Alejandra Marie CostaLas siguientes semanas transcurren sin novedad, aunque nuestras vidas son constantemente monitoreadas por el equipo de Axel no damos un paso fuera de la casa sin que se una a nosotros alguien de su personal hoy veremos a nuestro bebé realizaran la ultrasonografía más esperada por Richard.Donde finalmente el medico nos revelara si tendremos una niña o un niño.—Richard me parece sorprendente que ahora sea el encargado de ver a tu hijo por primera vez parece tan distante cuando hacia el mismo procedimiento con tú madre cuando ella también tenía las veintidós semanas mírate ahora eres un futuro padre ¿Dónde quedo el pequeño Richard que siempre pateaba a su pobre madre? Hasta llegue a pensar que un día serias un futbolista parece que apenas fue ayer eso me recuerda que me estoy volviendo viejo—La mirada del médico resplandece con el recuerdo —Quizás también reciba a tú pequeño veamos si nos permite verlo.Mi mirada busca a Richard que sonríe avergonzado con el comen
Richard MüllerMantenerla a mi lado todo el tiempo me da la seguridad que nadie se atreverá arrancármela de mi lado, pero no soy ingenuo la amenaza permanece constante mientras ese hombre que se dice ser su padre nos ronde, aunque debería sentirme mucho más tranquilo por encontrarme en mi país la sensación latente de peligro no se pierde.Hace unos días Jonathan se marcho dejando a Brayan bajo nuestro cuidado las cosas no fueron fácil al principio no solo yo tenia mi cerebro perturbado por las emociones de tenerlo en casa también sentía de la misma manera una chica que desde el primer momento marcho limites por eso se había desatado una guerra campal entre Lina y Brayan que simplemente no se soportan.Y en medio quedamos nosotros viendo como día tras día esos dos hacían cualquier cosa por provocarse uno al otro incluso comenzaba a resultar gracioso para quien los viera.Finalmente, Brayan Bonnet había topado con la horma de su zapato la muchacha es una tormenta de destrucción a su alr
Jonathan Bonnet—¿Sabías que ella era mi prima? —Suelto entre dientes como saludo volviendo mi rostro en su dirección para ser testigo de su reacción —Permitiste que me casara con Alejandra conociendo que somos familia ¿Por qué demonios lo permitiste papá?La tristeza que acude a su mirada me confirma todo es culpable no tiene ninguna excusa valida en este momento para negármelo.—Jonathan hijo déjame explicarte como son las cosas…—¿Qué me explicaras? Que tanto tú y mi madre ayudaron al enfermo de Mario Costa con sus horribles planes que me hicieron casarme con mi propia sangre… esa mujer… que deprecie al principio culpándola por alejarme de Melissa. Que luego se convirtió en algo muy diferente para mi papá tienes una idea de mi sufrimiento por esa mujer cada día ¡La deseo con desesperación! Y duele tanto que siento morir cada día que pasa, pero además ahora mi sufrimiento no era suficiente también tengo que verla en los brazos de otro hombre a eso sumamos que debo vivir con la culpa
Jonathan Bonnet—¿Qué quieres Melissa? —Destilo en mi tono de voz mi disgusto por su presencia.—¿Qué te parece puedo querer Jonathan? ¡En serio! Pretendes continuar con tú negativa de aceptar tú paternidad de nuestro hijo. Por seguir tras los pasos de una mujer que le importas menos que un grano de polvo.—Bravo querida —Digo aplaudiendo —Sabes donde precisamente golpear no es así Melissa, pero en algo debo darte crédito no estas equivocada. Porque para esa mujer no significo nada ¿Quieres saber porque exactamente sucedió eso Melissa? —Pregunto bajito como si me interesara un demonio quien pueda escucharnos —Porque cuando esa mujer era mi esposa en lugar de estar con ella en casa me estaba revolcando contigo.Mi exabrupto le borra toda risita tonta del rostro transformándolo en una mueca dolorosa por un momento me parecen ver lagrimas formándose en sus ojos esos que una vez pensé amar, cuando se concentraban en los míos, pero fue en un tiempo diferente en el cual solo me estaba engaña
