Narrador:Dos días después.Los doctores, al determinar que Noah se encontraba fuera de peligro, autorizaron a la nueva familia volver a su hogar. Hela no perdió tiempo, comenzó con los preparativos para el regreso a la finca, a pesar de encontrarse muy agotada, se mantuvo firme al cuidado de la familia de su amigo.Al sentir un mareo que logro distorsionar su vista, camino con mucho cuidado a la cuna de los pequeños para dejar al pequeño Ares. Se aferró a la esquina de la cuna esperando que esa sensación la abandonara, desde hace dias había estado ocultando los síntomas de una peligrosa enfermedad que lentamente despertaba dentro de ella.—Señorita —molesta, llevo su mirada a la entrada, encontrando a un grupo de enfermeras y un doctor —Necesitamos revisar a los pequeños antes de darles el alta.—Bien —tuvo que alejarse de las cunas, ya que las enfermeras habían comenzado a tenerle un poco de miedo —Pero asegúrense de ser muy cuidadosas con ellos.—Claro, señorita —las enfermeras dij
(…) Mientras Vicenzo trataba de tranquilizar a su mujer, Hela había tenido que limpiar todo el lugar, deshacerse de algunos cuerpo y tener que preparar el cuerpo sin vida de aquella joven. Por un momento se quedó viendo todo el lugar sin creer que todo aquello fue producto de un ataque de ira de Noah.El tercer miembro nuevamente tenia que encontrarse al frente de la situación a pesar de estar completamente agotada.—¿Qué hacemos con el cuerpo de la joven, señora? —ella caminó con un semblante neutro hasta donde se encontraba el cuerpo de la joven que no aparentaba mas de 21 años —Es la hija de Fedorov.—Averigua si tiene mas familiares envíen su cuerpo —un grupo de hombres estaba a punto de marcharse, pero Hela los detuvo —Hagan lo mismo con los demás — los hombres asintieron —Asegúrense de limpiar todo este lugar —cerro los ojos al sentir un mareo —¡Vamos que sea rápido!Con una mirada erguida camino hasta el interior de la gran mansión, al sentir un líquido caliente saliendo por s
Narra Hela:Sujete mis manos por detrás de mi espalda observando como Noah comenzaba a dirigirse a aquel lugar, necesitaba saber la verdad, todos en algún momento necesitamos una verdad. Logre hablar lo suficiente con ella, para tratar de hacerla entrar en razón, pero como puedo detener a alguien que se parece tanto a Vicenzo, aunque le dije que no era un buen momento para hablar con aquel sujeto que había matado a sus padres, Noah necesitaba hacerlo.Con pasos tambaleantes me dirigí hasta la cocina para beber un poco de agua, pero la silueta de Alessandro me detuvo, se encontraba con la mirada perdida por aquel ventanal.—Ya es muy tarde —se giró para verme —Ve a descansar.—La que tendría que descansar eres tú —camine hasta quedar a su lado, encontrando lo que estaba viendo —Terminaras por enfermarte.Observe por unos segundos a Vicenzo, quien se encontraba sentado en los escalones de la Glorieta.—Hela —le dio una mirada discreta —No siento nada por Noah.—Quieres un regalo o ¿algo
(…) Tres horas después. Me quede viendo los resultados de los exámenes, sin duda estaba muy jodida, pero lo bueno de vivir en este mundo era que te acostumbras a las malas noticias. Aunque el doctor hablara de posibles tratamientos que podia tomar, nada tenia sentido, lo único que quería hacer en estos momento era regresar a casa. No esa maldita casa donde crecí y viví una mierda de vida, sino esa casa donde estaba mis amigos, esos adorables pequeños y….ahora no me importa decirlo, pero también quería ver a Alessandro.—Con estas pastillas lograremos controlar los mareos —me entrego un frasco de pastillas —Si lo desea puedo incluirla en los programas de…—No importa —tome unas pastillas —Agradecería que me diera suficiente medicamento para controlar los mareos.—Se que muchas veces la noticia puede ser muy dura, pero..—Doctor —me quede viéndolo —Se muy bien lo que es la muerte, no necesito que trate de animarme —me levante del asiento —Agradecería que esto quedase aquí, no quiero q
