Estimadas lectoras y lectores Es momento de que Massimo y Luciano se reencuentren, es momento de que hablen y se escuchen.
Luciano, al sentir el abrazo de su padre, no supo cómo reaccionar, primero intentó zafarse, pero algo extraño lo invadió, un calor extraño llegó. Algunos recuerdos le llegaron, recuerdos de un Massimo abrazándole, un Massimo jugando con él, platicando con él de niño, un Massimo arreglándole la corbata, un Massimo despidiéndose de él cuándo se iba a Londres, aun en contra de su propia voluntad.Luciano intentaba resistir ese abrazo, pero aquel extraño calor, aquella extraña sensación, lo invadió por un momento, el miedo constante que sentía, desde no recuerda qué tiempo, se disipó. Finalmente, Luciano comenzó a llorar…- ¿Cómo me puedes amar? Por años lo único que hice fue sacarte de tus casillas y recordarte lo mejor padre que era Leonardo, lo mejor padre que era Franco, respiraba, vivía solo para hacerte la vida imposible… Massimo, ni siquiera te he llamado papa en años, ¿Cómo puedes amarme? Sí, tengo todo en contra. - dijo Luciano con toda la sinceridad que podía.- Luciano, el día q
- Antonio Moretti es una buena persona… Me cuesta aceptarlo, sus métodos son muy poco ortodoxos, pero sé que es buena persona. Su esposa, Ángela, le hace honor a su nombre, ella es un ángel, ha cuidado bien de mí, me ha adoptado como un hermano, ella es una buena mujer. – Dijo Luciano sinceramente.- ¡Lo sé! Sin ella yo no estaría aquí… Supongo que la vida la puso en tu camino para que conocieras lo que es tener una persona cuerda en la vida. – Dijo Massimo de forma tan sería que no pareciera una broma.- ¿Qué hacemos ahora, Massimo? – Preguntó Luciano sin saber qué más hacer o decir.Sin esperarlo, Massimo volvió a envolver a su hijo con un abrazo y dijo:- Haremos lo que tú quieras hacer, yo no voy a imponerte nada, tú sabrás en qué momento nos quieres visitar. Claro, debe ser en el tiempo que tengas libre de la escuela y es verdad, no quiero que sigas descuidando esa parte de tu vida. ¿Sabías que Laura está estudiando a distancia? – Dijo Massimo en forma apacible.- Finalmente, ¿Qué
Aldo acababa de llevar a Paloma y las chicas a casa de Valeria, incluso Celeste y las niñas se habían unido al grupo. Todas pretendían acompañar a Palma en el proceso del diseño de su vestido de novia. Mientras aquello sucedía, Aldo recibía una llamada de un conocido contacto. - ¿Teodore? ¿Cómo estás? - Dijo Aldo al contestar.- ¡Bien, Aldo, bien! - Respondió Teodore tranquilamente. - Oye, ¿Está tu padre en casa? ¿Está ocupado? - Pregunto Teodore un tanto nervioso en la voz.- Si él aquí está, ¿Quieres que te lo pase? - Pregunto Aldo un tanto intrigado.Teodore jamás preguntaba, solo llegaba.- Preguntaba si estarían en casa, es que hay un tema que debo revisar con ustedes. - Dijo Teodore volviendo a mostrar un tono nervioso.- ¡Claro! ¿En qué tiempo llegas?-Estoy llegando de Dubái, solo voy al hotel por mi reserva y salgo para su casa.Aldo y Pietro esperaban en su estudio la llegada de Teodore, quien había anunciado que vendría a la boda de Aldo y Paloma, pero llegaría días antes;
El camino al café le pareció eterno a Luciano, quien realmente necesitaba llegar y salvar a Almendra de la entrevista inquisitoria de Ángela. Le preocupaba que ella le contará cosas penosas de su pasado, le preocupaba que Almendra terminará asustándose del tipo de hombre que era Luciano en manos de Franco y Leonardo.Durante el camino, Antonio solo abrió la boca para preguntar por la chica y sabía que debía responder, de lo contrario, el hombre lo averiguaría por su cuenta.- ¿Quién es Almendra Pastrana? – Dijo Moretti sin detener su paso.- Es… Es… Es una chica con la que estoy comenzando a salir… - Dijo el joven con sinceridad.Massimo se asombraba, Luciano no era así con él, ellos dos nunca tuvieron una plática de ese estilo, pero no podía juzgar, solo quería observar.- Según sé, llevas semanas frecuentándola en el café donde vas a hacer tus tareas en lugar del apartamento. – Dijo Moretti dando a entender que ya sabía todo y más valía no ocultar nada.- Sí, pero apenas comencé a sa
