Tratamos de recuperar nuestras respiraciones de nuevo, en la misma posición, sus manos suben a mi vientre acariciándolo – estás bien – besa mi cuello, mi hombro y mi espalda, coloco mi mi mano sobre la suya – ¿nos damos un baño? – vamos –
Después del baño trate de vestirme de nuevo – ponte algo ligero – Mateo esta helado afuera – tienes razón – miramos que me pueda colocar - ¿Y esto? – me da un vestido gris de mangas largas, no es ajustado asiqué lo acepto, me lo coloco unas pantys debajo y unos zapatos bajos, Mateo me pasa una chaqueta negra – te ves bien – me besa la frente – en unos meses no me quedará nada – por eso saldremos de compras ahora – me agarró de su cuello para besarlo – cálmate o no saldremos de aquí hasta el lunes – me río en sus labios – está bien, entonces vamos – BrunoNo pude haber viajado en pero fecha, el país a dónde fui estaba en pleno invierno, es aún más helado que el nuestro, el terreno que me enviaron a ver estaba con todo al dia, eran casiTerminamos de tomar desayuno y nos vamos, Mateo hoy debe ir a la sala de ventas, mientras que Alexandra y yo nos vamos a la oficina – ¿ cuándo cambiarás tu oficina Bruno? – estoy bien dónde estoy pequeña – pero la puedes cambiar a mi piso, no me gusta estar sola, y Andrea aporta bastante a eso - ¿A pasado algo? – solo entra cuando la llamo – ¿Y si bajas tu oficina? – ¿y si hago que suban la tuya? Hay mucho espacio en ese piso – abría mucho ruido – es mejor que el silencio – la sala de conferencias quería más pequeña – la quiero cambiar de piso, es molesto cuando hay juntas de departamento y después todos quieren entrar en mí oficina - ¿Seríamos solo nosotros? – también una para Mateo, pasa la mayor parte de la semana trabajando con nosotros, estaremos juntos pero en oficinas separadas - ¿Hablaste con él? Le quería preguntar a la hora de almuerzo – sabes que no lo puedes presionar cierto – lo se, es solo que pasa más tiempo acá que en su propia oficina en la sala de ventas, todo el t
Termina el mes y está todo listo para las nuevas oficinas, la mía en medio de ellos las que se conectan con puertas internas, afuera de cada una están nuestros secretarios y asistentes, en el mismo piso ahora tenemos una pequeña sala de conferencias y algunas oficinas más pequeñas para los asistentes de Bruno, que al llevar la firma de abogados junto a su padre se trae a su equipo de vez en cuando, cuando los casos son muy grandes y necesitan su espacio. Ya no paso tan sola en la empresa, cada vez pasan más tiempo en mi oficina que en las suyas, nos llegan proyectos nuevos, lo que me parece cada día, los nuevos directores de áreas tienen muchas ideas nuevas. Estoy a un par de días de irme de pre natal, Bruno y Mateo están dejando todo listo para irse conmigo, el padre de Bruno y su hermana se aran cargo de la firma de abogados y de la empresa, Helen y Kaios de la sala de ventas, aún que tanto como Bruno y Mateo estarán siempre pendientes de Sus puestos, si los necesitan
Mateo Creo que el calor aumenta cuando duermo cerca de Bruno, y como no si estamos abrazados. Me fijo que Alexandra no está en la cama, últimamente se levanta por las noches para ir al baño, la voy a ver pero no está ahí, bajo las escaleras ya que hay luz abajo, estaba frente al gran ventanal que da la vista a las luces del centro, está a penas con un top y un pantalón dejando a la vista lo que para ella es una inmensa barriga - te ves hermosa – le digo abrazándola levantando si barriga enorme, la siento suspirar - ¿Estás muy cansada? – si, pero no puedo dormir – ven vamos al sofá – la siento entre mis piernas haciendo que descanse su espalda y le doy un masaje en el cuello, pasan unos minutos y la veo que ya está dormida, despertamos en el mismo sofá, pero con una manta sobre nosotros, al parecer Bruno despertó antes y nos tapó, también se acostó con nosotros en el sofá entre las piernas de Alexandra abrazando su vientre. Pasan los días y ella parece estar más cansada, y como no
