— ¡Hola! – escucho la voz de mi amiga al hablar con alguien en la puerta.
— ¡Tu no eres Isobel! Aunque no estas nada mal ¿eh? – esa voz, es-es — ¡Permíteme cielo, necesito hablar con mi futura novia! - ¿Qué? Ingresa al apartamento, gloriosamente vestido con su habitual traje de tres piezas en un gris tan oscuro que parece negro, no lleva corbata, pero la camisa color cereza hace que el azul de sus ojos se vea más intenso y su hercúleo tamaño junto a todo ese musculo forjado a fuego por los dioses del olimpo me arrebatan el entendimiento ¡este hombre es un peligro para mí! — ¡Oh por Dios Isobel! ¿Qué es ese atuendo tan horrendo? – miro mi pijama de nubes y un unicornios me siento ofendida — Eso es un insulto a la libido de cualquiera – dice asombrado y la traidora de mi amiga se parte de risa.
— ¿Qué coño haces aquí? – escupo enfadada por irrumpir a las diez de la noche en mi casa y por ofender mi vestuario que es el má
Capítulo 16. Un Buen Plan. Parte 2.Llego al ático enardecido por los besos que nos dimos Isobel y yo, esa mujer me transforma en un monstruo deseos de su cuerpo, pero debo esperar hasta la boda, respetarla hasta que llegue el verdadero momento de tenerla en mi cama, con la variedad que me espera fuera de aquí, puedo esperar. El taxi se detiene al frente del edificio y salgo al aire de la mañana que por algún motivo hoy me parece más fresco y… extraño. No entiendo que me pasa, sin embargo no le voy a dar muchas vueltas ya que estoy molido por haber dormido en ese sofá incómodo. Debo reconocer que el desayuno estuvo delicioso y más cuando los labios de esa hermosa chica estaban de por medio ¡uf, me hace sentir fuegos artificiales!—¿Dónde estuviste? Te llamé mil veces Jacques, me preocupé porque no estás acostum
No sé qué quiere ese hombre, sus ojos me indican que tiene un plan y yo estoy dentro, sin siquiera invitarme por cierto. Cuando se fue esta mañana prometió volver. Espero que lo olvide porque no estoy dispuesta a caer en ninguna trampa que tenga en mente. —¿En qué piensas? – pregunta Sasha —¿En el adonis? Es un príncipe ¿sabes? Se le nota el dinero que ostenta – la miro a los ojos y se da perfecta cuenta de mi enojo por su comentario. —Realmente pienso en que es lo que querrá viniendo aquí y diciendo todas esas tonterías – ella me observa como si tuviese un mono en la cara. —¿En serio Issy? Pues yo lo vi muy claro ¿sabes? – dice poniendo los brazos en jarras y con una mirada de reproche que si no la quita ahora mismo, se la voy a arrancar de un manotazo. —¿Ah si? – asiente —¿Me dirás entonces lo que viste? – expreso con ironía.
