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La encontraré
Relata Ava:Entré en nuestra habitación para hacer las maletas, intentando contenerme, no era muy fácil, la garganta ya me dolía, mi cuerpo me dolía, mi corazón me dolía.—Ava, ¿Qué haces?. — Alex entró y me tomó por un brazo.—Te ahorro trabajo y tiempo. — Respondí ceñuda, esa era la mejor manera de controlar las lágrimas, mostrándome enojada. Me solté de su agarre para continuar recogiendo mis cosas.—¿Qué? ¿Pero qué dices? Yo no quiero nada con esa mujer…—Por ahora… — Empecé, pero él me interrumpió.—¡Ava, por favor!. — Me tomó por los brazos, para verme fijamente a los ojos, con esa penetrante y azul mirada que causaba tanto en mí. — Yo te amo, yo no quiero nada con esa mujer, tienes que creerme.—Eso dices ahora, como todos los demás, llegará un momento en que terminarás cediendo, siempre pasa así… Entonces, te voy a ahorrar el mal momento de dejarme. Expliqué intentando sonar tranquila. Esa era mi realidad, eso era lo que había vivido por años. No iba a negar que
En París
Relata Ava:Apenas llegué al aeropuerto de París, encendí mi teléfono, tenía innumerables cantidades de mensajes de mi abuelo, de Alex y de algunos amigos preguntándome en dónde estaba.Me di cuenta de lo incorrecto que fue irme así, pero tenía mis razones, si no me alejaba de Alex, seguramente terminaría cediendo ante él. Y si le avisaba a mi abuelo, él podría terminar por convencerme de quedarme.No me quise arriesgar y salí directo al aeropuerto, aunque todavía sopesaba lo que hacía, puesto que, visitar a mis padres, no sería una situación fácil.Llamé a mi abuelo, rápidamente, con algo de vergüenza.—¿Abu?.—¡Ava! ¡Por Dios! ¡¿En dónde estás?! ¡Nos tienes a todos con el corazón en la boca!.—Lo siento… — Murmuré soltando las lágrimas. — No era mi intención preocupar a nadie.—¡¿Pero en dónde estás muchacha?!.—En París. — Musite cerrando los ojos.—¡¿En París?! ¿Tú estás bromeando conmigo? ¿No es así?.—No, Abu. Estoy en París, vine a visitar a mis padres. — Hubo
Gemela malvada
Relata Ava:Me iba a volver loca, sí, seguramente eso sucedería. Estaba en casa de mis padres y con la única persona con la que podía hablar por momentos, era con Cristina, el ama de llaves, y aunque disfrutaba de los breves momentos de su compañía, la mayor parte del tiempo, me la pasaba sola.Mi madre, siempre estaba en su mundo, arreglando fiestas y eventos, mi padre en la empresa, a duras penas, lograba verlo, en ocasiones. Y yo, extrañaba a Alex, cada día, cada minuto, como si se tratara de una adicción, de la cual sufría por abstinencia.Siempre, pensaba en Alex y todas las noches, lloraba en silencio, añorando su abrazo, su aliento en mi cuello antes de dormir y sus palabras de amor. Inclusive, había días que, de la nada, me daban unos ataques de ansiedad que me empujaban a volver y difícilmente los contenía.Ya había soportado un mes sin Alex. Y aunque le pedí por medio de mi abuelo que no me buscara, todos los días miraba por la ventana de mi habitación, esperando verlo l
Cobarde
Relata Alex:—¿Señor?. — Olivia se asoma con mucho cuidado en mi oficina.—Olivia. — Respondo sin siquiera levantar la vista, estoy concentrado firmando papeles. — ¿Ya hiciste lo que te pedí?.—Sí, señor, ya hablé con su abogado, me dijo que se pondrá en contacto con la señora Joselin Morales y le hará saber sobre su decisión.—¿Y tienes alguna noticia de…?.—No señor. — Me interrumpió, hablando rápidamente. — Todavía no han encontrado nada. — Levanté la vista, ceñudo.—Gracias, ya puedes irte. — La observé serio. Ella prácticamente salió disparada.Suspiré tirándome en mi asiento, debía intentar calmarme, ya hasta Olivia me tenía miedo, pero últimamente el mal humor se había apoderado de mí.No era fácil vivir cada día extrañando a Ava, pero ¿Qué más podía hacer?.La policía no había dado con Mike y Cecil, me parecía normal que Mike se ocultara, pero ¿Por qué lo haría Cecil? Ella fácilmente podría declarar y salir librada con trabajo comunitario o alguna tontería, eso
Recuerdos
Relata Ava:Levanté la vista poco a poco, sintiendo como mis manos comenzaban a sudar, mi corazón repiqueteaba y mi estómago se estremecía, un traje de vestir se abrió paso ante mis ojos. ¡Alex había venido por mí!, La emoción me embargó y de inmediato, los ojos se me llenaron de lágrimas.Subiendo un poco más, un rostro familiar y que no me esperaba, me confrontó, era Ethan. La boca se me secó, sentí vértigo y por un momento, pensé que me caería del columpio, ¿Primero, Eva y ahora, él?. Podría haber jurado que se trataba de Alex, pero parecía que el destino, estaba dispuesto a enfrentarme con mis demonios del pasado.—Ava, volví. — Una sonrisa se dibujó en su rostro.Cerré mi libro con fuerza, de un golpe y me levanté dispuesta a irme, pero Ethan me detuvo, sosteniéndome por un brazo.—¡Ava! ¡Espera!. — Su sonrisa se borró y su mirada se llenó de ansiedad.—¿Qué es lo que quieres?. — Gruñí sin voltear.—¡Nada! ¡Es solo que…! Solo pasaba por aquí, me sorprendió verte
¡Yo amo a mi esposo!
