Abby Los besos continúan por largos minutos hasta que la intensidad disminuye, dejando mi boca sobre la suya sin tener movimiento alguno —Alessandro— Susurro—Alessandro— Vuelvo a pronunciar, pero sigo sin tener respuesta alguna.Intento moverlo, y me percato de que está completamente dormido. Sé quedó dormido mientras me besaba, no sé qué pensar al respecto ¿Tan mal beso? De todas las preguntas que podría formular hacia mi misma, me hago la más insignificantes y menos importante. Aquí lo que debería estar preguntándome verdaderamente, es qué va a pasar mañana. Todo esto ha sido una contesta locura, un completo error que no se puede volver a repetir más nunca en la vida. Solo espero que cuando amanezca, Alessandro no recuerde todo esto que pasó o que lo ignoré completamente. Porque empiezo a sentir un poco de vergüenza, no puse los límites que debía y simplemente me dejé llevar por el momento. Son cosas que no deberia permitir y mírame aquí, sin poder formular o algo coherente de
Alessandro Desde que Abbygail se marchó, no he dejado de escuchar gritos e insultos de parte de Keysha y la entiendo. Cualquier persona que hubiese encontrado una escena como esa mal pensaría todo, incluso yo. A decir verdad, no estábamos tan separados. Estábamos compartiendo un abrazo inconsciente en medio del sueño. Abbygail estaba aferrada a mí como si fuera una almohada y puedo decir que hace muchos días que no descansaba de esa manera. Sé que es un error pensar así, pero me sentí tranquilo con su compañía. Suena raro, pero sentí un acercamiento de protección. — Ni siquiera te atreves a decir algo. Defiéndete— Keysha grita. Aunque es una casa grande, podría jurar que los vecinos más cercanos están escuchando— Ya te he dicho que no pasó nada. No tengo más nada que decir — expreso, sin ganas de seguir con esto — Seguramente le estabas enseñándo anatomía — habla con ironía. — Creeme que si estuviera haciendo tal cosa. No te enterarías, porque seguramente te dejaría antes de hac
AbbyHa pasado una semana desde el suceso. No puedo mentir me siento de la mierd*, es muy difícil para mí aceptar que la persona con la que viví tanto tiempo quiso abusar de mí. Es tan asqueroso recordarlo y aunque no debería sigo sintiéndome sucia. Llevo días en casa. Me siento una mala madre por dejar abandonada a mi criatura, pero no puedo ver a mi niña y decirle que su padre es un abusador. Sé que ella no lo entiende todavía, si le cuento no va a comprender nada de todo lo que ha estado sucediendo, pero yo no me siento fuerte para ella, no me siento yo y eso me duele. Me duele muchísimo no poder acercarme a mi hija, no puedo imagina que hubiera sido de mí si Alessandro no llega en ese momento. Por un lado estoy tranquila, él y Kerrison se han encargado de la niña. Muchas personas pensaran que soy una loca al dejar a mi hija en manos de personas que no son mi familia aunque ni siquiera tengo una, mi unica familia es Emily. En estos momentos confío más en ellos que en cualquier o
Alessandro Tres días sin cruzar palabras con Abbygail, tres días en dónde ha estado evitando y trato de entenderla pero no puedo. No sé por qué me estoy torturando a mí mismo. Mi cabeza me dice que debo dejar las cosas así, que es lo mejor para ambos; pero, mi corazón dice que no lo haga, que me acerque y lo intente. La pregunta es ¿Qué voy a intentar? ¿Hasta dónde quiero realmente llegar? Si bien, tengo claro que tipo de mujer es Abbygail y no está en mis planes joderle la vida, porque no se lo merece. Por otro lado, acabo de salir de una relación, no sé qué mierd* me pasa. No puedo controlar lo que siento y si por mi fuera, arrancaría cualquier sentimiento que pueda confundir las cosas. Me estoy desconociendo, estoy actuando como un jovencito enamorado por primera vez y ni siquiera un joven actúa de tal manera.He dejado miles de mensajes a su móvil, pero todos están sin respuestas. — Abbygail, necesito un informe urgente de las cuestas financieras de este mes de las empresa de At