Narra Hela: El ganador de nuestro pequeño encuentro fue Vicenzo, aunque trate de derribarlo en múltiples ocasiones, el primero miembro logro darme un golpe en el pecho provocando que volara unos metros del lugar. El dolor fue leve, dejándome saber que Vicenzo se habia estado contenido, todo este tiempo se contuvo de hacerme daño. —¡Vicenzo! —Noah se me acerco preocupada —Ale...¡Ale te encuentras bien! —Eso...Eso —sonreí al ver a mi amigo —¡Estuvo increíble! ¿Que te parece 2 de 3? —Es suficiente por ahora —Vicenzo se acercó para ayudarme a levantarme, un gesto que nunca antes lo había hecho —Ve a ponerte hielo en ese golpe. Aun sobándome el golpe en mi pecho camine hasta el interior de la casa, viendo ese gesto de desaprobación en el rostro de Alessandro. Solo giré los ojos antes esa mirada, sabia que terminaría regañandome. —¿Te encuentras bien? —lo ignoré para seguir mi camino —Déjame ayudarte de seguro, ese golpe dejará marca. —Ñiñiñi, ñiñi —logre llegar hasta el recibidor, pa
(…) Meses después:En un abrir y cerrar de ojos los pequeños gemelos cumplieron su primer año de vida, no entendía como habia pasado tan rápido el tiempo. Parecía que había sido ayer cuando los sostenía en mis brazos con mucho cuidado, y ahora ambos ya comenzaban a querer dar sus primeros pasos.—Todo en orden —sonreí al sentir las manos de Alessandro en mi cintura, y luego ese beso en mi mejilla que hacía que mis piernas temblaran.—¿Qué haces alguien puede vernos? —me gire para regalarle una sonrisa.—Vicenzo y Noah se encuentran muy ocupados en estos momento —solté una carcajada al escuchar eso.—Ares...Ares —Alessandro tomo en brazos a Azrael dándome tiempo para que corriera detrás de Ares —No hasta que tengas 18 años jovencito.El pequeño solo soltó un gruñido cuando lo levante del suelo, con pasos lentos me acerque hasta Alessandro.—Hola, tío Alessandro —emití una voz graciosa —Quiero que me digas que me quieres mucho.—Ahora entiendo por qué Ares siempre termina escapando de t
(…)Me quedé parada delante de la casa de mi padre preguntándome como había llegado a este lugar, esta vez no hubo alucinaciones, solo silencio, un silencio tan aterrador que convertía a esa casa solitaria en protagonista de mis mas terribles pesadillas.El rechinido de la puerta principal hizo que mi piel se erizara, lleve mi mano al interruptor, pero al tratar de presionarlo este no funcionaba. Con la mirada acostumbrada a la oscuridad caminé hasta el interior, dirigiéndome hasta las escaleras, buscando el lugar que años atrás fue mi habitación, habían pasado demasiados años desde la última vez que estuve en el interior de esta m*****a pocilga, y aun podia sentir mi sufrimiento impregnado en las paredes.Cada rincon de esta casa tenía mi miedo y traumas impregnados, esta lugar era un símbolo de todo mi dolor.Recuerdo:El golpe de mi padre logro arrojarme casi al otro extremo de la habitación, trate de levantarme escupiendo un poco de sangre. Tuve que sujetar mi vientre al sentir el
(…) Al salir del cuarto de baño me encontré con Alessandro sentado en la cama, con una expresión de tristeza.—Yo nunca seria capas de usarte, Hela —quería salir corriendo, pero algo me tenía pegada en el mismo lugar —Admito que estuve enamorado de Noah, pero ya no siento nada por ella.—No hace falta que me des explicaciones, solo….— no quería llorar, pero me sentía tan lastimada por todo lo que estaba sucediendo conmigo —Necesito un poco de espacio.No permití que dijera nada, solo apresure mi paso a la salida, dejándolo solo en la habitación. A medida que me acercaba al pasillo de la cocina, trate de aparentar que todo estaba bien, demostrar una sonrisa falsa era mi especialidad, aun mas en estos últimos meses.Al abrir la puerta de la cocina me encontré a Vicenzo colocando a los pequeños en su mesita para desayunar.—Buenos dias —me acerqué hasta donde se encontraba los gemelos —¿Dónde estuviste metida? Alessandro estuvo preguntando por ti, al parecer le da miedo dormir solo, dijo