La mirada fría de Selena se encontró con los ojos tiernos color canela de Brayan, algo que hizo que ella de pronto sintiera un ardor en el pecho.La escena era cubierta con un silencio. Solo las miradas hablaban. Se podía notar la clara preocupación que tenía Brayan al igual que la inseguridad al intentar hablar. Sabía a ciencia cierta que la chica que sostenía la navaja era capaz de matar a su hermana y mandar a quemar su cuerpo, y eso le creaba cierto miedo.- Se-señorita...- dijo con un nudo en la garganta.- ¿ Eres Ivi ?- preguntó mirando a Ivi- S-Sí - respondió trás tragar grueso.- Eres muy irrespetuosa...- dijo y sonrió - Te mataría, pero estoy de buen humor...La soltó y ésta se alejó tociendo exageradamente. Brayan quiso acercarse a su hermana pero Selena le detuvo poniendo su mano sobre su pecho.-¿ Cuál es tu nombre?- preguntó- Brayan, señorita...- respondió intentando contener sus sentimientos.- Tu hermana está bien...- dijo y le miró fijamente - Ahora dime,¿ Dónde está
— ¿Y bien?...— preguntó tomando asiento.— ¿ Qué estás haciendo Héctor? — preguntó tomando asiento — Creí que no seguirías las reglas del círculo o por lo menos no a la perfección...— Formo parte del círculo¿ Por qué no seguir las reglas?¿ A caso tú no las sigues en la base en la que estás...?— No, si las siguiera tú ya estuvieras muerto...— dijo en seco — Pero ya que tú si sigues las reglas dime— se levantó y caminó unos pasos hacia la ventana más cercana — ¿ Cuándo algún hijo de puta de vuestro maldito círculo vendrá a por mí?— Nadie vendrá a por tí— Respondió el mayor con claro enojo.— Ya veo¿ Me harán como a las otras chicas?¿ Cierto?— se acercó a la mesa de su hermano dando un golpe que hizo eco en toda la habitación.— Siéntate...— Me van a maquillar , prepararán una cena elegante, bajaré por unas largas escaleras y me encontraré a unos tipos vestidos de negro, todos mirándome a mí....—¡ Ya basta Selena!— ¡Basta tú !— gritó y se acercó aún más — Dime, Héctor ¿ Me quieres
(Londres, 2013)Hacía ya tres año desde la muerte de su madre, Kim en aquel entonces era una niña callada y solitaria, a eso se le sumaba la falta que le hacía su hermano, ese que prometió siempre cuidarla, ese que se fue para seguir los mismos pasos que el desgraciado que una vez fue su padre.« Huérfana»Era la palabra que más se repetía, en las mañanas, en las noches, a cada segundo de su desdichada vida.Aquel día de primavera había tenido que asistir a un evento organizado por un amigo de su padrastro, Christopher, que en aquel entonces era el único apoyo que tenía.Todos los invitados iban de etiqueta, la elegancia no era nada comparado con el lugar en el que iban a celebrar aquel evento. Las luces, las flores, las fuentes de aguas cristalinas, todo era hermoso, aunque ante los ojos indiferentes de Selena todo eso era una estupidez « Tanta decoración para hablar de sus negocios sucios, repugnantes de mierda» se decía.Al dar comienzo el evento ella se posicionó en lo más alejado
El día pasó de largo con Selena instalándose en su cuarto, la casa en completo silencio, Regina dormida y Héctor todavía trabajando.— Señor...— entró Ivi tocando a la puerta.—¿ Qué quieres?...— preguntó sin si quiera mirarla, era lo normal, Héctor casi nunca la miraba.— Bueno, Martha me mandó a preguntar si quería algo en especial para la cena...— mentía.— No es un día especial...— respondió firmando unos papeles.— Su hermana ha llegado y...— He dicho que nada en especial...— dijo levantando la mirada para encontrarse con los ojos inocentes de la pequeña.— Bien...— dijo y se destinó a salir.— Ivi...— Héctor la detuvo.—¿ Sí?...— Procura no encontrarte con Selena...Eso sonó más a una advertencia que a una orden.— Claro, señor...Se retiró y volvió al lado del jardín en el que se había quedado desde la mañana trás la discusión con su hermano.Se sentó en el césped, respiró hondo y miró el hermoso tiempo que hacía.— Lo siento, sé que soy una idiota...— dijo para sí misma — Lo
