(…)Luego de una breve explicación de donde estuve todos estos días y un promesa de no volver a marcharme. Comenzamos con los arreglos de la habitación de los bebes, habían pasado solo unos dias, pero fue suficiente tiempo para que el vientre de Noah creciera un poco mas.Termine completamente enamorada de esos movimiento en su vientre, esas patada y esos latidos de pequeños corazones. Decorar la habitación de los pequeños nos tomó cerca de dos dias, trate de enfocarme solo en eso durante todo ese tiempo. Tengo que admitir que de vez en cuando pensaba en lo ocurrido en casa de mi padre, y en sus palabras, claro. Sabía que todo era producto de mi imaginación, pero no podía olvidar las palabras del bastardo de mi padre.Unos dolores en el vientre de Noah hicieron que terminara por llamar a Vicenzo para ponerlo al tanto de todo lo que estaba sucediendo. Fue impresionante lo rápido que llego a casa, puedo decir que llego en una abrir y cerrar de ojos.—¿Dónde se encuentra? —parecía estar
Narra Hela:Cuatro meses después:Muchas cosas ocurrieron durante los últimos meses del embarazo de Noah, tanto malas como buenas, tanto buenas como inolvidables. Pero no todo en estos meses que trascurrieron como horas fueron tan agradables.La mujer de mi amigo comenzó a tener pesadillas recurrentes con un pequeño, cosa que provoco que me encontrara mucho mas pendiente de ella por las noches. Trataba de cuidarla en todo momento porque con el avance de su embaraza podía notarla mas débil, temía mucho por la salud de mi amiga y de sus pequeños.Estaba convencida de que esas pesadillas no era pesadillas, sino parte del pasado de Noah, un pasado que estaba regresando poco a poco, todavía Vicenzo estaba pensando en como le diría que no era hija de Federov, una verdad como la que le esperaba a Noah era tan cruda, y tan dolorosa como un disparo al corazón.Nuevos aires comenzaron a correr por estos alrededores, todo iba cambiando, pero lo único que no podía cambiar era lo que habia en mi c
(…)Aproveche que los bebes estaban dormidos para salir al pasillo para hablar con el equipo de guardias que se encontraba de turno, ya que nos encontrábamos todos aquí necesitaba seguir cuidando la finca. Tenia que mantener a Leonard lejos de la casa donde muy pronto estarían los pequeños, no estaba muy segura de lo que estaba tramando, pero en unos pocos dias me encargaría de averiguarlo.—No me importa — traté de no gritar —Quiero un recorrido a cada hora, nadie tiene que acercarse, asegúrate de mantenerme al tanto.Un poco molesta guarde mi teléfono notando a solo unos metros a Alessandro, un poco insegura me acerque hasta donde se encontraba para preguntarle sobre el estado de Noah.—¿Sabes algo sobre el estado de Noah? —me crucé de brazos.—Aun no despierta. Vicenzo se encuentra con ella.—Mantenme al tanto de todo —me di la vuelta dispuesta a marcharme cuando su voz me detuvo.—¿Entonces te marcharás? —lo observé de reojo —¿Solo asi?—Eso no es asunto tuyo, Alessandro —me di la
Narrador:Dos días después.Los doctores, al determinar que Noah se encontraba fuera de peligro, autorizaron a la nueva familia volver a su hogar. Hela no perdió tiempo, comenzó con los preparativos para el regreso a la finca, a pesar de encontrarse muy agotada, se mantuvo firme al cuidado de la familia de su amigo.Al sentir un mareo que logro distorsionar su vista, camino con mucho cuidado a la cuna de los pequeños para dejar al pequeño Ares. Se aferró a la esquina de la cuna esperando que esa sensación la abandonara, desde hace dias había estado ocultando los síntomas de una peligrosa enfermedad que lentamente despertaba dentro de ella.—Señorita —molesta, llevo su mirada a la entrada, encontrando a un grupo de enfermeras y un doctor —Necesitamos revisar a los pequeños antes de darles el alta.—Bien —tuvo que alejarse de las cunas, ya que las enfermeras habían comenzado a tenerle un poco de miedo —Pero asegúrense de ser muy cuidadosas con ellos.—Claro, señorita —las enfermeras dij
