—Em, entonces, ¿tu cara larga y de preocupación es de qué? —cuestiona Liam, Estamos en la compañía donde él trabaja, vine hacer una entrega que perdí en el ascensor que hablaba y terminé en la oficina del jefe rubio de voz gruesita—. Puedes confiar en mí, jamás haría algo para lastimarte, créeme —sonríe amablemente.Ay, porque eres tan lindo. Creo que me estoy enamorando de ti.Suspiro regresándole la sonrisa, me siento en el sofá con la espalda erguida colocando una mano encima de la otra sobre mi pierna, mis piernas están cerradas y mi pie derecho está detrás de mí pie izquierdo. Liam me ve confundido y empieza reírse.—Te sientas como una persona de la realeza, ¿y la corona en donde la dejaste? —comenta divertido, empezamos a reírnos a carcajadas, nerviosa veo como estoy sentada y me doy una cachetada mental.Estúpidos protocolos reales.—Eso es sinónimo de elegancia, bruto —respondo divertida, se hace el ofendido y se levanta como si se fuera a desmayar. Le sigo el juego y empezam
EdwardHe trabajado para la realeza escocesa por 14 años, conocí a estos monarcas porque mi padre era un sirviente de ellos. Con esfuerzo y dedicación, él me sacó adelante, pagó mis estudios y cualquier cosa extra.¿Mi madre? Bien, gracias por preguntar. Ella se fue con un Barón para Inglaterra, aunque la he perseguido y tratado de entablar una relación con ella, solo he conseguido hablar con el buzón de su celular.Fui el encargado por 11 años de ser el caballero real de la princesa Amara. Guardé mis sentimientos por ella hasta que su madre se enteró. Y por orden de su majestad tuve que abandonar el palacio.—¿Aparte de plebeyo eres bruto? —suspira exasperada—. Tienes terminantemente prohibido acercarte a mi hija. ¿Qué le puede ofrecer un Don nadie a una princesa? —pregunta asqueada.Aprieto mis puños tensando la mandíbula. No tengo permitido levantar la cara mientras ella esté hablando.—¡No lo trate así, es una persona también! —alzo mi rostro y veo a mi pequeña Emili entrar molest
Hablar con Edwar siempre me ayuda, ya sea para bien o para mal. A pesar de que no es mi sangre siempre se ha preocupado por mí. Durante todos estos años en silencio amó a mi madre y cuando me di cuenta quise armar el show del año. Lo confronté, él, tranquilamente lo aceptó sin ningún temor. Lo único que me pidió fue que le diera la oportunidad de conocerlo, para que viera que sus intenciones con mi madre eran genuinas.Alaric se dio cuenta 3 meses después que yo. La diferencia es que mi hermano es boxeador. El pobre de Liam recibió una golpiza esa vez. Lo malo es que mi madre no lo ama. Nosotros tres decidimos ser hermanos sin importar las diferencias sociales. Tenemos personalidades diferentes y nos compenetramos a la perfección.Aunque entre nosotros no existen los títulos reales, el respeto que él nos tiene es grande. Por eso, después de hora y media de invitarlo a la casa, accedió de mala gana."¿Será por qué le dijiste que Misael piensa que se acuestan? O sea, por lo menos ten se
—¡Deja de agachar la cabeza cuando alguien te habla! ¡Odio verte así! Te he dicho mil veces que conmigo no uses esa actitud de sirviente —lo reprendo—. Estoy molesta porque no me dijiste que regresarías a Escocia y serías custodio de alguien más. ¡Te exijo que me digas por qué vas a regresar a ese país! —pido de mala gana, Edward se levanta de la silla, pero no se mueve de su lugar.Los chicos entran de nuevo por no saber qué pasaba. Confundidos y preocupados se quedan en la sala sin saber qué hacer.—Prinzessin, die willkommensparty ist für dich. Deine majestät macht diesen tanz im willkommensmodus zu dir. Deine hoheit, deine majestät schickt dich zurück in den palast* —responde, nervioso y mirándome a los ojos preocupado.»"Princesa, es la fiesta de bienvenida para usted. Su majestad está haciendo este baile en modo de recibimiento. Su alteza, su majestad la está enviando de regreso al palacio"«Entro en pánico clavándome las uñas en mis manos. Empieza a faltarme el aire y a ver tod