Si él nos está dando la bienvenida, quiere decir que el club le pertenece y a mi me lleva el diablo. No puede ser que tenga tanta mala suerte aunque, es imposible que un sitio tan pomposo y exclusivo no le pertenezca ¡si hasta se parece a él!—¡Atrévete a decir que el hombre no quiere conquistarte, esto es lindo! – pongo los ojos en blanco.—A ti todo te parece lindo Nena, a mi tiene que convencerme ¿entiendes el punto? – niega —Quise decir que yo tengo los pies sobre la tierra y tu no Rubia loca – asiente y sonríe antes de captar y ponerse seria.—¡Por lo menos yo le doy oportunidades a la gente… tu no! – contraataca.No voy a continuar con la discusión, en este momento lo que deseo es huir de este hombre que me revuelve las hormonas y no solo me quiere en
¿No entiendo por qué quiero abrazarla?Eso debe ser porque soy lo bastante idiota para creer que me podría ayudar, cuando solo pueden ayudarme mis chicas – con las que me acuesto – aunque no sean… niñas buenas. Mi hermano difiere ante ello y me mandó ser un buen chico con ella, no es que la quiera conquistar, lo único que deseo es que acepte y ya. Tomo la botella de whisky y mi vaso favorito, sirvo el trago, se lo llevo a Isobel que aun moquea sollozando por unas lagrimitas que se me corrieron para poder representar el papel del sufrimiento y entonces convencerla de ser mi novia, de ese modo, engañada y conmovida la llevo al altar. Me acuclillo frente a ella con rostro compungido y sus lindos ojos oscuros observan detenidamente mis rasgos escudriñando algo de lo que no tengo idea, es muy intuitiva, eso quiere decir que debo ir con cuidado para no ser descubierto. Necesito que entienda de
—¡No, de ninguna manera! – se acerca y sube la cara inclinándola hacia atrás para poder verme a los ojos.—Escuche que dijiste querer estrechar vínculos y compartir un poco ¿no? – es más inteligente de lo que creía, mucho más —Este es un buen momento Jacques Hawkins ¿no lo crees? – aprieto los labios, esto n es bueno, pero no puedo negarme, no ahora que se muestra accesible conmigo ¡Aaaaargggg! Voy a nalguear ese lindo trasero cuando pueda, esta la voy a apuntar.—¡Muy bien Srta. Makenzie, vamos todos! – la tomé por el bajo de su espalda y pasamos entre los cuerpos guiándola hacia la salida junto con mi hermano y su amiga la rubia.El guardaespaldas abre la puerta para dejarlas entrar primero y luego a Josep. Hago ademán para entrar y cierro la puerta aplic
—¡Suéltame, deja! – manotea y golpea mi torso como un tambor con los puños ¡me encanta! Es muy pequeña, luego me hace sentir esto tan raro, un cosquilleo en la panza y esta presión rara en el pecho —¿De qué te ríes? – golpea mas fuerte y se lastima por mis duros músculos y ya me cansó jugar a esto, levanto su cuerpo por la cintura pegándola al muro para quedar a la misma altura, parece una muñequita y se ve preciosa asustada.—¡Necesito que hablemos! – niega y trata de zafarse —No seas terca Isobel, permíteme explicarte.Se remueve con furia y trata de patearme, de no haberme dado cuenta me habría noqueado.—¡No, no después que me abandonaste en un auto, encerrada como un animalito que estorba, no quiero que me hables, o que
las cinco de la tarde me doy una súper ducha para vestirme adecuadamente y esperar al supuesto novio que voy a tener, el cual tiene muchas cosas que explicar y decirme antes de que lo acepte. Ya no puedo luchar en contra de la atracción que siento al verlo, al sentirlo, al tocarlo y cuando él me toca a mí. Aun cuando es cierto que tengo mucho miedo ya que ni siquiera había tenido un novio, no sé cómo se hace y mucho menos como llevarlo, pero hoy comienza algo nuevo para mí y espero no equivocarme.—¡Isobel! Date prisa, tienes visita – salgo enfundada en un vestido color rosa pálido a la rodilla con una abertura a cada lado de las piernas, no muy abiertas, mas bien recatado y el escote delantero es en V y un poco cerrado con la espalda, mas ajustado de lo que me gusta. Salgo de la habitación con el cabello planchado y un maquillaje muy tenue.&
Capítulo 23. Verdades, Citas y Besos. Parte 2.—¿Entonces, haremos esto? – su voz es casi un susurro y yo, a pesar de mi condición, siento que dese hacerlo.—Si tu estás dispuesta yo… pues, también – sonrío con eso que las chicas llaman: encanto.—Pero debes recordar que yo no soy de las que se deslumbra, muy por el contrario, tiendo a descubrir más cosas de lo que pretendo – entiendo, es mucho más inteligente y menos cabecita hueca.—Si bueno, yo… quero saber si ¿quieres ser mi novia? – pregunto muy rápido, por primera vez me siento tan nervioso que mi cuerpo hormiguea y me falta un poco el aire, las manos me tiemblan y creo que necesito un minuto.—¿Está todo en orden Jacques? Te ves pálido – y vaya que lo estoy, siento que puedo desmayarme en cualquier momento.—¡Si, lo estoy! – miro sus ojos de un color tan