Estacione donde primero encontré, me dirigí a la consulta de Sophia y aún no habían llegado, ella también la estaba esperando, segundos más tarde entran con ella – por que tanto alboroto – dice Alexandra – te caíste por las escaleras – le digo asustado – resbale e el último escalón y caí sentada, no es para tanto – yo diré si no es para tanto ahora acuéstate acá – le ordena Sophia, los bebés están bien, no hay problemas internos en ella tampoco – es una caída, no es para menos Alexandra, de ahora en adelante te quiero lo más quita posible, en una semana estarán en tus brazos, si no quieres que salgan antes quédate quieta – le ordena de nuevo. Salimos con ella en silla de ruedas en la entrada está Adán con la señorita Galia, que me miraba extrañada – señora ¿Cómo está? – le pregunta Adán preocupado – bien, gracias Adán, no fue nada, ya sabes cómo son de exagerados – amor te caíste, no es para menos – me alegro que este bien… - Señorita Galia, ella es mi esposa Alexandra – ya no
Bruno Adán me llama asustado, dijo que Tatiana estaba en la oficina y Mateo estaba furioso, volví rápido, lo había ido a dejar ya que en un par de horas teníamos una reunión ahí mismo y nos iríamos juntos. Camino rápido a su oficina la puerta estaba entre abierta, y al parecer llegué a tiempo ¿estarás tratado de chantajearme? – quiero algo, a ti, y no me importa si estás casado con el Papa, menos me importa Alexandra, se que me decías tanto como yo a ti – se le acerca a Mateo tratando de tocarlo, pero él la agarra del brazo – eso no te conviene Mateo, si salgo con una respuesta negativa de esta oficina esas fotos estarán por todos lados – inténtalo y estarás en la ruina Tatiana Galis – le digo ya molesto – usas el chantaje en frente de un abogado - ¿Enserio quieren que todo el mundo sepa de un escándalo en la famosa familia Makris? - ¿Quieres jugar sucio? Bien, después no ruegues Tatiana – le digo tomándola del brazo echándola de la oficina – Adán ella no vuelve a entra
Alexandra Por fin es el día, estoy en el quirófano lista para que nazcan los gemelos, Mateo y Bruno están a mi lado – muy bien aquí viene el primero – nos dice Sophia, una de las enfermeras lo limpia y lo cola en mi pecho – es tan pequeño – después de unos segundos lo saca – ya estará contigo aún falta uno – dice la misma enfermera. Mateo y Bruno se van con ella para verlo mientras lo limpian y lo visten, no pasaron muchos minutos cuando escucho a Sophia de nuevo – bien aquí viene el segundo – este llora al salir, tiene miedo, estaba tan cómodo dónde estaba que lo entiendo, pero para mí ya era hora, se calla solo cuando lo colocan en mi pecho – siente tu calor y tu corazón – dice la enfermera que lo trae, a él también se lo llevan junto a su hermano, y sus padres están con ellos – listo chica es hora de sedarte, tus bebés estarán bien – la escucho decir solo para quedarme dormida con la vista hacia ellos. Despierto adolorida, ya no tengo ese gran bulto, pero todo d
Ya cumplen un mes y los gemelos son demasiado tranquilos, tiene. Toda la atención que quieren, Mateo y Bruno volvieron al trabajo, lo disminuyeron lo más que pudieron para poder estar en casa con nosotros, Diana y las otras chicas son la mejor ayuda que podría tener, sola no podría, solo ella vive con nosotros. Hoy los dos llegarían temprano, pero se les adelanta el padre de Bruno – Alexandra como as estado – hola Bruno, bien gracias – querida vengo por ti y los niños - ¿para ir donde? – necesitan tomar aire, vamos a almorzar con Rodinni – me gusta la idea pero hoy Bruno y Mateo llegarían a almorzar – no te preocupes por ellos ya les hable y me pidieron que viniera por ustedes – bien pero en tu auto no podemos ir todos – con diana arreglamos a los niños para salir, es un alivio, tiene razón llevo más de un mes sin salir, la recuperación de la cesárea a sido lenta, necesito salir. Llegamos y veo de nuevo a una recepcionista nueva - ¿Tienen reservación? – pide la chica – s
Así pasaron varios meses, trabajo, los niños y la casa, y sexo mientras Diana paseaba con los niños. Diana sugirió que volviéramos a la mansión, ahí hay más espacio para los niños, que en cualquier momento empezarían a caminar, ahí tienen mucho espacio, pero a mí me trae malos recuerdos. Cada semana voy a empresa aún que sea una sola vez, me debo volver a acostumbrar a ir, voy sin los niños, ellos ya tienen 6 meses y Diana se hace cargo mientras no estoy. -¿Y si hacemos guarderías para las que son mamás? – le propongo a Bruno – así no tendrían que estar tan preocupadas de sus niños lejos – serían más eficientes, me agrada la idea – Nos propusimos un nuevo proyecto, en vez de seguir con la compra de otras empresas y marcas estamos tratando de impulsar lo que tenemos, a resultado muy bien estos últimos años. -señora le traigo el informe del área de comunicaciones – ¿pasó algo? – si, lleva meses sin cambios, de echo está en bajada – reviso sus cifras por algunas horas y hago