(…) Mientras Vicenzo trataba de tranquilizar a su mujer, Hela había tenido que limpiar todo el lugar, deshacerse de algunos cuerpo y tener que preparar el cuerpo sin vida de aquella joven. Por un momento se quedó viendo todo el lugar sin creer que todo aquello fue producto de un ataque de ira de Noah.El tercer miembro nuevamente tenia que encontrarse al frente de la situación a pesar de estar completamente agotada.—¿Qué hacemos con el cuerpo de la joven, señora? —ella caminó con un semblante neutro hasta donde se encontraba el cuerpo de la joven que no aparentaba mas de 21 años —Es la hija de Fedorov.—Averigua si tiene mas familiares envíen su cuerpo —un grupo de hombres estaba a punto de marcharse, pero Hela los detuvo —Hagan lo mismo con los demás — los hombres asintieron —Asegúrense de limpiar todo este lugar —cerro los ojos al sentir un mareo —¡Vamos que sea rápido!Con una mirada erguida camino hasta el interior de la gran mansión, al sentir un líquido caliente saliendo por s
Narra Hela:Sujete mis manos por detrás de mi espalda observando como Noah comenzaba a dirigirse a aquel lugar, necesitaba saber la verdad, todos en algún momento necesitamos una verdad. Logre hablar lo suficiente con ella, para tratar de hacerla entrar en razón, pero como puedo detener a alguien que se parece tanto a Vicenzo, aunque le dije que no era un buen momento para hablar con aquel sujeto que había matado a sus padres, Noah necesitaba hacerlo.Con pasos tambaleantes me dirigí hasta la cocina para beber un poco de agua, pero la silueta de Alessandro me detuvo, se encontraba con la mirada perdida por aquel ventanal.—Ya es muy tarde —se giró para verme —Ve a descansar.—La que tendría que descansar eres tú —camine hasta quedar a su lado, encontrando lo que estaba viendo —Terminaras por enfermarte.Observe por unos segundos a Vicenzo, quien se encontraba sentado en los escalones de la Glorieta.—Hela —le dio una mirada discreta —No siento nada por Noah.—Quieres un regalo o ¿algo
(…) Tres horas después. Me quede viendo los resultados de los exámenes, sin duda estaba muy jodida, pero lo bueno de vivir en este mundo era que te acostumbras a las malas noticias. Aunque el doctor hablara de posibles tratamientos que podia tomar, nada tenia sentido, lo único que quería hacer en estos momento era regresar a casa. No esa maldita casa donde crecí y viví una mierda de vida, sino esa casa donde estaba mis amigos, esos adorables pequeños y….ahora no me importa decirlo, pero también quería ver a Alessandro.—Con estas pastillas lograremos controlar los mareos —me entrego un frasco de pastillas —Si lo desea puedo incluirla en los programas de…—No importa —tome unas pastillas —Agradecería que me diera suficiente medicamento para controlar los mareos.—Se que muchas veces la noticia puede ser muy dura, pero..—Doctor —me quede viéndolo —Se muy bien lo que es la muerte, no necesito que trate de animarme —me levante del asiento —Agradecería que esto quedase aquí, no quiero q
Narra Hela: El ganador de nuestro pequeño encuentro fue Vicenzo, aunque trate de derribarlo en múltiples ocasiones, el primero miembro logro darme un golpe en el pecho provocando que volara unos metros del lugar. El dolor fue leve, dejándome saber que Vicenzo se habia estado contenido, todo este tiempo se contuvo de hacerme daño. —¡Vicenzo! —Noah se me acerco preocupada —Ale...¡Ale te encuentras bien! —Eso...Eso —sonreí al ver a mi amigo —¡Estuvo increíble! ¿Que te parece 2 de 3? —Es suficiente por ahora —Vicenzo se acercó para ayudarme a levantarme, un gesto que nunca antes lo había hecho —Ve a ponerte hielo en ese golpe. Aun sobándome el golpe en mi pecho camine hasta el interior de la casa, viendo ese gesto de desaprobación en el rostro de Alessandro. Solo giré los ojos antes esa mirada, sabia que terminaría regañandome. —¿Te encuentras bien? —lo ignoré para seguir mi camino —Déjame ayudarte de seguro, ese golpe dejará marca. —Ñiñiñi, ñiñi —logre llegar hasta el recibidor, pa