no, será simple.—Jack, dime que no hizo nada con Tom al final, quiero escuchar la verdad —dijo Irene con calma.El hombre respondió impotente y sarcásticamente.—Es realmente innecesario, simplemente se enredaron y Tom no tuvo tiempo de hacer nada. Te digo que mientras difundas el video, es suficiente para causar daño a su imagen, ¿qué te preocupa?Ella negó con la cabeza — Lo que quiero hacer es recuperar lo que me pertenece y no quiero hacer que me perjudique frente a James.Jack se burló y dijo —Oh, Irene, tan noble y elegante. ¿Cómo puede hacer tal cosa? — Jack es un verdadero villano — Pero, no intentes fingir conmigo. Recuerda que yo estaba ahí esa noche hace diez años. Sé lo que de verdad sucedió. — El hombre suspiró — Pero está bien, lo haré por ti. No te e
Astrid miró a su alrededor, y tosió —¿Qué quieres? Tengo algo que hacer.—No te retrasaré, hablaré contigo de camino — Con eso, tomó su mano y la llevó al coche.Le guiñó un ojo a Susi, quién la siguió hasta el coche.James no se opuso, pero pidió a White que condujera.El ambiente en el auto se volvió un poco incómodo durante un tiempo. La mujer sentada a su lado solo miraba por la ventanilla, sin prestarle la mínima atención, mientras que White se concentraba en conducir y Susi miraba su teléfono móvil.—¿Firmaste el contrato? — preguntó él a sabiendas de la respuesta.—No se para que preguntas, sabes la respuesta de todos modos.—Así que nos dejaste de lado y fuiste a la casa Versace sin tenernos en cuenta, ¿sabes que tenemos derecho a pausar todo tu trabajo y dejarte fuera por el tiempo que consideremos necesario?—Si quieres hacerlo, no me opondré. Lo tomaré como un descanso. — dijo Astrid con deliberado desafío.Ella sabía que no lo haría. A no ser que no quiera que siga ganando