Entre abrí los ojos, la escalera estaba desplegada, pero la puerta se había vuelto a cerrar, ¿Qué me había agarrado del brazo?, todo mi cuerpo dolía, no podía moverme, mi pierna cayó en una rara posición contra la tina y mi cabeza contra el suelo, mi brazo pulsaba, como si lo que me agarró del brazo me hubiera intentado quitar la piel.
—¿Qué ocurrió?
Mis ojos fueron hacia la puerta, ni siquiera había escuchado que la habían abierto, Lide estaba parado ahí observando mi cuerpo tendido y adolorido. Él miró la escalera desplegada y luego me volvió a mirar pareciendo comprender lo que había ocurrido.
Vaya, por primera vez en casi un mes Lide volv
Su madre.La señora Brete, creo que su nombre era Danna, era lo único que Calma había mencionado de su madre, porque en los tres meses que llevaban aquí no la había visto ni nadie había hablado de ella, yo simplemente supuse que se la mantenía trabajando o algo así, nunca le di importancia, pero ahora sabía por qué no la había visto nunca, estaba encerrada en la azotea, ¿pero qué le había pasado?Miré mi brazo, los rasguños estaban ahí, los rasguños que esa mujer me había hecho, de seguro la tenían allá encerrada por alguna razón, parecía peligrosa. Salí del baño a la habitación de Calma rápidamente, pero el golpeteo del techo me hizo imposible dormir
—Calma —gemí con el corazón en la boca—. ¿Qué mierda? ¡Casi me matas del susto!Ella soltó una ligera carcajada y negó con la cabeza pareciendo un poco apenada, tendió la mano para ayudarme a levantar y yo se la acepté.—Perdón, perdón —dijo, su sonrisa menguó un poco—. Venía a decirte que sé lo que pasó ayer... con Lide. Iba a hablar contigo en el almuerzo pero ya sabes... la guerra de comida.Me quedé un momento confusa, ¿sabía la conversación que tuve con Lide? Mierda, ahora seguramente me recriminaría por no haberle tenido la suficiente confianza como para contárselo yo. No podía creer que Lide l
La dichosa presentación de Halloween, los chicos de teatro, los músicos y las bailarinas en una presentación conjunta en el teatro de la escuela, había salido bastante bien, por primera vez fui una de las principales y no la chica del fondo, pero ahora me daba cuenta que no había otra emoción, en mi cabeza creí que eso era todo lo que importaba para ser alguien importante en el baile, pero comprendí que de igual forma todos los espectadores observaban el conjunto de bailarinas por igual, observando todo el show, no a una bailarina.Estuve traumatizada todos estos años por algo que realmente no tenía tanta importancia, solo tenía importancia para mí y mi salud mental.Vaya desgracia, al menos todo salió bien y mi madre me regaló un ramo de r
Calma me estaba pintando las uñas de los pies de color negro, ambas escuchando el último álbum de Sam Smith, sentadas en el suelo, cuando de repente el sonido de la ático como si gruesos tacones martillaran el suelo resonó alrededor.—¿La señora Smith no se aburre estando sola allá arriba? —pregunté intentando no demostrar lo atroz que me seguía pareciendo que la tuvieran encerrada en la ático.—Mamá nunca está aburrida —se limitó a decir Calma sin alzar la vista de la pintura que aplicaba a mis pies.Sabía que no debía insistir, pero de verdad seguía teniendo curiosidad, así que pregunté:
Él me observó por un momento antes de mirar a la ventana, mis ojos involuntariamente bajaron a su torso y a los tatuajes de sus brazos antes de finalmente recorrer sus piernas musculosas por el fútbol, ¿Cómo sería verlo sin ese pantalón...?Concéntrate. No lo deseas.—Cuando era pequeño, tal vez tenía 5 o 6 años —comenzó a decir Lide—, muchas veces caminaba sonámbulo, una de esas veces que caminé dormido era cuando estábamos de vacaciones a una cabaña cerca de un rio, era de noche y caí en un profundo pozo de agua, no podía respirar, no podía salir, ni siquiera podía despertar, mi madre fue la que me sacó de ahí, estaba casi muerto. Casi todas las noches sue&
Al parecer Lide no sabía contar, pero no me importaba, no quería que me diera tiempo para apartarme. Cuando sus labios impactaron contra los míos fue como si todo volviera a la normalidad, como si fuera mi hogar, como si todo estuviera bien.Su lengua jugó con la mía y me pegué a él sintiendo todos los músculos de su cuerpo presionar el mío, sentía que la ropa era un estorbo. Nuestro beso se volvía cada vez más desesperado, incluso frenético, casi no podía ni siquiera respirar, me atreví a morder su labio inferior y lo sentí estremecerse cuando soltó un pequeño gemido sobre mis labios.Me encantaba cada vez que hacía ese sonido por mi culpa.Sus manos se
Ella tenía la mirada fija en mí, había algo en su expresión analítica que me estremeció por completo, como si estuviera preparada para atacarme. Iba a dar un paso atrás intentando no moverme, pero de súbito ella me agarró del cuello y me pegó de la pared, solté un gemido de la impresión, era tal vez de mi tamaño y contextura, pero su fuerza era impresionante.Se acercó un poco, su nariz pareciendo olfatear el miedo en mí, sus ojos observándome con detenimiento.—Eres tú —acusó ella, su voz extrañamente dulce pero escalofriante.¿Qué?—Señora Brete por favor
¿Cómo? ¿En qué momento?Era imposible.Jamás me drogaron, jamás me quedé inconsciente, jamás nadie que no conociera se acercó a mí y me marcó el cuello, era como si simplemente hubiera aparecido. Pasé una mano por encima, la tinta estaba seca pero no se veía permanente, mi corazón comenzó a acelerarse ¿desde hace cuándo había estado marcada?Escuché el cerrojo de la puerta, me coloqué el suéter rápidamente y solté mi cabello para poder abrirle.—¿Por qué cerraste? —preguntó mi madre mirando dentro de mi habitación, como si quisiera atrap