Después de unos 10 minutos de viaje, llegaron a una casa ligeramente grande de dos pisos, con rejas negras altas en la entrada, la casa estaba pintada de color amarillo pálido con el techo de color naranja, tenía grandes ventanas, un jardín amplio en la entrada con una fuente acompañada de algunos rosales y en la entrada podías apreciar una pequeña escalinata.
Al estacionar al automóvil, Isabela y Roger bajaron para entrar a la casa siendo imitados por Maximiliano, quien miraba curioso la casa. Por su parte la chica saco las llaves de su bolsillo y abrió la puerta de la entrada.
- Ya llegamos – anuncio la castaña mientras dejaba entrar a sus acompañantes.
- Bienvenidos mis cielos – saludo Jazmín mientras les sonreía, donde la mujer llevaba en esos momentos una blusa de vestir color naranja pálido, con una falda negra larga donde ambas prendas eran tapadas por un mandil blanco de holanes con bolsillos con dibujos de canarios y llevaba unas pantuflas blancas.
- Hola mamá, perdón por avisarte de improvisto – se disculpó la chica acercándose a su madre para darle un beso en la mejilla.
- Tranquila, no te preocupes por eso – dijo y en eso miro a su nieto – ¿y cómo le fue en la escuela a mi Roli?
- De nuevo lo llevaron a la dirección por pelearse – argumento la castaña antes que su pequeño contestara esa pregunta mientras se desabotonaba los primeros dos botones de su blusa para buscar relajarse un poco – eso me recuerda, ¿dónde está papá?, ya le dije que no deje que Roger lleve ese garrote de policía a la escuela – comento, enojada subiendo las escaleras para ir a buscar a su padre.
- Esta en el estudio Isa, jeje – comento mientras veía a su hija ir a confrontar a su esposo – ¿y que tenemos aquí? – dijo ahora prestando atención al rubio que estaba parado en la puerta.
- Un atrevido sin importancia, abuela – comento Roger mientras caminaba hacia la mayor para pedir algunos mimos y mirar de forma arrogante y retadora al rubio.
Justo en eso Maximiliano por alguna razón sintió un insano impulso de lanzarse a pelear con ese niñito que solo buscaba molestarle cada que podía; pero busco controlarse para actuar como el adulto, que se supone que era donde busco fingir que esas palabras no le afectaron y sonreírle a la
- Me llamo Maximiliano Winchester, mucho gusto señora – comento mientras hacia una ligera reverencia al hablar.
- Oh, eres el jefe de mi Isa, interesante – dijo ahora afilando su mirada mientras miraba de arriba abajo al rubio – Roli ayudarías a la abuela a colocar los cubiertos por favor – le pidió al menor, el cual solo asintió y fue a la sala.
- Am... ¿pasa algo? – comento el rubio algo incómodo al notar la mirada que le dedicaba a la mujer.
- Nada, solo es curioso notar como mi nieto te considera una amenaza, eso significa que si estás aquí es porque estas interesado en mi hija o me equivoco – comento mientras se acortaba la distancia entre ella y el rubio – cierto, disculpa mis modales, mucho gusto me llamo Jazmín Williams, un gusto Maxi.
- ¿Eh? ¿Williams? – pregunto sin entender, ya que si recordaba bien se supone que las costumbres de ese país es que la mujer adopte el apellido del esposo, pero notaba que ese no era el caso.
- ¿Pasa algo Maxi? – pregunto divertida la castaña al adivinar lo que pensaba el rubio, ya que sus facciones demostraban sus pensamientos y emociones.
- Ah, no, no es nada – dijo rápidamente buscando tratar de no ser tan obvio con sus intenciones.
- Creo que ya sé que pasa – en eso Jazmín se acercó al rubio para susurrarle – eso te preocupaba al conocer a mi Roli, ¿o no?, pero descuida ella está disponible – hablo alejándose mirando el sutil sonrojo en el rubio haciendo que riera divertida por eso – sabes yo siempre quise un rubio en la familia, así que tú ya tienes mi apoyo - comento muy animada - pero dudo que los chicos te la pongan fácil – comento algo triste.
- Espere, eso quiere decir que… ¿Isa es madre soltera? – pregunto intentando contener su emoción por ese descubrimiento.
- Pero no está disponible y menos para un atrevido como tú – dijo el pequeño pelinegro regresando al pasillo, ya que habia cumplido su tarea de poner los cubiertos en la mesa – abuela eso es traición – le acuso.
- Yo no he hecho nada malo, solo le decía a Maxi que tiene mi consentimiento para intentar enamorar a tu mamá.
- Pues yo no te dejo y se acabó la discusión – declaro el menor.
- Y si te demuestro ser digno, me dejarías – se aventuró a preguntar el rubio, mientras pensaba en como rayos llego a esa clase de situación… jamás en su vida había tenido que negociar nada con un niño… pero bueno suponía que siempre había una primera vez para todo, ¿o no?