Héctor llevaba tiempo sin dormir pero finalmente lo había hecho, lo malo es que el cerrar los ojos y descansar era algo casi imposible para su sucia conciencia.«Monstruo»Otra vez era esa voz que lo atormentaba aún estando despierto, esa voz rota y cansada, esa que varias veces le suplicó que se alejara de todo, esa voz que tanto le dolía.— Mary¿ Por qué te enojas conmigo? Él iba a matarte — gritó ya estando en la sala.— He criado a un monstruo...— repetía la mujer haciéndose bolita mientras veía el charco de sangre que había formado en su cuarto, justo bajo su esposo.— No soy un monstruo... No soy un monstruo, Mary...— se limpió la sangre que tenía en las manos — Solo hice lo que debía...—¿ Ésto debías hacer?— gritó la mujer parándose frente a Héctor.— Tenía que elegir entre matarme a mí por ser débil y no poder ver cómo ese maldito te golpeaba, o matarlo — miró a su hermana quien había asomado desde la puerta de su cuarto.— Me has dejado viuda y has dejado a tu hermana huérfa
Regina abrió los ojos al sentir que algo se movía de manera exaltada a su lado. Se dió la vuelta encontrándose con una forma en la que nunca había visto al mayor. Estaba muy sudado, pálido y expresaba ciertas emociones, a parte de lo incómodo que se veía.- ¿Estará teniendo una pesadilla?- se preguntó acercándose aún más -¿ Debería despertarlo?...Prendió la luz de su lado de la cama viendo con más claridad al mayor. Su rostro mojado y pálido, se veía vulnerable e inocente.No sabía que hacer por lo que se quedó mirando sus rasgos. Su cabello se veía más oscuro, tal vez porque parecía estar mojado. Acercó su mano con duda al cabello del mayor apartando los mechones que se habían pegado a su cara. Su piel estaba fría y su respiración cambiaba de lenta a agitada en poco tiempo.-¿ Qué estarás soñando?...- susurró y lo miró de nuevo - Será que...Se detuvo al sentir como agarraban su mano con fuerza, miró su muñeca dándose cuenta de que el mayor había despertado. Al mirarlo tenía los ojo
Septiembre, ese mes que para algunos es lindo y para otros pesado. Ese aire fresco que golpea las hojas de los árboles, el Sol, el lindo cielo. ¿ Cómo podría ser tan malo su llegada? Tal vez no era su llegada sino lo que ésta traía consigo.(Francia 2018) Flashback Como algo esperado desde hacía mucho tiempo, llegó ese día tan anhelado. Otra vez se realizaría una elección, una que sería más difícil de lo que todos esperaban.En aquel edificio de las afueras de la capital se reunieron. Aquella mañana tranquila no era más que pura apariencia, al cruzar las puertas de vidrio transparente la tensión de aquella sala del piso XXX era más que palpable.En una silla negra decorada con algunos diamantes, algo extravagante, estaba sentado quien iba a presidir la reunión, como lo había estado haciendo en los últimos años. A su alrededor en lugares menos llamativos estaban el resto de los miembros, incluidos Héctor, Víctor, Fernando, Christopher, Will y el pelirrojo. Los dos últimos contemplando
(Italia, 2006 )— Todo será fácil y sencillo...— dijo un adolescente pelirrojo con un tono suave — Tendremos que ser serios y demostrar que aún siendo unos adolescentes podemos manejar la situación...Se notaba su nerviosismo a distancia, sus dedos hacían el típico juego de rozarse y separarse, unas gotas de sudor se formaban en su frente y su respiración estaba mus agitada, tan vez era mala idea que el pelirrojo representara a su padre tan pequeño; sin embargo, tenía a su lado a Héctor, aquel chico serio de ojos gris oscuro, rostro serio y con una seguridad completa.Ambos chicos vestidos de trajes negros y con maletines en mano entraron por la enorme puerta que los separaba del grupo que los esperaba. El pelirrojo caminaba con pasos algo dudosos, mientras Héctor mantenía la calma y sus pasos eran con determinación.Se acercaron saludando al grupo y ocuparon sus respectivos lugares.— Bienvenidos niños...— dijo el viejo de entre todos.Dariel bajo la mirada por el comentario, pero Hé