Kerrison Aless se fue, dejándome con esta manada de imbéciles buenos para nada. — Quiero que me digas, qué es lo que le haces a mi hermano para tenerlo tan contento. Llevas muchos años trabajando aquí y todavía no comprendo las razones — Thomas habla, dirigiéndose hacia mí — Qué te puedo decir, seguramente soy muy bueno en lo que hago. Es más, te lo aseguro, soy tan bueno que tú ex esposa me vive texteando para que salgamos cualquier día de estos — Le contesto, guiñando un ojo y la sonrisa se borra de su caraRealmente no comprendo por qué siempre han tenido ese tipo de odio o resentimiento hacia mi, nunca he hecho algo relevante que pudiese ser la razón. — Sigues siendo todo un idiota — Es lo que me responde — No lo discuto, soy un diota con mucho estilo, créeme — Me levanto y me dispongo a salir.Al llegar a la puerta, recuerdo que tengo que enviar algunos archivos desde el dispositivos de Alessandro. — Victor, dame la Laptop — Me doy la vuelta, pero este niega con la cabeza —
Abby — Papá Alessandro, Papá Alessandro me quiere —Emily está despertando de la anestesia y dice cosas sin sentido — Mamá es la reina, Alessandro rey y Emi princesa — vuelve a hablar. Volteo mi mirada hacia donde Alesaandro y él intenta ocultar una pequeña sonrisa, mordiendo su cachete— Creo que se está confundido — Digo, nerviosa — Tranquila, no me molesta — Deja de esconder su sonrisa —¿Cómo está la bebé más preciosa del mundo entero? — Hablo con voz de niña pequeña cuando por fin parece reaccionar, luego de decir un montón de palabras sin sentido — Tengo hambre, mamá — Intenta pronunciar Emi con mucha dificultad. — Alessandro al rescate — Se escucha la voz de él detrás de mí — No creo que pueda comer todavía — Le digo— Voy por el doctor, tengo que preguntar si puede comer — Me informa y asientoMe abro un espacio a su lado. Alessandro ha pedido un cambio de habitación y parece todo una una suite de hotel. El espacio es muy amplio, tiene un lugar de descanso para los fami
Alessandro— Hogar, dulce hogar — Pronuncio al llegar a casa. Ya está todo completamente instalado para Emily en la habitación de la planta baja. El grupo médico se encargó de preparar algunos equipos y todo lo necesario para ella. Emily llegó dormida, estoy ansioso porque despierte y vea todo lo que tiene para ella. Me encargué en tiempo récord de dejar algunos juguetes en su habitación y unas cuantas cosas de niños para que esté muy entretenida. — Esto es muy lindo — Pronuncia Abby después de un largo silencio — Lo mejor para la princesa. Ven, te enseñaré toda la casa — Le aviso y salimos de la habitación.Procedo a mostrarle cada rincón de mi hogar, antesala, sala, estudio, zona de recreación, cocina, entre otras cosas — y esta es mi habitación. Si necesitas algo no dudes en venir a pedirlo, en cualquier momento y a cualquier hora — Entramos y le muestro. Aunque no es algo que desconozca, ya había estado antes en este lugar y lo recuerdo perfectamente. Sin embargo, hay muchas
Abbygail Han pasado más de dos semanas desde que prácticamente nos mudamos a casa de Alessandro. Emi está muy contenta con su nueva casa, dice que vive como una reina. No sé de dónde saca tantas cosas, a su corta edad es una niña muy inteligente. Aveces me aterra su capacidad de hablar tan fluido— Quiero vivir aquí, siempre — Habla mi hija — Puedes hacerlo, pequeña — Le responde Alessandro. Es la hora del desayuno, Emi ya se encuentra mejor y su recuperación ha sido favorable. Por ello, ya se desplaza por muchos lugares de la casa pero debe estar en supervisada por un adulto. Las enfermeras ya no se encuentran estables dentro de la casa, solo vienen en cierto momento a aplicar medicamentos y realizan algunas terapias de respiración. Cuando Alessandro se encuentra en casa, siempre comemos los tres juntos en la mesa. En ocasiones Román y Letty se unen a nosotros, esta última se ha convertido en una gran compañía para mí, de manera que no me siento tan sola en una casa tan grande.