- Eso lo veo difícil, pero esperare con bajas expectativas que llegues a impresionarme - comento el menor subiendo las escaleras para dirigirse a su habitación a dejar su mochila.
- Oh, eso es algo que no se ve todos los días, se nota que tú eres alguien especial – comento de nuevo la mujer mirando al rubio.
- ¿Porque lo dice?
- Roger no accede a ninguna petición a menos que sea de alguno de los miembros de la familia – comento y en eso se escuchó una pequeña alarma – y justo a tiempo, Maxi me ayudas a servir la comida.
- Claro – respondió este sin entender muy bien, pero al menos se alegraba de poder aprendido algo de la vida personal de su ángel.
Mientras la cena se servía de un momento a otro se empezaron a escuchar algunos balazos y golpes en la parte de arriba, por lo que el rubio miro con preocupación a la mujer que estaba más concentrada en servir la cena, la cual al notar la preocupación del rubio decidió explicarle.
- Tranquilo, es algo normal cuando Isa y mi esposo se ponen a pelearse, así que mejor terminemos de servir la cena ya que tras la riña lo mejor es algo de comida casera y caliente para contentarse.
Maximiliano miro confundido a la castaña antes de que por alguna razón tuviera escalofríos poniendo su cara ligeramente azul mientras pensaba como una discusión de golpes y balazos era normal; donde pensaba que tal vez su pellejo estaba en peligro al conocer a su futuro suegro si quería seguir con ese plan de buscar conocer y conquistar a la bella Isabel, aunque también tenía curiosidad por saber ¿qué clase de hombre era su futuro suegro?
- Cuantas veces tengo que pedirte que no dejes que lleve esa cosa al colegio – volvió a gritar la castaña mirando con enojo a su padre, el cual estaba sentado detrás de su escritorio mirándola enojado.- A mí no me das ordenes Isabela, entendiste – se quejó ahora poniéndose de pie y aporreando sus manos en su escritorio.- Pues comportarte como un adulto y enséñale mejores cosas a tu nieto – le reclamo ella igual acercándose al escritorio y aporreando sus manos en este.- Estas llegando al límite de mi paciencia, Isabelita – comento el pelinegro con enojo mientras sacaba su pistola verde favorita y apuntaba a la chica.- Vez… exactamente a eso me refiero, por eso casi todos los días mandan a Roger a la dirección – volvió hablar la castaña sin importarle que su padre le apuntara con un arma.- No me importa lo que digas yo decido que es lo mejor para mi nieto – dijo ahora jalando del gatillo, por lo que la chica rodo sus ojos antes de buscar moverse de forma ágil para esquivar rápidame
Justo cuando estaban por iniciar el segundo round de la pelea: “quien tiene la razón”, se escuchó el suave golpe de la puerta, con lo cual el ruido de la pelea se frenó de golpe y después de unos segundos se escuchó un adelante, por lo que el pequeño pelinegro abrió la puerta, fingiendo inocencia. - La abuela dice que la cena esta lista – dijo el pequeño mirando la habitación, la cual se veía toda desordenada, pero tanto su abuelo como su madre contrastaban con el lugar al verse impecables sin ninguna arruga en sus ropas. -Ya bajamos – dijo Enrique mientras acomodaba de nuevo su sillón favorito en su lugar. - ¡Ah…! - en eso la cara de Isabel se puso azul, al recordar un detallito importante – demonios me olvide de él – murmuro saliendo rápido de la habitación, cosa que le pareció demasiado extraña al pelinegro mayor por lo que miro al pequeño con una ceja arqueada esperando respuesta. - Es que el jefe de mamá nos acompañara en el almuerzo – comento el menor divertido, ya que sabia
Opinión de Isabela: ¿Quién diría que en menos de un mes mi vida podría dar un giro de 360°?, esa pregunta tenía una respuesta muy clara y al mismo incierta en lo personal. Ahora esta era todo menos tranquila y aburrida, todo gracias a la visita de mi jefe al corporativo, el cual parecía un miembro más en mi familia porque todos los días me acompañaba a almorzar a casa o buscaba pasar los domingos metido en mi hogar; aunque si era sincera me estaba gustando ese cambio, pero al mismo tiempo me asustaba llegar a acostumbrarme porque sé que la presencia de mi rubio jefe no sería permanente. Convivir con Maximiliano Winchester me enseño que este parecía tener triple personalidad: * Una era esa personalidad seria y madura, con la cual si aparentaba los 25 años que decía tener, donde resaltaba muchas de sus facciones recordándole a la castaña que el rubio era un hombre muy apuesto; esta personalidad siempre aparecía cuando estaban trabajando o porque el rubio se perdía demasiado en sus pens