Existen varios tipos de tontas, por ejemplo; las tontas plebeyas que mueren y arruinan todo con el plebeyo. Las tontas princesas que mueren y arruinan las cosas con el princeso, perdón, príncipes. Y después están las tontas como yo, que son las princesas que arruinan todo con el plebeyo que probablemente le guste.Tengo miedo de admitir lo que me pasa con él, no sé por qué, pero me da miedo que cuando lo admita la reina por arte de magia se entere de las cosas y otra vez arruine mi relación. Nunca pude tener amigos ni fuera ni dentro del palacio. Mientras estuve en la universidad viví en el campus. Durante ese tiempo empezaron a circular rumores falsos, pero igualmente fui desprestigiada. La reina jamás me dio la oportunidad de explicarme, ella simplemente los creyó, pero por un momento me dejó vivir mi vida.Por eso temo que si le doy una oportunidad a lo que sea que tengamos, ella interfiera y honestamente, no quiero que otra persona que quiero salga lastimada. Tengo derecho de tene
MisaelLas palabras que me dijo Emili me dejaron mal y no tengo porque negar. Admitir que esa niña me gusta esta demás, pero es que no sé cómo actuar frente a ella. Tengo miedo de que un día decida desaparecer o morirse. Porque déjenme decirles que tengo suerte para que los que están a mí alrededor se mueran y me abandonen sin mi permiso.No entiendo porque me dijo que regresáramos a cuando nos conocimos. ¿Cómo puede hacer de la vista gorda después de que prácticamente le dije que me gustaba? Mis acciones hablan por sí solas. Más romántico no puedo ser."En ningún momento le has dicho que te gusta, solo le has recostado tu pene erecto. Del resto, actúas como un perro rabioso", habla la voz de mi cabeza.¿Y qué más quiere?Tengo 31 años, la época de ser romántico ya me pasó. Ahora soy el tipo rudo que le gusta una niña con ínfulas de princesa.No puedo mostrarle el mundo rosa que ella espera ver, es tan joven y una morena hermosa. Me cabrea el hecho de que tiene puros amigos hombres co
Soy amante de las novelas románticas, de humor, melodramas, trágicas con finales inesperados y muertes de protagonistas o personajes secundarios que llegamos como lectoras a amar. Durante mis noches encerrada, Edward me llevaba ese tipo de novelas para hacer la estadía un poco más pasable.Cuando conocí a Sasha tenía 17 años, estaba en mi primer año de universidad y tenía la personalidad de las protagonistas de las novelas que me había leído. Aunque era poco expresiva y actuaba como una muñeca perfecta debido a mi crianza, igualmente me amó sin darle importancia. Él me enseñó a que siguiera mi corazón cuando algo me perturbaba, que no confiara tan rápido en las personas y jamás mostrara mi verdadero yo hasta sentirme segura. Nos amamos tanto que él había decidido dejar a su familia y yo había decidido renunciar a mis títulos nobles. Nos íbamos a escapar a algún lugar donde solo fuéramos nosotros dos y no ser encontrados... Pero, no todo sale como lo planeamos. Un día él desapareció de
La mayoría de las veces podemos decir que cuando una cosa se soluciona y estas bien con esa persona, algo, por más que increíble que lo parezca, siempre sale mal por otro lado. Yo soy el vivo ejemplo de ello. Estoy bien, o mejor dicho, intentando solucionar los problemas con Misa, pero... ¿ven que siempre hay un pero? Esta vez es con Rachel, honestamente no sé qué le pasa. En estos días lo único que supo hacer fue tratarme mal, no hablarme y discutir por cualquier motivo conmigo.Todos se han dado cuenta del cambio de actitud que ha tenido ella. Es grosera, por absolutamente todo explota y grita a cualquiera. Misa y Liam me preguntaron qué le pasaba porque en la compañía parece estar más al borde. Siempre está molesta, estresada y resulta incómodo tratar de hablarle porque cuando lo haces, te ignora.Han pasado dos semanas desde que mi hermano y Edward se fueron para Chile. Los primeros 4 días estuvieron en contacto seguido, pero el resto del tiempo me enviaron emojis molestos, pensat