Richard Müller—Desde cuando comenzaron a llegarte llamadas al teléfono —Ella me dirige una mirada inquieta — ¿Por qué no me habías dicho nada mi amor?—No quería preocuparte suficiente tienes con estar prácticamente las veinticuatro horas del día pendiente de cualquier cosa a tú alrededor Richard —Detiene de repente sus palabras con un ligero suspiro —Lo siento no hice bien ocultándolo.Arrastro a mi esposa entre mis brazos consolándola entiendo que esta pasando por su linda cabecita se siente culpable por lo que está sucediendo.—Mi amor —Envuelvo su pronunciada cintura —No debes ocultarme absolutamente nada entiendes, aunque pienses que con eso me ahorras más estrés te estas equivocando —Elevo su mandíbula con mi mano para que sus ojos queden al nivel de los míos —No tener conocimiento de esas cosas son peligrosas mi niña por ahora no me ocultes nada por más insignificantes que las consideres es por nuestro bien hasta que consiga poner un alto a tú padre —Asiente sin realmente devo
Richard MüllerMantengo mi rostro tranquilo escuchando todo lo que tiene por decir Jonathan esperando algo más que su corazón derramarse en suplicas por una oportunidad de demostrarle a mi mujer cuanto la ama.—Hermano no tienes porque seguir escuchando se trata de un hombre borracho —Insiste Axel—Acaso no dicen que los niños y los borrachos suelen decir la verdad —Le recuerdo, aunque no me guste porque a quien está demostrando su debilidad por Alex, aunque ella jamás se entere de la existencia del audio.—Si tienes razón —Axel se interrumpe cuando el ritmo monótono en la voz de Jonathan cambia dando paso a algo perturbador.—Hoy también conocí a mi padre el hombre que preño a mi madre y es la razón que naciera el viejo quiere concederme un deseo como compensación a los años fuera de mi vida ¿A que no adivinas mi deseo? —Se escucha una leve risa —Aunque no es necesario que lo hagas porque se trata de ti…Ahí termina el audio haciendo que cada bello en mi piel se erice como respuesta
Jonathan BonnetFinalmente tengo mi respuesta del porque mis padres se doblegaron ante Mario Costa, pero otra interrogante acude a mi cabeza. Por qué el interés de ese hombre porque Alejandra permanezca atada a un matrimonio conmigo. Solo una razón valida se me ocurre que se corresponde a una persona que se identificó como mi padre mientras bebía licor en ese bar hasta perder la conciencia.Carlo Dubois… ese hombre que dice ser mi padre.—Jonathan quiero que siempre tengas presente que sin importar que por tus venas no corra mi sangre eres mi hijo y aunque te falle permitiendo que ese hombre me manipulara a su antojo estoy dispuesto a lo que sea por no volver a permitirlo.—Papá confió en tú palabra pero que va a suceder cuando el abuelo se entere que no soy su nieto perderás absolutamente todo por mi culpa —Le recuerdo —Todo el dinero pasara a manos de Alejandra y Brayan.—¿Cuándo te enteraste? —Sus ojos se dilatan con sorpresa al escucharme —Olvídalo si te enteraste de que ella era
Richard Müller—Mi amor —Murmura bajito mi niña —Creo que incluso dormido no dejas de frotar mi estomago ¿Porque te gusta hacerlo?—Supongo que es una manera de estar cerca de ella también —Sonrío ocultando mi rostro en su cabello que me recibe con un delicioso aroma a vainilla —Sentirla a través de tú piel la hace mas real me recuerda que pronto seremos padres.—Pues papá cuando nuestra pequeña nazca posiblemente no dormirá hasta que tú la hagas dormir como todas las noches en mi vientre porque estas acostumbrándola. Será una niña muy consentida por su papá.—Bueno no tengo ningún problema mi trabajo es cuidar de mis chicas primero dormiré a nuestra pequeña y después me dedicare hacer travesuras con su mami —Digo desplazando mi mano entre sus pechos desnudos.—¡Richard! —Dice golpeando mi mano suavemente —Eres terrible como que travesuras es el ejemplo que quieres darle a tú hija —Me regaña mientras continuo con mi exploración de su cuerpo desnudo que se refugia en cucharita contra m