--- Emiratos Árabes (Días antes) ---Teodore y Fátima se encontraban en el Penthouse desayunando, Ali había salido por algunos pendientes. El joven sabía que, si bien su padre y madre se habían vuelto a reencontrar y este había decidido convertirla en su esposa, sabía que ambos necesitaban un espacio para poder entenderse.Ali sabía perfectamente que su padre era un hombre duro y serio, mientras su madre era una mujer muy tímida y dulce. Ella había hecho su mejor labor en criarlo con amor y respeto, pero sabía que su madre nunca pudo olvidar a su padre, por lo que nunca busco rehacer su vida, además que ahí era un tanto difícil teniendo hijos y un pasado no tan bueno.- Fátima, ¿En qué piensas? – Dijo Teodore viendo a la mujer perdida en sus recuerdos.Ella volteó y lo miró, bajó la mirada de inmediato y respondió…- En nada mi señor… Es solo que… - Dijo con un poco de timidez.El hombre, al verla, no sabía cómo reaccionar, era claro que Teodore no es que nunca hubiese estado con una m
En casa de los Barzinni, todas las mujeres que conocían a Paloma llegaron, ahí, ya estaba todo un equipo listo para llevar a cabo los deseos de la hija de Marco Barzinni, lo cual Valeria anticipaba. Valeria sabía que una vez que su hija aceptara, Marco se volvería loco y sería capaz de traer a la mismísima Carolina H. para diseñar su vestido.- Marco, mi vida, trata de calmarte, todo saldrá bien hoy… - Dijo una Valeria que lo abrazaba por detrás mientras esta veía cómo su hija y varias mujeres llegaban con ella.- Es que sí, si debí ir por Carolina, Paloma de niña quería que cuando se casara, ella quería un vestido como el de esa muñeca diseñada por ella. – Dijo Marco, todo nervioso.- Amor… Estamos a una semana de que Paloma se case, además recuerda que está embarazada y sus hormonas son al 100. Dejemos que esto fluya con naturalidad, ¿sí? Ya ganamos un poco con el hecho de que ella aceptase usar mi vestido.- Sí, pero solo espero que a quien contrate le haga “El vestido soñado…” – Di
Paloma sonrió y abrazó a su mamá. Ella tenía razón, este era un momento especial y tal como si las barreras se hubieran caído, todas las mujeres que en la vida de Paloma aparecían, estaban reunidas ahí.- ¡Oh, antes de que lo olvide mamá, papá…! Tengo que presentarles a alguien muy especial que hoy nos acompaña, bueno, nos acompañan. – Dijo Paloma, tomando de la mano a Aria y haciendo señas a Daniela y su pequeña Ele. – Ella es Aria, la verdadera madre de Pietro, y ellas son Daniela y su hija Ele, ellas vivieron con Aria en un pueblo de Italia.- Marco y Valeria pusieron cara de no entender de lo que su hija hablaba, así que Paloma rápidamente explicó que Massimo había encontrado a la verdadera madre de Pietro y que la había llevado a casa para que estuviera con su hijo.Valeria y Marco quedaron sorprendidos ante tal situación, solo sonrieron, desconocían las noticias del momento, pero se alegraban porque las cosas estuvieran mejorando de a pocos en la familia Pellegrini.- Bueno, buen
La tarde fue amena, fue larga, se hicieron y se descartaron varios diseños, luego de varios postres y bebidas sin alcohol, todas estaban ayudando a Paloma con comentarios, risas y buenos momentos, quien viera esa reunión, se sorprendería, ya que ahí estaban las mujeres de los hombres que marcaron la vida de Valeria.Aquellas solo trataban de ser buenas invitadas, todo por el bien y la felicidad de una chica que, sin saberlo, vino a unir a dos familias que jamás se hubieran visto juntas nuevamente.Mientras aquello se suscitaba en aquel salón, Marco, por su lado, cuidaba pacientemente a todos los niños. Bastaba decir que, en el caso de Gio, Enzo y Ele, no necesitaba más que alimentarlos, ya que eran unos niños bien portados.Pero en el caso de las y él bebe, las cosas se complicaban un poco, puesto que, si lloraba uno, en cadena, se iban despertando todos.- Gio, por favor, ¿me ayudas a pasarme las toallitas? Creo que alguno de estos bebes, ya requiere un cambio urgente de pañal. – Dijo