Ya eran las 6:09 pm, cuando un automóvil deportivo color negro estaciono en la entrada de la casa, donde un rubio con un smoking color azul rey, pantalón del mismo color, zapatos negros bien lustrados con camisa blanca y corbata negra; bajo corriendo del vehículo para tocar la puerta. Unos segundos pasaron y por ella apareció Jazmín sonriendo al ver al rubio en la puerta. - Buenas noches Maxi – le saludo contenta, en esta ocasión ella estaba usando una blusa de manga larga y cuello en v de color rosa pálido con un pantalón negro un poco ancho y sus clásicas pantuflas rosas. - Buenas noches señora Jazmín – saludo el rubio. - Llegas tarde “señor atrevido”– le regaño Roger apareciendo detrás de su abuela, este tenía un short negro, una sudadera blanca, usaba calcetines blancos y unas pantuflas de patitos. - Gustas sentarte, le iré a decir a Isa que ya llegaste – dijo Jazmín mientras subía las escaleras para ir a ver a su hija. - Mas te vale no intentar nada raro con mi mama – le ame
Por primera vez en su vida Giotto se levantó temprano por su cuenta, aun en su mente repasaba todos los hechos ocurridos la noche anterior: fue el lanzamiento del nuevo producto, su Isabela estaba bellísima en ese vestido rojo, la noche fue un éxito para la compañía, después lo de ese sujeto, recordarlo solo lo ponía de malas ya que solo se separó de su ángel por unos momentos porque ella fue por algo de beber y por poco un idiota se pasaba de listo intentado golpearla; la verdad no sabía si era por esos entrenamientos que los pelinegros le hacían tomar, pero solo supo que ya estaba sujetando a ese tipo y está por romperle la muñeca de no ser porque su Isabel lo detuvo y ahora que lo pensaba ¿quién era ese pelinegro que igual le apoyo cuando confronto al imbécil ese…?, le recordaba a alguien pero no podía identificar ya que nada más lo miro de reojo pero su amada parecía conocerle ya que lo llamo por su nombre, pero tampoco lo recordaba, bueno supuso que no sería importante. En eso su
El reloj marcaba las 9:50 am cuando el auto deportivo negro de Maximiliano estaciono en la entrada de la residencia Williams, el rubio salió de su vehículo y tranquilamente llego a la entrada para tocar la puerta esperando que su ángel o que la señora Jazmín le abrieran, pero en esta ocasión fue otra persona la que le abrió. Si no fuera porque esa situación sonaba loca podría jurar que tenía enfrente a su mini-demonio versión adulta, pues la puerta fue abierta por Roger, el cual estaba siendo cargado por un hombre que se parecía mucho al pequeño exceptuando porque este tenía los ojos grises y su cabello era de rubio-platinado y para horror del pobre rubio ambos le miraban con una sonrisa ladeada la cual no podía significar nada bueno ¿o si…? -Buenos días – saludo nervioso Maximiliano al sujeto que abrazaba al menor para luego mirar al pequeño a los ojos - Hola Roger. - Hoy si llegaste temprano – le contesto divertido el infante. - Bienvenido Maxi – le saludo Jazmín apareciendo detrá
Ahora que había llegado al parque de diversiones y para molestia de Enrique, el rubio les iba ganando en esa ridícula competencia de pacto silencio que hicieron los 4 hombres desde que se subieron a los automóviles… “Marcador: Williams 0, Winchester 1” Un boleto VIP en el parque de diversiones significa tener acceso total a todas las instalaciones del lugar e igual poder subirte a las atracciones las veces que desees y comer donde quieras. El parque de diversiones FunPark era un lugar realmente hermoso dedicado a la diversión y el entretenimiento para que familias, parejas o cualquier persona que desee disfrutar de un día agradable ya que esta contaba con una gran diversidad de construcciones y múltiples servicios para entretener a las personas de todas las edades. Muchos de los visitantes te dirían que era un lugar relajante ya que realmente pasabas un buen día divirtiéndote en los juegos, solo paseando por todas las instalaciones del lugar o disfrutando la comida que los diversos
En ese momento se encontraba mirando con odio a la castaña que caminaba a un lado de su madre y con ese mocoso. Ya que lo pensaba, hizo bien en negar a ese maldito mocoso, ya que ni se parecía a él… bueno lo único que heredo de sus genes fue la tonalidad de sus ojos azules, ya que su padre tiene ese mismo color de ojos.La razón por la que estaba siguiendo a la familia era sencilla: quería vengarse de la humillación que le hizo pasar la castaña la noche anterior, ya que no era posible que él… el hijo del gran magnate Johnson, uno de los hombres más cotizados por toda mujer… el cual fue echado de la fiesta de Winchester y lanzado a la calle como un simple perro.Por lo que ahora quería buscar el momento ideal para vengarse de la chica dándole un golpe donde realmente le dolía: con su hijo. Así que decidió espiarla ese día en su casa, donde noto que el rubio ese fue a su casa y para su mala suerte estaba toda la familia de la chica en casa… maldijo su suerte, pero no se rindió ya que de