Relata Ava:Pasaron los días y todo se fue de picada, dónde yo estuviera, Ethan aparecía, como un acosador. Inclusive, muchas veces no salía de casa para evitar verlo, por lo que, terminé volviendo a mi encierro.Una mañana, salí muy temprano de casa para ir a una revisión médica, ya llevaba más de cuatro meses de embarazo y el médico me había dado noticias increíbles.Me sentía tan llena de amor, tan feliz, como no lo había estado en mucho tiempo. Según los resultados de los exámenes, hasta ahora, no tenía ninguna complicación.Caminaba de regreso a casa, pensado, que ya era momento de volver con Alex, de compartir este pedacito de felicidad a su lado, si es que Alex no había cedido a Joselin.Aunque en el fondo estaba segura de que eso no sucedería, pero también tenía algo de miedo de como reaccionaría Alex a mi regreso, ¿Me seguiría amando aunque él no estuviera con Joselin o me odiaría?.Cuando ya casi llegaba a casa, nuevamente, Ethan se atravesó en mi camino. De inmediato,
¿Quién carajos eres?
Relata Alex:Era un buen día, mi abogado me había llamado muy temprano para confirmarme le que ya suponíamos, Joselin se había marchado.Solo basto que interpusiera una demanda en su contra por una cuantiosa cantidad de dinero, agregando la atenuante de su acoso y la violación de la orden de alejamiento, eso bastó para que desapareciera tal como había llegado.Aunque todavía no habían dado con Mike, el exnovio frustrado de Ava y su ex amiga Cecil, los investigadores me habían informado que tenían una pista que ya estaban siguiendo.Así que para mí, era un día de logros y estaba tan feliz y ansioso por ver a Ava que comenzaba a preguntarme seriamente si ya era momento de ir a buscarla.Esa mañana fui a la oficina para arreglar unos pendientes, pensaba dejar todo en orden antes de pensar en volar a París para sorprender a mi esposa, cuando la vida me sorprendió a mí.Mi secretaria, Olivia, me llamó.—¿Señor Grand?. — Sonó al otro lado del auricular.—¿Sucede algo, Olivia?.—
¡Alex es mío!
Relata Ava:Me había costado mucho conseguir un vuelo, de hecho, había pasado horas en el aeropuerto esperando, pero no estaba dispuesta a echarme para atrás.En algún momento, pensé que sería genial poder usar el avión privado de Alex, pero ya no tendría gracia, deseaba darle una sorpresa.Por lo menos tuve mucho tiempo, para reflexionar las cosas, para meditar y controlar mis miedos, además pude escoger un lindo outfit que me ayudara a resaltar mi panza, porque pensaba sorprender a Alex con todo, así que me cambié en los baños del aeropuerto.Luego de horas de espera, mi vuelo salió y finalmente, había regresado. Decidí, llegar primero a la casa de Alex, porque era muy temprano y lo más probable, es que Alex seguía allí, seguramente todavía no había salido a la oficina.El vigilante de la entrada se mostró muy sorprendido a mi llegada, supuse que sería por la panza que mostraba, lo saludé con una sonrisa y continúe mi camino.Entré a casa, dejé la maleta en el pasillo y caminé